_
_
_
_

El PSC busca consolidar su poder en el Gobierno de Sánchez para afrontar las elecciones a la Generalitat

Los socialistas catalanes, cuya aportación fue vital para el PSOE el 23-J, esperan preservar los dos ministerios y los comunes mantener una cartera

Un momento de la reunión de Salvador Illa con los diputados y senadores del partido, este miércoles en el Congreso.
Un momento de la reunión de Salvador Illa con los diputados y senadores del partido, este miércoles en el Congreso.PSC
Àngels Piñol

El PSC confía en mantener su peso y ser determinante en el nuevo Gobierno de Pedro Sánchez que se acabará de configurar en los próximos días. Implicados en el Ejecutivo central desde hace dos legislaturas, los socialistas catalanes aspiran a preservar su influencia en la administración central y retener así los cargos en la segundas filas del Ejecutivo y en los de las grandes empresas públicas. El PSC, que fue vital el 23-J para apuntalar la candidatura de Sánchez, cuenta ahora con dos ministros (Miquel Iceta y Raquel Sánchez) y como mínimo repetirá la misma cuota. Los comunes, por su parte, ya sostienen desde hace tiempo que tendrán otra vez un ministerio. La principal hipótesis es que recaiga en el eurodiputado Ernest Urtasun.

Bajo el lema de intentar frenar a la derecha y a la extrema derecha, el PSC cosechó en Cataluña un triunfo histórico en las elecciones generales obteniendo 19 diputados, cinco más que todo el independentismo, y aumentando la brecha con el PP de 10 escaños a 13. Con esa victoria, el PSC cerró la cuadratura del círculo tras haber vencido en las autonómicas y en las municipales y espera ver premiada, o al menos en ningún caso penalizada, su aportación justo el año en que se enfilan las elecciones autonómicas previstas para febrero de 2025. Con el pacto en Madrid entre el PSOE y ERC, todo apunta a que en Cataluña se reeditará el acuerdo para aprobar las cuentas.

Los socialistas han expresado su enorme satisfacción tras el acuerdo cerrado con Junts que ha permitido reeditar el gobierno de coalición. Con todo, no ocultan que el contenido del pacto con Carles Puigdemont les chirría al asumir en buena medida todo el relato independentista. El gran interrogante que envuelve al PSC es si su trayectoria pueda quedar frenada por la ley de la amnistía. Pese a que deslizan que miembros de la dirección han mostrado sus dudas sobre la medida, el partido ha cerrado públicamente filas. La consulta a la militancia se saldó con un 85% de síes -dos puntos menos que entre los afiliados del PSOE- aunque solo participó el 61% de los afiliados. Cinco ex primeros secretarios han defendido el pacto aunque han lanzando críticas contra Junts y ERC a los que reclaman que abandonen la idea del referéndum y les acusan de mantener vivo el conflicto solo por los votos.

Pedro Sánchez ha contado en cualquier caso con el PSC para sus diferentes gabinetes desde que accedió a La Moncloa tras la moción de censura a Mariano Rajoy. Sus dos primeros fichajes fueron Josep Borrell, ahora alto representante para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad de la UE, que ha mostrado primero sus reservas sobre la amnistía y luego moduló, y Meritxell Batet, la última presidenta del Congreso, que ha abandonado la primera línea política por razones personales y a quien el independentismo reprocha su falta de empatía con el uso de las lenguas cooficiales en el Congreso. En el segundo mandato de Sánchez, Illa asumió en enero de 2020 la cartera de Sanidad, que cobró de forma inesperada una gran relevancia con la pandemia y un año después, en 2021, dejó el cargo para ser candidato a las autonómicas. Iceta entró en el Gobierno para asumir Administraciones Públicas y en junio pasó a Cultura y Deportes donde continua. Raquel Sánchez llegó al Gobierno entonces.

De izquierda a derecha, Salvador Illa, líder del PSC; la diputada Montse Mínguez y el ministro Miquel Iceta.
De izquierda a derecha, Salvador Illa, líder del PSC; la diputada Montse Mínguez y el ministro Miquel Iceta.
Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Todo apunta a que ninguno de los dos repetirá en el cargo. Sánchez afirmó por activa y por pasiva que el Gobierno no traspasaría Rodalies y al final es uno de los principales acuerdos entre socialistas y republicanos. El objetivo del PSC, más allá de retener dos ministerios, es preservar el sotto governo con cargos como por ejemplo Francesc Vallès, secretario de Estado de Comunicación, o Víctor Francos, secretario de Estado de Deporte. Hasta cinco cargos en la órbita del PSC dirigen empresas públicas: Mauri Lucena (AENA); Raül Blanco (Renfe); Jordi Hereu (Hispasat); Marc Murtra (Indra) y Antonio Llardén (Enagás). Además de ellos, varios militantes del PSC tienen en Madrid cargos relevantes por lo que figuran como eventuales candidatos a ministros: Eva Granados, portavoz del Grupo Socialista en el PSC, y la leridana Montse Mínguez, número dos del grupo socialista en el Congreso. Las dos ocupaban las fila de detrás del Gobierno durante la sesión de investidura.

El mutismo del PSC sobre los ministrables es absoluto mientras parecen despejarse quien será el de los comunes. Urtasun, portavoz de Sumar, se perfila como ministro de Cultura y Deportes en sustitución de Iceta. El eurodiputado había repetido varias veces que deseaba cumplir dos mandatos en Europa que expiran esta primavera. La duda es el papel que jugará la exalcaldesa Ada Colau que dijo recientemente que se auto descartaba como posible ministra. La incógnita es si será o no candidata a las elecciones europeas de mayo.

Puedes seguir a EL PAÍS Catalunya en Facebook y X, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_