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Bizcocho esponjoso de cacao puro natural

El cacao natural se distingue del alcalinizado por el sabor, la acidez y el color. Si lo usas en un bizcocho como éste, notarás la diferencia.

No es lo mismo cacao que chocolate, ni tampoco cacao natural que alcalinizado. Si ya con la primera distinción hay a quien se le rompe la crisma, la segunda, más desconocida, puede provocar otros tantos shocks. Pero en realidad es sencillo de comprender: la versión natural no incluye el proceso químico de la alcalinización, conserva todas sus propiedades nutricionales, resulta algo más ácida -y, por lo tanto, menos empalagosa- y su color es más claro y rojizo. También cuesta más disolverlo porque no lleva aditivos que favorezcan su disolución.

El cacao natural marca la diferencia en el bizcocho de hoy, que tiene poco que ver con los mazacotes que nos vienen a la cabeza cuando pensamos en el típico bizcocho de chocolate. Éste es ligero como el viento, suave como la brisa y leve como las plumas. Bueno, vale, igual no tanto, pero lo importante es que no empapuza y que, acompañado de un poco de nata montada, es un postre o una merienda de lujo.

BIZCOCHO ESPONJOSO DE CACAO PURO NATURAL

Ingredientes

  • 6 huevos
  • 30 g de cacao natural ColaCao Puro
  • 200 g de azúcar
  • 100 g de chocolate negro (72% cacao)
  • 100 g de mantequilla
  • 100 g de harina
  • 6 g de impulsor (levadura tipo Royal)
  • Una naranja

Instrucciones

1.
Calentar el horno a 180 grados.
2.
Engrasar un molde redondo con mantequilla y espolvorearlo de harina. Reservar.
3.
Fundir el chocolate y la mantequilla en el microondas en tandas de 30 segundos y removiendo entre tanda y tanda (o al baño maría si no tienes microondas). Reservar.
4.
Tamizar la harina, el impulsor y las dos cucharadas de cacao natural y añadir la ralladura de media naranja.
5.
Mezclar las yemas con la mitad del azúcar en un bol con un batidor eléctrico. Tienen que tomar un color pálido.
6.
Montar las claras con un batidor eléctrico en otro bol. Cuando empiecen a espumar, añadir la otra mitad del azúcar (resulta más fácil montarlas si están frías de la nevera y tienen una pizca de sal). Tienen que quedar a punto de nieve.
7.
Con la ayuda de una espátula y haciendo movimientos suaves y envolventes, mezclar las claras y las yemas.
8.
Luego añadir la mezcla de cacao natural, harina e impulsor y, al final, el chocolate derretido con mantequilla.
9.
Verter la mezcla en el molde y hornear unos 35 minutos o hasta que el bizcocho esté hecho. Dejar enfriar y desmoldarlo. Puedes acompañarlo con un vaso de leche con cacao natural -puedes prepararlo disolviendo primero el cacao en un poco de leche caliente, y luego añadiendo el resto de la leche- o con nata montada.

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