Jaén implora al Abuelo para que llueva

“Sin agua no hay aceituna, y sin aceituna, la provincia de Jaén sufre”, entonaba el obispo jiennense Sebastián Chico mientras la imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno, conocido popularmente como El Abuelo, se reencontraba este lunes con los miles de personas que han participado en una procesión rogativa por la situación de sequía, algo que no se celebraba en Jaén desde hace 74 años.

Vecinos llegados desde toda la provincia han acudido a esta cita mariana, que ha recorrido el casco antiguo de Jaén en medio de un sol radiante y a más de 30 grados de temperatura. “Nosotros ahora necesitamos elevar nuestras súplicas a Dios para que nos envíe el agua que riegue nuestra tierra sedienta, recupere nuestros manantiales y afluentes, eleve el caudal de nuestros ríos y aumente la reserva de nuestros pantanos”, ha proclamado el obispo de Jaén, mientras exhortaba a los ciudadanos a sumarse a la oración para pedir el agua.

En los últimos dos meses, la lluvia apenas se ha dejado ver en esta tierra con una fuerte dependencia del sector primario. Más que las exiguas reservas de agua ―los pantanos están a poco más del 25%― los cimientos de esta provincia se están resintiendo debido por el impacto de la sequía en la agricultura. El principal territorio oleícola del mundo, con 67 millones de olivos, ha tenido este año una merma de más del 60% en la cosecha de aceite de oliva, y las previsiones para este año son aún peores por el estrés hídrico que sufre el árbol. En lo que va de año hidrológico, que comenzó el 1 de octubre, apenas se ha recogido un tercio de la media histórica.

Aunque la convocatoria del obispo se produjo el pasado 14 de abril, el último fin de semana han asomado las primeras precipitaciones en algunos puntos de la sierra de Jaén, algo que ha servido para animar aún más la presencia en la procesión.

Apenas ha habido voces críticas a esta manifestación religiosa. Tan solo la asociación Jaén Laica ha mostrado su perplejidad y, a través de un comunicado, en el que han exhortado al obispo de Jaén a pedir a su feligresía acompañar sus oraciones “con actuaciones prácticas ante esta situación de emergencia climática sin precedentes”. Actuaciones, dicen, como el cumplimiento de medidas ambientales efectivas que protejan el buen uso del agua y que ayuden a mitigar el deterioro de las condiciones de vida del planeta.

La imagen del Abuelo, sin duda la más venerada por los jiennenses, ha recorrido las calles de la capital de forma muy distinta a como lo hace en cada madrugada del Viernes Santo. Lo ha hecho sin el acompañamiento musical, algo que muchos vecinos han censurado, y con los únicos sonidos durante el trayecto de la escolanía de la catedral de Jaén.

Antes de llegar a la seo jiennense, una joya del renacimiento que aguarda desde hace años su declaración como patrimonio mundial por la Unesco, la comitiva ha realizado varias paradas para la oración de los fieles, empezando por el convento de Santa Teresa, donde se ha visto otra estampa poco habitual: las monjas cantando en la calle.

Ya en la catedral, el obispo ha oficiado una misa donde ha vuelto a pedir por “experimentar la caricia de Dios” de la que habla el papa Francisco. A su término, ha impartido la bendición a los fieles y a los campos de olivos jiennenses, en presencia del Santo Rostro, otra de las imágenes icónicas de la catedral de Jaén.

Otras procesiones por la lluvia en Andalucía

La procesión rogativa de Jaén ha sido histórica, pero no inédita. Ya en 1949 la imagen del también conocido como el Señor de la Lluvia recorrió las calles ante otra situación similar de sequía. El investigador local Francisco Jiménez recuerda que esas rogativas ya eran muy comunes en el siglo XVII, “unas veces ante grandes sequías y, en otras ocasiones, para pedir su intercesión ante pandemias, plagas e incluso terremotos”.

La procesión de Jaén no será la única de este tipo en Andalucía. El próximo 7 de mayo también saldrá a la calle la Virgen de Linarejos, alcaldesa honoraria y patrona de Linares (Jaén). En Granada, la Virgen de las Angustias, patrona de la ciudad, será expuesta este martes, 2 de mayo, en veneración devocional extraordinaria, por primera vez a la altura de los ojos de los fieles, para que llueva, en lo que la hermandad ha calificado de “cita histórica” para “darle gracias por tantos favores recibidos” en la historia de la archidiócesis y “de forma muy especial para pedirle por la sequía”, informa Europa Press.

En el municipio malagueño de Alozaina se adelantaron el domingo para sacar en procesión al patrón de los agricultores y del campo, San Isidro Labrador. Este municipio de unos 2.000 habitantes, ubicado entre el valle del Guadalhorce y la serranía de Ronda, recurrió a la fe “ante la persistente sequía” y sacó al santo por sus calles para pedirle que llueva. En Córdoba, la hermandad del Arcángel San Rafael dedicará la procesión con el Custodio de Córdoba el 6 de mayo “al Arcángel San Rafael por la falta de lluvia y poder obtener por su intercesión el don para que vuelvan las lluvias tan necesarias para todos y en especial para los agricultores y ganaderos”