Candela Antón muestra la maldad femenina en un monólogo
La actriz estrena ‘Nadie dice que esté loca’ en el teatro La Gleva
La actriz Candela Antón, famosa por su papel de Berta Prats en Merlí, estrena el jueves en el teatro La Gleva de Barcelona el monólogo Nadie dice que esté loca, en el que muestra, afirma, la maldad femenina. Obra de Daniel Tollesson, la pieza es “un viaje a las entrañas de una mujer perversa y sanguinaria”. El espectáculo estará en cartel hasta el 27 de febrero en la sala impulsada por Albert de la Torre.
“Mi personaje, Amanda, es una mujer entre la juventud y la madurez, casada y que reconstruye la historia de su relación imperfecta de pareja y sus discusiones”, explica Antón. “Ella es muy brutal, narcisista y algo perversa”, añade de su personaje. “El dramaturgo, Daniel, que es mi pareja real, dice que es un monólogo que habla de amor y crueldad”.
Puede parecer a contracorriente mostrar hoy a una mujer bajo un prisma tan desfavorable. “Bueno, desde luego es una mujer de armas tomar, malvada, pero hay una línea más íntima que hace que reflexiones sobre la idea de maldad”. Curiosamente, la obra fue un regalo de aniversario. “Sí, paradójicamente tiene una historia muy bonita: me la regaló Daniel cuando cumplimos siete años de relación”.
Candela Antón no se identifica mucho con el personaje. “Me ha costado encarnarlo, yo soy muy visceral y directa, y cálida; me ha sido difícil ser cruel, sibilina, taimada y fría”, El monólogo dura una hora y veinte minutos, “un reto muy grande, pasar todo ese tiempo en escena; la interpretación que ofrezco es muy puntillista y técnica”. Cuenta, eso sí, con apoyo del espacio “minimalista pero muy cinematográfico” que le ha creado Tollesson.
La actriz, conocida también por sus papeles en la serie Pulseras rojas y la película Blog, se ha centrado últimamente en su proyecto pedagógico (la escuela de actores La Contracultural, fundada con Tollesson) y diversos espectáculos de microteatro. “Me interesan mucho la investigación y los nuevos lenguajes, y soy feliz con la libertad de creación que tenemos”. No obstante, es una de las protagonistas de la película de terror Amigo invisible, dirigida por Pablo J. Cosco, que se acabó de rodar en diciembre en el palacete modernista de Villa Urrutia, en l’Albiol (Tarragona). “Es un slasher, una peli de género de psicópata que va matando a jóvenes, yo hago de buena, y soy una de las víctimas”.
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