Sánchez reprocha a Bildu haberse “equivocado” en las listas y le pide “un mensaje más rotundo” de respeto a las víctimas de ETA
La polémica por las candidaturas de la formación abertzale copa de nuevo una bronca sesión en el Congreso. Diputados de PP y Vox afirman que volverían a acusar a Zapatero de traicionar a los muertos
Doce años después del “cese definitivo” del terrorismo, ETA ha vuelto a acaparar los grandes mensajes políticos de la derecha en esta campaña electoral, y el Congreso no iba a ser una excepción. Este miércoles, durante la última sesión de control al Gobierno antes de las elecciones autonómicas y municipales del día 28, el PP ha focalizado de nuevo en Bildu y sus relaciones con el actual Ejecutivo el debate parlamentario, y ha exigido al presidente, Pedro Sánchez, que rompa con esa formación. Sánchez ha tachado de “deleznables” e “infames” las imputaciones del PP, que el martes lo acusó de ser “más generoso con los verdugos que con las víctimas”, pero también se ha dirigido al grupo de Bildu para reconvenirle por haberse “equivocado en la elaboración de las listas”, en las que figuran 44 condenados de ETA. “Puede ser legal lo que han hecho, pero desde luego no es decente. Lo que se tiene que pedir a esas personas que integran esas listas municipales es un mensaje mucho más rotundo y contundente de reparación, perdón, reconciliación y homenaje las víctimas que sufrieron tanto dolor durante muchísimos años de actividad de la banda terrorista”, ha dicho.
Durante su intervención, el presidente ha preguntado a los diputados populares si repetirían ahora las palabras que en 2005 dedicó Mariano Rajoy a José Luis Rodríguez Zapatero, acusando al entonces presidente de “traicionar a los muertos”, las víctimas de ETA, y al fallecido ministro del Interior Alfredo Pérez Rubalcaba de ser cómplice de la banda. Algunos diputados de las bancadas del PP y de Vox han respondido con un “¡sí!”.
La pregunta registrada por la portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, para la sesión de control de este miércoles volvía a ser la que los populares han utilizado ya varias veces en este periodo de sesiones: cuándo piensa el presidente “decir alguna verdad a los españoles”. Pero desde muy pronto Gamarra ha derivado su discurso al asunto que ha copado la discusión política en el arranque de la campaña: las listas electorales de Bildu, en las que concurren 44 personas condenadas por sus vínculos con la banda, siete de ellas por delitos de homicidio o asesinato. Tras varios días de polémica, esos siete candidatos condenados por delitos de sangre enviaron el martes una carta en la que anunciaban que renunciarían a recoger sus actas de concejales si salen elegidos el 28-M.
La portavoz popular ha reprochado a Sánchez que fuera tan “duro y cruel” con el PP y no con la portavoz de EH Bildu, Mertxe Aizpurua (que iba a intervenir justo después). Ha exigido al presidente que decida si “rompe con Bildu o con la decencia” y a continuación ha añadido: “Si no va a romper con Bildu, sea valiente con los españoles y díganoslo: ‘Volveré a pactar con Bildu, en los ayuntamientos vascos, en el Gobierno de Navarra, en Pamplona, aquí en el Congreso de los Diputados, en cualquier circunstancia’. Que se enteren los barones y candidatos socialistas”. Gamarra ha acusado al presidente de haber “dilapidado los valores democráticos”.
El jefe del Ejecutivo ha recuperado parte de su argumentario de la jornada anterior en el Senado, cuando le espetó al presidente popular, Alberto Núñez Feijóo, que “lo que no puede soportar” el PP es que fue un Gobierno socialista y un lehendakari socialista quienes “derrotaron a ETA hace 12 años”, y que un Ejecutivo del PP, el de José María Aznar, negoció con la banda. También ha rememorado Sánchez que en las elecciones de 2015, cuando era presidente Mariano Rajoy, también hubo condenados de ETA, aunque muchos menos, en las listas de Bildu y aquel PP no dijo nada, en contraste con la escandalera actual, algo que ha considerado “el mayor ejemplo de cinismo”.
