La experiencia personal de la dueña de un bar ante la desescalada: “El lunes me sentí como en el día de mi boda”
Cecilia Ortiz, dueña del bar La Dorrego en Chamberí, abrió la terraza el lunes. La autora cuenta las dificultades que ha tenido durante los dos meses de confinamiento
Mi nombre es Cecilia Ortiz, creadora de La Dorrego, un bar-cafetería en Chamberí, un hermoso proyecto de café y picoteo con toque argentino. Volvimos a abrir nuestra terraza este lunes y, después de dos meses cerrados, me sentí como si fuera el día de mi boda.
Desde el primer momento hubo fila para coger mesa y tenemos varias reservas de terraza hasta el miércoles que viene, incluso he pedido una ampliación para poder aumentar las mesas. Estamos muy contentos porque la gente tiene muchas ganas de terraza. Pero no nos podemos olvidar de lo que hemos pasado.
He tenido que acudir a servicios sociales y Cruz Roja para recibir ayuda con la comida. Todo lo que tenía lo había perdido.
En la Dorrego he empleado a mucha gente y ayudado a muchos artistas que acudieron a mí en búsqueda de trabajo. Los seis trabajadores hemos estado en un ERTE, sin cobrar desde marzo. Esta situación era insostenible, ya que cerrar un bar en el estado de alarma implica una pérdida enorme: tirar mucha comida y seguir pagando gastos fijos mes a mes. Sin tener ningún tipo de ingreso ni ayuda.
Este proyecto anteriormente fue una cafetería con zona infantil llamada Dando la Nota y lo tuve que modificar porque pese al éxito, el local se quedaba pequeño. Cuento esto para explicar que después de todo el esfuerzo que implica abrir un local y reinventarlo, me he visto en una situación muy complicada e intento no perder las esperanzas, porque tengo derecho a sacar adelante mi proyecto y he luchado e invertido mucho para conseguirlo.
Dando la nota es una cooperativa y nos dedicamos a varias actividades: managment musical, distribución de artistas para eventos, y la cafetería. Al ser trabajadora de la cooperativa, no he podido beneficiarme de la ayuda de autónomos. He tenido que acudir a servicios sociales y Cruz Roja para recibir ayuda con la comida. Todo lo que tenía lo había perdido.
Antes del lunes, tuve muchas dificultades: el dinero con el que comprar la mercancía para abrir, no saber si el local volvería a funcionar pero tener que sacar a los empleados del ERTE... Tampoco podía ofrecer servicio a domicilio durante la fase 0 porque implica una inversión de mínimo unos 400€, más las comisiones por pedidos. Ha sido una locura.
Estoy de acuerdo con las medidas sanitarias que se están tomando, pero respecto a las medidas sociales y económicas, deberían ser ágiles y eficaces. Mis gastos mensuales, pese a tener el local cerrado, son de más de 3000€. Lo que he facturado estos dos días siguen yendo para eso. ¿Cómo se hace para sostener esto? Si yo no tengo ingresos por una situación de causa mayor, tampoco las otras empresas deberían tenerlos y debería tenerse en cuenta para los pagos.
Con la ayuda de nuestros clientes y amigos, que compraron consumiciones por adelantado para luego canjearlas en el bar, hemos conseguido abrir lo antes posible. La esperanza es lo último que se pierde.
Cecilia Ortiz es dueña del bar La Dorrego en Chamberí
La experiencia personal: anecdotario de los madrileños durante la crisis sanitaria
Todos tendremos una historia que contar sobre cómo vivimos el confinamiento por la pandemia del coronavirus. Este es un relato coral de los vecinos de Madrid a través de textos en primera persona
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.