Greenpeace cuelga una lona en la Puerta de Alcalá con la cara de los cuatro candidatos: “¿Os la suda el cambio climático?”
El cartel, de 14 metros, muestra a los líderes de PSOE, PP, Sumar y Vox sudando y con el torso y la cara quemados
Nuevo día de campaña ―el quinto―, nueva lona colgada en algún edificio de Madrid. Esta vez, el lugar elegido ha sido la emblemática Puerta de Alcalá, donde la organización ecologista Greenpeace ha desplegado este martes una lona de 14 metros con la imagen de los cuatro candidatos a las elecciones generales y una pregunta muy directa: “¿Os la suda el cambio climático?”. El cartel, que varios activistas han colgado sobre las siete de mañana del andamio que rodea al monumento, muestra a los líderes de PSOE, PP, Sumar y Vox sudando y con el torso y la cara quemados. “En plena ola de calor y plena campaña electoral, colgamos una gran pancarta en la Puerta de Alcalá. Las personas que aspiran a gobernar deben responder. El mayor desafío de nuestro tiempo exige vuestro máximo compromiso antes del #23J”, ha escrito la ONG en su perfil de Twitter, junto a un vídeo donde se ve cómo cinco personas colocan el gran trozo de tela.
🔴ACCIÓN🔴
— Greenpeace España (@greenpeace_esp) July 11, 2023
En plena ola de calor y plena campaña electoral, colgamos una gran pancarta en la Puerta de Alcalá.
Las personas que aspiran a gobernar deben responder:
¿EL CAMBIO CLIMÁTICO OS LA SUDA?
El mayor desafío de nuestro tiempo exige vuestro máximo compromiso antes del #23J pic.twitter.com/9mutSBPj8W
“Queríamos hacerlo en un lugar céntrico para lanzar una pregunta que debe elevarse en el debate político. No se está debatiendo, lo vimos en el cara a cara” de anoche, cuenta por teléfono Eva Saldaña, directora ejecutiva de Greenpeace en España. En la hora y media que duró el debate entre Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo, ninguno de los dos candidatos mencionó el cambio climático, ni tampoco se incluyó un bloque de medio ambiente entre los cuatro que propusieron los presentadores. “La emergencia climática quedó tapada, fue la gran ausente de la noche. Los partidos tienen que ser claros y decir qué medidas concretas van a proponer. [La lona] es una puerta abierta a que nos respondan”, añade Saldaña.
Respuestas ha habido. La primera ha sido la vicepresidenta del Gobierno y líder de Sumar, Yolanda Díaz, que ha contestado al mensaje inicial de Greenpeace con dos tuits. “Combatir la emergencia climática es un pilar del programa de Sumar, la fuerza verde de nuestro país. Tenemos un plan de emergencia y un proyecto de futuro para avanzar en una transición ecológica justa, potenciar las energías renovables y luchar contra la sequía”, ha escrito en el primero, que ha ampliado apenas dos minutos después con un segundo: “La pregunta que planteáis en Greenpeace España no puede quedar sin respuesta. Es bueno que la sociedad civil nos empuje a ser mejores”.
Combatir la emergencia climática es un pilar del programa de @Sumar, la fuerza verde de nuestro país.
— Yolanda Díaz (@Yolanda_Diaz_) July 11, 2023
Tenemos un plan de emergencia y un proyecto de futuro para avanzar en una transición ecológica justa, potenciar las energías renovables y luchar contra la sequía.
De los más de 500 mensajes a la publicación inicial de Greenpeace a las 12 de la mañana, un gran número cuestionaba que la organización situara al mismo nivel a Díaz o Sánchez ―en cuyos programas se desarrollan medidas contra el cambio climático― y al líder de Vox, Santiago Abascal, que ha negado en más de una ocasión el calentamiento global y lo ha ridiculizado hablando de “religión climática”. Entre ellos, Pablo Iglesias. “Nunca he sido socio vuestro, pero siempre os tuve respeto. Pero si fuera socio hoy me daría de baja inmediatamente. Esta equidistancia no solo es repugnante, es además un intento de tomar a la gente por imbécil. Por suerte existen colectivos ecologistas que jamás harían esto”, ha escrito el exvicepresidente y fundador de Podemos.
