La educación digital será democrática, o no será educación

“El aprendizaje en las escuelas incluye espacios libres, vivir la creatividad, poner a prueba los límites y la posibilidad de error. Esta libertad, que es necesaria para la formación, no debe verse comprometida por una protección poco clara de los datos tratados”. Estas palabras no son de un pedagogo radical ni de un cyberactivista, sino del comisario estatal para la protección de datos del land alemán de Baden-Württemberg, que ha suspendido la implantación de Microsoft 365 en los centros educativos por vulneración de la privacidad.

Esta ha sido una de las muchas aportaciones de los participantes del Encuentro Internacional de Educación Digital Democrática y Open EdTech, que ha tenido lugar en Barcelona del 12 al 14 de julio. Organizado por la plataforma de derechos digitales Xnet, el evento viene a llenar vacíos institucionales y a dotar a los educadores, los legisladores y la ciudadanía de perspectivas para una educación digital que ponga los derechos humanos y la soberanía digital en el centro.

El encuentro ha sido también una llamada de atención a los diseños de políticas educativas que consideran la digitalización de la educación como un simple product placement [posicionamiento de productos]de tecnologías en su gran mayoría proveídas por las grandes multinacionales tecnológicas sin plantearse si la digitalización que se lleva a cabo es respetuosa con los valores democráticos. Es en este contexto que se ha realizado una sesión divulgativa para presentar el código de la suite digital educativa DD [Digitalización Democrática], una herramienta auditable e interoperable que hemos desarrollado como alternativa ágil a las soluciones Big Tech y que se ha implementado ya en once centros educativos de Barcelona.

Alexis Kauffmann, responsable de recursos educativos abiertos de la Dirección de Educación Digital del Ministerio de Educación francés, y la comisión de educación del Parlamento Vasco, presentes en el evento, han puesto de manifiesto su deseo de abrir vías de colaboración con la Dirección de Innovación Democrática del Ayuntamiento de Barcelona para la implementación de DD en su territorio. “Internet no es una herramienta, un nuevo martillo que nos ayude a clavar mejor los clavos de siempre, sino que ha venido a transformar la sociedad en la que vivimos”, señaló el Ministro de Universidades, Joan Subirats, en su intervención.

Enseñar la cultura digital desde una perspectiva innovadora, integral y crítica, que supere el enfoque reduccionista que la considera una cuestión meramente técnica o instrumental, ha sido el objeto de diversos paneles, entre los que han destacado las intervenciones de Nick Couldry, profesor de Medios y Teoría Social en la London School of Economics; Andrea G. Rodríguez, analista de políticas digitales en el European Policy Centre; Juliana Raffaghelli, del grupo de investigación en Educación y TIC de la Universitat Oberta de Catalunya; el antropólogo Artur Serra, o Florencio Cabello, profesor de Sociedad de la Información de la Universidad de Málaga.

Diversos representantes de la sociedad organizada han aportado experiencias de éxito en defensa de los derechos digitales en el ámbito educativo, como la ONG británica Defend Digital Me (Defiende mi Yo Digital), el colectivo alemán Unsere Digitale Schule (Nuestra Escuela Digital), el movimiento sueco Öppna Skolplattformen (Abramos las Plataformas Escolares), o la Electronic Frontier Foundation (EFF) estadounidense.

Con todos ellos se ha constituido un grupo de trabajo y observatorio para elaborar recomendaciones con las que modificar los marcos competenciales actuales con el objetivo de que la administración pública se haga realmente garante de una cultura digital respetuosa de los derechos humanos y reduzca la presión sobre el profesorado.

Simona Levi es activista, dramaturga y directora de teatro

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