La Generalitat sostiene que en una Cataluña independiente “no habría tantos muertos”

La Generalitat ha proseguido este lunes con las descalificaciones al Gobierno por la gestión de la crisis sanitaria y ha subido un peldaño más al vaticinar que en una Cataluña independiente “no habría habido ni tantos muertos ni infectados”, porque se hubiera actuado antes. En paralelo, la idea del pasaporte inmunológico para el desconfinamiento se desinfla por la división en el Govern, apenas 24 horas después de que la defendiera Quim Torra ante Pedro Sánchez el domingo en la videoconferencia de presidentes autonómicos.

“Estoy segura de que no habría habido ni tantos muertos ni tantos infectados y probablemente se habría podido controlar de otra manera esta pandemia”, ha respondido este lunes en una entrevista en Ràdio 4 la consejera de la Presidencia y portavoz de la Generalitat, Meritxell Budó, sobre los efectos que hubiera producido la covid-19 en una Cataluña independiente. “Lo que está claro es que habríamos tomado medidas de manera diferente”, ha añadido.

Horas después, en la rueda de prensa diaria, Budó ha asegurado que la Generalitat hubiera decretado el estado de alarma y el confinamiento de Cataluña 15 días antes de lo que hizo el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y que todo habría sido distinto. El decreto del Ejecutivo entró en vigor la medianoche del 14 al 15 de marzo. Quince días antes —la fecha en la que hubiera actuado la Generalitat según el relato de la portavoz—, el 29 de febrero, se celebró un acto masivo del independentismo en la localidad francesa de Perpiñán, muy cerca de la frontera, al que acudieron Carles Puigdemont, Quim Torra y casi todo el Govern.

“Claro, por eso 15 días antes se fueron a Perpiñán a celebrar un acto separatista, a pesar de las advertencias que ya había hecho la OMS. ¿O ya se le ha olvidado, consejera?”, ha recordado en Twitter la líder de Ciudadanos Lorena Roldán. Por su parte, el PSC ha reaccionado a las palabras de Budó con una batería de preguntas parlamentarias reclamando concreción sobre los estudios epidemiológicos en los que se fundamentaban sus palabras, las medidas que hubiera adoptado el Govern y cuánto habrían disminuido los afectados. Y el líder del PP catalán, Alejandro Fernández, ha publicado otro tuit en el que replica irónicamente a Budó: “Seguro que en las residencias de ancianos catalanas piensan igual...”

En paralelo, este lunes se ha evidenciado una nueva división en el Govern a cuenta del “pasaporte inmunológico” que propone la Generalitat entre las medidas para el desconfinamiento. Los consejeros de Esquerra Republicana, a diferencia de la mayoría de los de Junts per Catalunya, rechazan la iniciativa. La consejera de Salud, Alba Vergés, (ERC), ha esquivado como ha podido pronunciarse en contra. “No es relevante mi opinión”, ha asegurado sobre una medida que rechazan los expertos en salud pública y que sería una suerte de certificado que identificaría a las personas que han pasado la enfermedad.

“Queremos controlar la epidemia, no la sociedad”, ha apostillado Vergés, quien ha repetido en varias ocasiones que ese “pasaporte” era solo una propuesta, nada más, y que eso “no podría ir jamás en contra de los derechos y libertades, como la privacidad o la protección de datos”.

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