Lo que busca el nuevo Más Madrid de la ministra García: más dinero, agitar las calles y alianzas internacionales

“Viva la sanidad pública”. La frase, escrita en mayúsculas sobre un cartel pegado a una columna, sirve como telón de fondo para el vídeo con el que Mónica García se despide de la Asamblea de Madrid. Sin embargo, ese adiós tiene mucho de hasta luego. La nueva ministra de Sanidad deja su puesto como líder de Más Madrid en la Asamblea, pero se mantiene al frente del partido, delega la portavocía parlamentaria en manos de una mujer de su máxima confianza (Manuela Bergerot) y acaba de exponer su hoja de ruta para las elecciones de 2027 en el congreso interno de la organización. La consulta de los documentos de estrategia política y organización presentados por García junto a Rita Maestre, la portavoz capitalina, y vínculo con la herencia de la alcaldesa Manuela Carmena, dibuja el intento de rearmar al partido con las urnas como objetivo. Más Madrid quiere más dinero, más movilización en las calles, más alianzas internacionales y más recursos para enfrentarse en los próximos comicios al PP, que acaba de lograr sendas mayorías absolutas en la Comunidad y la ciudad de Madrid.

Estas son las claves de la nueva etapa de un proyecto que rodea de incógnitas el futuro de su apuesta exclusivamente regionalista al enviar a su líder al gobierno de España.

Agitación y propaganda para “chocar con los adversarios políticos”. El partido quiere crear “un área de agit-prop”. ¿Su objetivo? “Transgredir ciertas barreras comunicativas sin que tengan que encarnarlas las caras principales de la organización”, se lee en los documentos del congreso. La propuesta, coincidente con las movilizaciones de protesta contra los pactos para investir a Pedro Sánchez (PSOE) como presidente, entronca con otro planteamiento de fondo de Maestre, que quiere llevar a las calles la oposición al PP y a Vox.

Se trata de “pensar y elaborar la intervención física (más allá de lo parlamentario y lo orgánico) para reforzar nuestras líneas políticas, sumarse a temas de actualidad y el choque con los adversarios políticos”, según la propuesta elevada al congreso del partido, en la que se añade: “Este espacio (...) permitiría atraer perfiles que simpatizan con Más Madrid, pero están menos interesados en lo estrictamente institucional”.

Alianzas internacionales para desbancar al PSOE como referente. El partido de García, que ha logrado la hegemonía de la izquierda madrileña a nivel autonómico por un puñado de votos en las dos últimas elecciones, busca consolidar su posición como referente regional del progresismo.

“Mantendremos, de forma regular, contacto estrecho con el resto de actores políticos relevantes del progresismo en España y Europa, tratando de asentar la figura de Más Madrid como referencia absoluta y casa común del progresismo en nuestra región”, se detalla en sus líneas estratégicas. “Impulsaremos una agenda de relaciones institucionales con América Latina”, se añade.

¿Y cómo se logrará eso? “Tenemos muchos miembros con vinculaciones con personas que están trabajando políticas en América Latina, y que son parte de la elaboración de la vanguardia del pensamiento ahí”, explica una fuente de la dirección del partido. “Un ejemplo serían las personas que han puesto en marcha el sistema nacional de cuidados en Colombia, la fundación Fundar de Argentina; o algunas de las universidades de Chile, Uruguay o Argentina”, sigue. “Para seguir siendo vanguardia en pensamiento político tenemos que nutrirnos de estas relaciones”.

Además, Más Madrid propone usar la inteligencia artificial en “las labores de la política institucional, tarea que se encuentra de forma incipiente en desarrollo por parte de algunos de los miembros de esta candidatura”.

¿Qué quiere decir eso? “Desarrollar herramientas de tipo chat capaces de distribuir las dudas, sugerencias y ofrecer respuestas a nuestra militancia, clasificando dudas previas para ponerlas al alcance de nuestra organización”, contestan en el partido. “Esta visión de una organización digital es la que queremos traducir en políticas públicas aprovechando la experiencia de nuestros usuarios e implicándolos en el desarrollo de las mismas”.

Proteger a las bases de interferencias de otros partidos. “En relación con la interacción con otras organizaciones que puedan entrar en competencia electoral con Más Madrid, nos comprometemos a abrir un proceso de modificación de los Estatutos para preservar los derechos políticos de la militancia en aquellas asambleas territoriales donde otros partidos que compiten electoralmente interfieren en el discurrir de las asambleas de Más Madrid”, se lee en los documentos presentados al congreso de la organización.

Así, Más Madrid busca impedir que la doble militancia dificulte el desarrollo de su proyecto, especialmente a nivel municipal, que es donde tiene más margen de expansión: en las últimas elecciones únicamente se presentó en 54 de los 178 municipios posibles, los que concentran al 93% de la población.

La negociación de posibles alianzas conjuntas con Podemos, Izquierda Unida y partidos ecologistas de cara a las municipales de mayo ya provocó grandes tensiones locales y fracasó en Parla (128.000 habitantes), Tres Cantos (45.000) y Rivas-Vaciamadrid (96.000). Sin embargo, en el partido precisan que el problema se dio especialmente con aliados locales, como en Leganés.

Más dinero de los simpatizantes. Con menos de un lustro de vida, Más Madrid ha afrontado ya dos elecciones generales (2019 y 2023), tres elecciones autonómicas (2019, 2021 y 2023) y dos municipales (2019 y 2023). A la espera de cómo se organice el partido para las europeas de junio de 2024, la concatenación de citas electorales ha exprimido al máximo sus recursos humanos y financieros. Por eso, la formación se marca ahora el objetivo de lograr un “aumento significativo de los ingresos por cuotas y donaciones”, que en este momento apenas representa un 1,6% de la previsión de ingresos, para “dar un salto cuantitativo y cualitativo” como organización.

Además, ese esfuerzo de captación de fondos incluirá revisar la carta financiera del partido, que marca cómo contribuyen a sus finanzas los cargos públicos. Para 2024, las previsiones de ingresos se distribuyen de esta manera: el 39% provendrá de las subvenciones ordinarias por su representación en la Asamblea de Madrid; 35% por las aportaciones de los cargos públicos (12% Madrid ciudad, 12% diputados del Congreso y de la Asamblea; y 11% concejales) y un 22% por las subvenciones por la representación en el Congreso de los Diputados. Además, la asociación encargada de la gestión de las fiestas municipales y distritales aporta un 4%.

Pese a su objetivo, el partido también quiere mantener el carácter voluntario de la cuota de afiliación. Todo, con las urnas como línea de meta.

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