Décima en lista de espera para tres vacantes de FP: “La esperanza es lo último que se pierde”

Osiris oye su código de alumno. No se lo cree. Levanta la mano y se acerca a la mesa situada en el centro de la sala de actos del instituto Escola del Treball de Barcelona. Ha logrado una de las tres vacantes que quedaban en el grado superior de Diseño y muebles. Después de certificar su identidad, abandona la sala, temblorosa y emocionada. No se lo esperaba porque era la décima en la lista de espera, pero los aspirantes que tenía por delante no se han presentado. “Me dijeron que seguramente no lograría la plaza. Pero la esperanza es lo último que se pierde y decidí venir”, asegura, mientras intenta recuperar el aliento.

Esta joven colombiana es una de las casi 450 personas que este miércoles han asistido al acto público de adjudicación de plazas vacante en alguno de las titulaciones de FP superior (el de la FP media se hizo la semana pasada). Se trata de un método novedoso, que el año pasado ya se realizó de forma experimental en algunos centros, pero que este año se ha extendido a todos los institutos, que realizan el acto de entrega simultáneamente. “Hasta ahora el sistema era más rápida, pero más opaco porque tenían que llamar uno a uno a los alumnos en lista de espera, pero si después de varios intentos no los localizabas, pasabas al siguiente y perdían la plaza. Algunas familias se habían quejado. Pero el nuevo sistema supone una mejora”, valora Jose Luís Duran, director de la Escola del Treball.

La primera asignación de plazas se ha saldado con 93% de solicitudes asignadas en primera opción en la FP media, aunque han quedado 9.760 vacantes -después del acto público de gestión de la lista de espera-, que serán adjudicadas en los próximos días. En la FP superior, el porcentaje se reduce al 87%, pero las plazas libres no se conocerán hasta septiembre.

La Escola del Treball ha acogido este miércoles dos sesiones para adjudicar algunas de las 280 vacantes que tenían para la treintena de titulaciones de FP superior que imparten. Estas suponen un tercio de las plazas que ofertan, un número importante debido a uno de los problemas sin resolver que arrastra el sistema de preinscripción. “Los alumnos solicitan plaza a la vez en la FP superior y en la universidad, y tenemos un 33% de estudiantes que se les ha asignado plaza aquí, pero después no se matriculan porque han logrado entrar en la universidad. Esto nos distorsiona mucho”, se queja Duran.

Unas 450 personas se han acercado al centro para hacerse con una de estas vacantes. El acto empieza con una explicación del secretario sobre el funcionamiento de la adjudicación: hay que figurar en la lista de espera y solo se puede aspirar a los estudios escogidos en primera opción. Algunos abandonan la sala. Y empieza el canto incesante de iniciales -por protección de datos-. Muchos no responden y las plazas quedan vacantes para septiembre. Otros se van con una sorpresa inesperada.

Isa y Sergio han asistido -en representación de su hijo, que trabaja-, con pocas esperanzas. “En las listas no aparecía vacantes en los estudios de nuestro hijo. Igualmente decidimos venir porque el no ya lo teníamos. Y alguna plaza se ha liberado en el último momento y nos han llamado”, explica la madre, exultante. Su hijo todavía no conoce la buena noticia. “Ya le hemos dicho que hasta que no vuelva del trabajo no le diremos nada”.

Emma también sale contenta. Ha logrado entrar en Desarrollo de Aplicaciones Multiplataforma, aunque llegaba tranquila de saber que era la tercera en espera para tres vacantes. Ello desinfla su enfado por no haber logrado entrar en primera opción. “Vengo de un grado medio con un 8,14, pero los de Bachillerato tienen reservadas el 60% de las plazas y ha entrado gente con nota más baja que yo, no es justo”. Más resignados se muestran Enrique y sus compañeros que no han logrado entrar en el mismo grado y pasarán a la reserva, esperando que alguien no se matricule y libere una plaza.

Estos alumnos tendrán una segunda oportunidad en septiembre. El día 5 se publicarán las vacantes y entonces podrán presentar una nueva preinscripción. El 8 se hará la adjudicación. Se espera que todo el proceso de la FP superior finalice antes del inicio de curso, el 12 de septiembre. En la FP media quedará lista antes de finales de julio.

El Departamento de Educación de la Generalitat avanzó este año el calendario para evitar la situación del año pasado en que miles de estudiantes empezaron tarde el curso. “El 28 de septiembre todavía estábamos matriculando a 200 personas. Fue un caos”, recuerda Duran. Pero el Departamento tomó nota de lo sucedido. “Este año la agilización era clave. La idea es que la mayoría de estudiantes se puedan ir de vacaciones sabiendo que tienen una plaza asignada”, destaca Mercè Chacón, directora general de FP.

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