“Quizá ha sido muy sutil y no se está entendiendo, o la gente prefiere arremeter”, responde Saldaña a las críticas, mientras incide en que la organización tiene claro que no todos los partidos son iguales. “Así lo reflejan las caras, no a todos se la suda de la misma forma”, añade. Se refiere a que, ante la pregunta lanzada en la lona, hay dos candidatos con expresión compungida y preocupada ―Díaz y Sánchez― y otros dos sonriendo ―Feijóo y Abascal―. La directora cuenta que Greenpeace ha analizado los programas de los cuatro candidatos y que son conscientes de las diferencias: “Hay dos partidos, PSOE y Sumar, que claramente muestran una acción climática responsable. El PP no entendemos muy bien dónde se ubica en cuanto a emergencia climática, es un posicionamiento retardista a los impactos. Y Vox, que es claramente negacionista”. Preguntado por este diario al respecto, un portavoz de Sumar remite a la respuesta de Díaz y recuerda que el cambio climático es “un tema central que debe ser un tema transversal en la vida”.
El partido socialista también ha participado en el cruce de mensajes que se ha dado en las redes. “Máximo compromiso gobierno coalición: Pedro Sánchez y Teresa Ribera [ministra para la Transición Ecológica] lo han demostrado ya, aumentando ambición en el nuevo #PNIEC [Plan Nacional de Energía y Clima], pasando de una caída del 23% de CO2 a un 32% en 2030. Hoy ya más de la mitad de la electricidad es renovable y en un año se ha duplicado el autoconsumo”, ha recordado la presidenta del PSOE, Cristina Narbona, a la organización ecologista en Twitter.
Quien también ha intervenido virtualmente ha sido el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, con un tuit en el que advierte de que se han emprendido acciones legales “contra quienes utilizan un monumento de Patrimonio Mundial como espacio de performance ideológica” y asegura que la lona “ya ha sido retirada por la policía”. Horas más tarde, preguntado por el cartel en un acto en la Casa de Campo, el alcalde ha reiterado que si se produce un uso indebido del patrimonio o algún daño a la puerta “como consecuencia de esta patochada”, lo van “a perseguir hasta las últimas consecuencias”.
Greenpeace, a través de Saldaña, le replica que no han dañado la Puerta de Alcalá ―en obras desde hace un año― porque “solo se han subido al andamio que la rodea” y que sus acciones “tienen un análisis de riesgo previo para no dañar el patrimonio”. “Es nuestro derecho hacer una protesta pacífica, por el bien de la ciudadanía, esto es un motivo más de lo que traen este tipo de partidos [por el PP y Vox], que es la represión”, añade la directora de la organización.
Emprendemos acciones legales contra quienes utilizan un monumento de Patrimonio Mundial como espacio de performance ideológica.
— José Luis Martínez-Almeida (@AlmeidaPP_) July 11, 2023
Frente al incivismo, tolerancia cero. La lona ya ha sido retirada por la Policía. pic.twitter.com/LhY9mNBwDe
La guerra de lonas, protagonista durante la precampaña electoral y que continúa en campaña, dio el pistoletazo de con el cartel que Vox colgó en la céntrica calle de Alcalá el pasado 17 de junio, en el que una mano tiraba a la papelera los logos del feminismo, de la bandera LGTBI o de la Agenda 2030. “Decide lo que importa”, se podía leer en letras grandes. Hace una semana, aparecieron dos grandes carteles de Desokupa, empresa que se dedica a los desahucios forzosos, en la calle de Atocha, con la imagen de Sánchez y el mensaje: “Tú a Marruecos, Desokupa a la Moncloa”. Ambas fueron denunciadas por el PSOE ante la Junta Electoral. El partido ultra tuvo que retirarla después de que la Junta Electoral de Madrid concluyera que infringía la ley al hacer propaganda electoral antes de lo permitido. Este no fue el destino de la de Desokupa, que todavía permanece en su sitio y que varios sindicatos por la vivienda de Madrid boicotearon durante cuatro horas el pasado viernes.
La más reciente, además de la de Greenpeace, apareció hace poco más de 24 horas en la plaza de Pedro Zerolo, en el barrio de Chueca. La organización civil Avaaz desplegó un cartel de 400 metros cuadrados en un edificio de la plaza como denuncia a “los pactos del odio” entre el PP y Vox en múltiples municipios y las comunidades autónomas, donde se han eliminado concejalías de Igualdad o se han retirado banderas LGTBI de las fachadas de los consistorios.
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