Ya encendido por esta inopinada polémica que ha empañado toda la campaña de estas elecciones autonómicas y municipales, y roto el esquema que el PSOE se había preparado para presumir de sus logros económicos, Sánchez ha aludido a algunos ataques que está escuchando estos días de nuevo desde las filas del PP de Feijóo. “Dicen cosas deleznables, dicen cosas infames que luego no pueden repetir: ¿Repetirían que ETA estaba tras los atentados del 11-M? ¿Repetirían que Zapatero ha traicionado a los muertos? ¿O que Rubalcaba era cómplice de ETA? ¿Lo pueden repetir?”, ha inquirido. Varios diputados de los grupos del PP y de Vox han respondido “sí”. Sánchez les ha mirado con expresión anonadada y la bancada socialista se ha levantado para dedicarle un largo aplauso.
En el orden de preguntas al Gobierno, la siguiente correspondía precisamente a la portavoz de EH Bildu, Mertxe Aizpurua, que interpeló al presidente por si tiene pensado mantener el escudo social y las medidas de respaldo a los más desfavorecidos aprobadas en este mandato, la mayoría de las veces con el apoyo de su formación. EH Bildu ha evitado durante toda la legislatura aludir en el Congreso a cualquier asunto relacionado con el terrorismo o a reclamaciones de tipo identitario, y ha centrado sus iniciativas en temas sociales. En los últimos meses, además, ha ganado protagonismo en acuerdos alcanzados con el Gobierno de coalición en el impulso a leyes y reformas sobre esos ámbitos, incluso por delante de los pactos habituales del Gobierno con el PNV, en teoría el socio preferente para el PSOE. Este miércoles, Aizpurua no ha mencionado ni siquiera implícitamente la polémica sobre la presencia de condenados de ETA en las listas de Bildu, aunque ha deslizado que su formación quiere “mirar al futuro y ampliar derechos” frente a los que se refugian de nuevo en el pasado.
Sánchez, sin embargo, sí ha querido que “conste en acta” de la sesión su opinión sobre el asunto de las candidaturas de Bildu, y ha comenzado así su respuesta a Aizpurua: “Quiero hacer una reflexión antes de responder a su pregunta, y es que ustedes se han equivocado en la elaboración de las listas municipales. Puede ser legal lo que han hecho, pero desde luego no es decente”. El presidente ha reclamado a continuación a Bildu “un mensaje mucho más rotundo y contundente de reparación, perdón, reconciliación y homenaje las víctimas que sufrieron tanto dolor durante muchísimos años de actividad de la banda terrorista”. Después, el presidente ha ensalzado los acuerdos alcanzados en esta legislatura en beneficio, ha dicho, de la mayoría de los españoles, y ha emplazado a Aizpurua a refrendar con su voto la continuidad de esas medidas sociales: “Esperamos contar con su apoyo”.
La portavoz de Bildu ha guardado silencio ante la alusión de Sánchez a la polémica de las listas electorales. Antes, en declaraciones a la prensa en los pasillos de la Cámara, sí había alabado el gesto de los siete candidatos de Bildu que se han comprometido a no ocupar su escaño si salen elegidos, porque al hacerlo, ha dicho, “no han querido añadir más daño a las víctimas”. “Nosotros estamos por un futuro en paz y en convivencia, nuestro compromiso es claro, es nítido, y este paso esperamos que se entienda así”, ha afirmado Aizpurua.
Diputados del PP, como Carlos Rojas, Antonio González Terol o Jaime de Olano, y de Vox, como Irene Cañizares o Ignacio Gil Lázaro, reprodujeron también en sus preguntas a las vicepresidentas Nadia Calviño y Yolanda Díaz, y al ministro Félix Bolaños, sus ácidas invectivas por no romper con Bildu. El portavoz de Vox, Iván Espinosa de los Monteros, recordó que tanto su partido como UPyD propusieron hasta en tres ocasiones en el Congreso la ilegalización de la formación abertzale, y que ni el PSOE ni el PP respaldaron esas iniciativas.
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