Vinos de supermercado que valen la pena (y otros de los que mejor huir)
El ‘súper’ no es el sitio más adecuado para encontrar buen vino, pero a veces viene bien comprarlo allí. Esta miniguía clasifica 15 botellas de grandes superficies en tres categorías: dramas, del montón y besos de uvas
El dinero no da la felicidad, pero sirve para comprar vino, que siempre ayuda. Aunque no soy partidaria de adquirir el elixir de Baco en el lineal de un supermercado, puesto que en general los preservan tan mal que no los dejan envejecer con dignidad, hay que reconocer que es práctico hacerlo cuando vas a llenar tu carro semanal con cosas a veces menos apetecibles (pero tan necesarias como yogures, pollo, servilletas o detergente).
Llevo años probando vinos y he hecho un pequeño análisis de algunos de los más económicos que te puedes encontrar en tu tienda sin caer en los típicos y archiconocidos nombres de siempre. Aunque el mundo vinícola durante años ha estado enranciado —y anclado en un lenguaje que hace que parezcan Góngora con gorro y camiseta de calavera, como el señor Burns cuando se disfraza de Jimbo Jones—, yo no voy a hablaros de si saben a “frutos rojos”, “madera de silla de Luis XIV”, o a “salpicadero de Dacia”, pero sí los voy a clasificar en tres grupos.
Comencemos por los dramas de la cosecha
Atardecer, Roble 2022. Uva: tempranillo. Precio: 4,20 euros en Mercadona. Un vino DO. Ribera de Duero con tres meses de crianza en roble francés. Suena muy fino y “oh là là”, pero en este caso sale un tempranillo muy correcto, concretamente correcto para tirar por el fregadero. Que su color es rojo rubí creo que es lo más bonito que puedo escribir sobre él. Bodegas Vilano hace unos vinos extraordinarios (por ejemplo, el Vilano Black, un tinto joven también envejecido en roble, es un poco más caro pero vale la pena). Pero este… ejem.
The Guv’nor. Uva: tempranillo. Precio: 2,85 euros. Un Valdepeñas de Félix Solís —a la venta también en Mercadona—, una bodega muy viajada que lo mismo hace vino en La Mancha que en Sudáfrica, Chile o Nueva Zelanda. Se desconoce el tiempo de barrica, es un vino del año, joven. Su nombre en teoría significa “el mandamás”, y en su etiqueta aparece un señor con aspecto de malo de Lucky Luke que, según nos cuentan, “gobierna su territorio con aplomo a pesar de su encantadora corrección, lo que transmite un cierto sentido de cautela”. No sabemos exactamente qué quieren decir con eso, pero de lo que hay en la botella, que ellos llaman “sedoso y estructurado”, podemos decir que si no te gusta el vino es perfecto, porque no sabe a vino. Puro azúcar, se bebe como quien bebe zumo de moras. Si me preguntáis si está rico, ¡Sí! ¡Todo con azúcar está mejor! Pero no sabe a vino.
Cepa Lebrel, crianza 2018. Rioja. Uva: tempranillo. Precio: 2,79 euros (Lidl). 12 meses en barrica. Elaborado por bodegas Ondarre. Se supone que es el ganador a la mejor selección de vino en gran superficie 2018 —aunque no hemos conseguido descubrir dónde, y mira que internet es grande— y “en boca, es amplio con taninos redondos y de paso agradable con buena acidez”. En lo último estamos de acuerdo: es ácido como un hierro oxidado y amargo como un divorcio en una telenovela, lo tiene todo.
Juntos. Uva: 100% garnacha de Aragón. De Valencia. Precio: 3,99 euros en ALDI. Vino joven, sin crianza. Elaborado por Bodegas Volver. En Vivino dicen que combina con ternera, pasta, cordero, carne de caza o aves. Por aquí nos hace pensar más en sopa, resfriado y mantita. El primer impacto es agradable, dulce, pero hacia el final del trago amarga. ¿Habéis probado alguna vez el Apiretal? Pues es la misma sensación: es un vino complicado.
Vinos del montón: no van sobre alfombra roja pero sí se les puede poner un tapete de bienvenida
Verema, criado en ánfora. Uva: monastrell. Alicante. Precio: 4,99 euros en ALDI. Tiene carácter, fuerte, después de la primera copa empieza a brotarte pelo en el pecho y —si no la tenías ya— se te pone voz de hombre. Si te gustan los vinos intensos, este lo es.
Comportillo, Reserva 2016. Uva: principalmente tempranillo, aunque también lleva Graciano y Garnacha tinta. Precio: 4,10 euros. Un Rioja con 24 meses de crianza en barrica de roble —americano y francés, tiene la doble nacionalidad— y 12 meses en botella. A ver cómo lo explicaría: ¿conocéis el refrán que dice que el tuerto es el rey en el país de los ciegos? Este vino es el tuerto del Mercadona, la verdad, no está malo, pero tampoco es un vino que yo compraría si tengo otras opciones (sobre todo si tiene que acompañar alguna comida de sabor delicado).
