EH Bildu avanza en todo el País Vasco y es primera fuerza en Vitoria

El PNV sufre un retroceso generalizado en las principales ciudades y municipios vascos, y ese espacio lo gana EH Bildu. Los peneuvistas llegaban a las elecciones municipales del 28-M con todo el poder institucional en sus manos, pero las urnas han dejado claro que el partido da síntomas de agotamiento. En una jornada con una abstención elevada (solo ha votado el 48,73% del electorado vasco), EH Bildu se acerca mucho al PNV, el partido tradicionalmente hegemónico en Euskadi, y logra un hito al imponerse en Vitoria, donde ha sido la fuerza más votada. Los independentistas crecen en los principales municipios vascos, aumentan casi un 4,5% en porcentaje de voto y, a un año de las autonómicas, toman posiciones para intentar disputar la supremacía en el País Vasco al PNV de Andoni Ortuzar. Los socialistas consiguen mantener la cuota que tenían, con un pequeño salto en San Sebastián, y el PP logra una ligera mejoría, sobre todo en Bilbao. Elkarrekin Podemos deja escapar muchos de sus representantes en los ayuntamientos.

EH Bildu gana en Vitoria, la capital menos nacionalista. Pasa de tercera fuerza a ser la más votada, y obtiene siete concejales (uno más que en 2019). Rocío Vitero, la candidata del partido abertzale, tendrá ahora la misión de lograr apoyos para alcanzar la alcaldía o recibir el respaldo de otras formaciones para gobernar en solitario. La actual alianza PNV-PSE no suma mayoría para hacerse con el bastón de mando. Los peneuvistas, que han gobernado estos cuatro años en la capital vasca y que llevaban como candidata a la exconsejera Beatriz Artolazabal, caen hasta la cuarta posición, con un escaño menos. La victoria de EH Bildu en este territorio es histórica.

El fuerte avance del partido abertzale también se da en San Sebastián. Durante todo el recuento, el PNV y EH Bildu han ido muy igualados, separados por muy pocos votos. Solo en el último momento la balanza se ha inclinado a favor de los peneuvistas, que se quedan con nueve concejales (uno menos) y aventajan en solo uno a Bildu. Eneko Goia, el alcalde del PNV y candidato a la reelección, sufre así un fuerte desgaste. Aunque vence por la mínima, pierde un escaño, mientras que gana el candidato abertzale, Juan Karlos Izagirre, suma dos asientos. Los socialistas se quedan con cinco concejales y serán nuevamente la llave de la gobernabilidad en la capital guipuzcoana. Solo un acuerdo con las fuerzas de izquierdas —los cinco ediles del PSOE y los dos de Podemos— permitiría a EH Bildu hacerse con la alcaldía que ya dirigió en 2011.

La victoria del PNV en Bilbao deja un sabor amargo en este partido. Juan Mari Aburto repetirá como alcalde, pero sufre un retroceso inesperado y se aleja de la mayoría absoluta a la que aspiraba en estos comicios. El PNV pierde dos escaños, pasa de 14 a 12, y estará obligado a pactar con los socialistas para gobernar. En esta ciudad, EH Bildu ha dado también un salto importante: se sitúa como segunda fuerza política con seis ediles, dos más que en la actualidad, y relega a los socialistas al tercer puesto con cinco ediles. El PP consigue un buen resultado al pasar de tres a cuatro concejales.

EH Bildu ha sacado provecho de una campaña muy pragmática, centrada en la gestión de los municipios y alejada de la polémica en la que se vio salpicada por la inclusión de 44 excondenados de ETA en sus listas, que copó durante días la discusión política en toda España. Finalmente, siete de esos candidatos, los que habían sido condenados por delitos de sangre, anunciaron que renunciarían a tomar posesión si obtenían escaño. La dirección de EH Bildu estaba convencida de que ese gesto sería interpretado a su favor, como una apuesta por la convivencia. En todo caso, 15 excondenados de ETA han conseguido acta de concejal. De estos, Begoña Uzkudun en Errezil (Gipuzkoa) y Juan Carlos Arriaga en Berrioplano (Navarra) cumplieron penas por delitos de sangre y, como anunciaron durante la campaña, renunciarán a tomar posesión de sus cargos.

La formación de Arnaldo Otegi ha dado un vuelco total en las Juntas Generales (Parlamento provincial) de Gipuzkoa, donde es el partido más votado. En este territorio, pasa de 17 a 22 procuradores y la candidata Maddalen Iriarte, exparlamentaria, se convertirá en la próxima diputada general de Gipuzkoa. Mientras, el PNV pasará a la oposición al retroceder de 20 a 17. La suma con el PSE (ocho escaños) no le da para alcanzar la mayoría absoluta. En Álava ha estado a punto de sobrepasar al PNV. En este territorio la coalición abertzale gana dos escaños (suma 14 procuradores) y se queda a uno del PNV, que pierde dos representantes. En Bizkaia se produce el mismo efecto, como si de vasos comunicantes se tratara entre las fuerzas nacionalistas. El salto que da EH Bildu, que obtiene 15 escaños (cinco más), se produce a costa de la bajada que experimenta el PNV, que se queda con 22 (tres menos). La marea de votos de EH Bildu también se ha reflejado en otros ayuntamientos importantes, como Durango, Galdakao, Tolosa o Mondragón, donde ha conseguido ser primera fuerza.

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