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Sopa fría de tomate y mascarpone con pesto

Ahora que estamos en verano empiezan a ganar presencia de nuevo las sopas frías. La que protagoniza la receta de hoy aprovecha que los tomates están en plena temporada y los une con un poco de pesto.

Es fundamental utilizar tomates que sepan a tomate. No valen tomates que sepan a piña
Es fundamental utilizar tomates que sepan a tomate. No valen tomates que sepan a piñaRAQUEL BERNÁCER
Raquel Bernácer

Probé por primera vez una sopa de tomate en el norte de Europa, ese lugar del mundo donde las sopas sientan tan bien, pero los tomates son de corchopán. La verdad es que la susodicha sopa no estaba mal, pero donde se ponga un gazpacho español, muy español, que se quite lo demás, pensé.

El gran dilema de la sopa de tomate reside en que cuando es temporada de tomates, no apetecen sopas calientes y, cuando es temporada de sopas calientes, no es temporada de tomates. Pero amigos del cuchareo, las sopas frías son un hit veraniego que van más allá de la famosa “sopa de caracol” y su “guatabericonsup” y nos ofrecen infinitas posibilidades de suaves y sedosas cremas que, además de refrescarnos, nos ayudarán en nuestro propósito de consumir cinco raciones de frutas y verduras al día.

Así que esta sopa fría de tomate con pesto viene a engrosar la ya larga lista de sopas frías para el verano. Ni que decir tiene que, si el tiempo se presta, la puedes disfrutar caliente y ponerle unos costrones de pan frito o tostado para darle más consistencia, por ejemplo. Para los que les aterra la acidez del tomate y son de la liga anti-azúcar, os voy a contar un truco que he descubierto hace poco para corregirla. Bueno, lo primero, obviamente, es contar con tomates maduros. Pero si aún así la acidez está subida de tono, pon un poco de nuez moscada en lugar de azúcar: se lo leí a Niki Segnit en su libro La Enciclopedia de los Sabores y vaya cambio, amigos.

Sobre el pesto, ya que te vas a poner, he dejado las cantidades para que te salga una buena porción. Lo que te sobre lo puedes guardar en la nevera, dentro de un recipiente hermético, 3-4 días o congelarlo en una cubitera. Yo hago esto ultimo y va de maravilla sacar un par de cubitos de pesto y echárselo directamente a la pasta caliente o a un salteado de verduras.

Dificultad: ¿Sabes pelar tomates? Pues eso.

Ingredientes

Para cuatro personas

  • 4 cucharadas soperas de aceite de oliva
  • 1 cebolla pequeña
  • 1 diente de ajo
  • ½ cucharada de postre de tomillo seco
  • 1 cucharada sopera de tomate concentrado (15 g) o un par de tomates secos picados
  • 1 k de tomates maduros
  • 700 ml de agua o caldo vegetal o de pollo
  • 80 g de mascarpone
  • ¼ cucharada de café de nuez moscada
  • 1 cucharada de postre de azúcar (opcional)
  • Sal
  • Unas hojas de albahaca fresca y tomates cherry para decorar

Para el pesto

  • 1 diente de ajo
  • 30 g de parmesano rallado
  • 40 g de piñones tostados
  • 15 g de albahaca fresca
  • 120 ml de aceite de oliva
  • El zumo de medio limón
  • Sal al gusto

Instrucciones

1.
Preparar el pesto triturando todos los ingredientes con una batidora. Reservar.
2.
Calentar un cazo o una olla -en la que quepan los tomates- con agua. Hacer una cruz en la base de los tomates con la punta del cuchillo. Cuando el agua empiece a hervir, introducir los tomates durante un minuto, pasarlos a un recipiente con un baño de agua y hielo, pelarlos y luego picarlos. Retirar las pepitas para que quede una sopa más fina.
3.
Pelar y picar la cebolla y el ajo. Calentar el aceite de oliva en una olla y añadir la cebolla. Sofreír durante 10 minutos, sin que se dore. Añadir el ajo picado, cocinar 1-2 minutos más, e incorporar el tomate concentrado y los tomates picados. Tapar y cocinar a fuego medio, dejando que haga chup-chup unos 10 minutos.
4.
Añadir el agua o caldo y hervir a fuego lento, tapado, unos 20 minutos, removiendo de vez en cuando. Añadir el mascarpone y triturar bien.
5.
Si no has quitado las pepitas, pasar la sopa por un chino y devolverla al fuego. Añadir la nuez moscada y la sal. Añadir el azúcar si aún sigue ácida. Hervir a fuego lento 5 minutos más. Probar y terminar de corregir la sazón si hiciese falta.
6.
Servir con el pesto por encima y unos tomates cherry picados.

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Sobre la firma

Raquel Bernácer
Es dietista-nutricionista, cocinera y divulgadora. Máster en Nutrigenómica y Nutrición Personalizada por la Universitat de les Illes Balears y actualmente cursando el Máster en Nutrición, Medicina y Salud Hormonal de la Mujer por la Universidad de Murcia.

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