El Pájaro Rojo. Uva: mencía de cepas de 30 y 40 años. Precio: 8,45 euros. Se puede comprar en grandes superficies como Carrefour (también en vinotecas físicas y online, este vino juega en ambas ligas). Un DO Bierzo fermentado con levaduras autóctonas en depósito de acero inoxidable, que pasa después cuatro meses en barrica de roble francés y tiene muy buenas valoraciones en general. Estoy de acuerdo en que Finca Losada elabora unos tintos fabulosos, pero yo no termino de pillarle el punto a este: es fresco pero me parece un pelín pasado de acidez. El que lleva el nombre de la bodega me encanta, aunque cuesta un poco más, sobre los 13 euros.
Gamellón. Uva: monastrell y syrah. Precio: 2,99 euros en Lidl. Un DO Jumilla de Finca La Solana, elaborado por unas bodegas —Luzón— cuyos orígenes se remontan a principios del siglo XX. Es joven, dulce y ligero, con inigualable relación calidad precio. Ellos le llaman “muy afrutado y fresco, suave, glicérico y carnoso, con taninos maduros, redondos, equilibrada acidez, sensaciones delicadas y sabrosas”, y yo solo me pregunto cómo es posible que un vino de menos de tres euros —bueno, de tres euros— pueda estar tan bien.
Mucho Más. Uva: principalmente tempranillo, con garnacha y syrah. Precio: 5,95 euros en Carrefour, DIA% y Ahorramás. Félix Solís fue noticia a principios de este mes por su imputación en un presunto delito de estafa: se le investiga por vender como crianzas y reservas vinos que no se ajustan a estas denominaciones. En cualquier caso, menudo pelotazo que pegó su bodega con Mucho Más, tanto que ha subido un 20% de precio desde la primera vez que lo probé hará casi dos años. No sé cómo serán las remesas venideras, pero es un vino de diario, fácil y agradable de beber. ¿Por eso desde entonces se ha llevado 10 premios nacionales y europeos? Podría ser.
La Enfermera. Uva: tinta de toro. Precio: 5,59 euros en ALDI. Este vino de la bodega Terra d’Uro tiene cuatro meses de barrica y procede de una finca en Venialbo (Zamora). Según se dice en la web de la bodega, recibió este nombre como homenaje a las enfermeras que sirvieron al ejército de Isabel la Católica en la Batalla de Toro. Me ha gustado, aunque deja un saborcillo ácido al final pero apenas apreciable. Merece la pena probarlo.
Besos de uvas: los tesoros de la estantería que no dejan tu bolsillo temblando
Laya. Uva: garnacha tintorera y monastrell. Precio: 6,29 euros en Carrefour o El Corte Inglés. Vino con Denominación de Origen Almansa y cuatro meses de barrica, elaborado por Bodegas Atalaya. Me parece un espectáculo por el precio que tiene. Sin duda está en mi top 10 de los mejores tintos por debajo de los 10 euros.
Finca La Luna. Uva: tempranillo. Precio: 8,99 euros en ALDI. Doce meses en barrica francesa y americana y dos años en botella dan como resultado un vino que nada más lo hueles fascina. Un reserva Ribera del Duero que no es dulzón, pero pasa muy bien. Es una fiesta en la boca donde todas las papilas gustativas están invitadas.
24 Mozas. Uva: tinta de toro. Precio: 8,89 euros en Carrefour o Alcampo. Se llama así por las 24 mozas que aparecen en El Tío Babú, una copla que cuenta una boda tradicional en Toro. Joven con crianza, de viñedos con más de 30 años de antigüedad sobre terreno arenoso. Me fascina lo bien que equilibra la potencia que caracteriza a los vinos de Toro, haciéndolo suave e intenso al mismo tiempo.
Nicte. Uva: tempranillo. Precio: 6,69 euros en ALDI. Este crianza de Ribera de Duero Crianza, con 12 meses de barrica, tiene probablemente la mejor relación calidad-precio que encontraréis en esta cadena de supermercados. El punto de dulce justo que no se pasa y que me gusta. Después de beberlo te deja un rato salivando a lo Homer Simpson pensando en chuletas. Suave y agradable, ¡bien hecho!
Garabato. Uva: tempranillo. Precio: 5,99 euros en Lidl. Un Ribera del Duero con crianza de ocho meses en barricas de roble francés y americano, de Bodegas Briego, en Fompedraza (Valladolid). Si vais a un Lidl, no lo dudéis: este vino de los hermanos Benito Hernando es probablemente la mejor opción que tienen.
Para terminar, solo puedo añadir que, si hay algo maravilloso que tiene el vino, es que a partir de la segunda, tercera —o cuarta si tienes mucho saque— copa todos son estupendos. No os fieis ciegamente de mis opiniones, ni de las de nadie, en cuestión de gustos solo cuenta el vuestro, así que ¡probad! ¡probad! y contadnos (a ser posible, sin insultar, por favor).
Sigue a El Comidista en TikTok, Instagram, X, Facebook o Youtube.