La fiscal jefe europea: “No puedo aceptar que a la Fiscalía Europea se le impida ejercer su competencia por falta de recursos”

La fiscal jefe europea ha pedido ayuda a España para que dote de agentes de policía los casos que investiga el organismo que dirige. Laura Codruța Kövesi ha visitado la sede en España de la Fiscalía Europea (EPPO, por sus siglas en inglés) y se ha reunido con los ministros de Interior, Fernando Grande-Marlaska, y Justicia, Félix Bolaños, a los que ha reclamado que el Gobierno destine a policías españoles a que colaboren con la EPPO. Kövesi ha alertado de las necesidades operativas de su organismo y ha pedido que España actúe de manera análoga a como ya hace destinando agentes a la Fiscalía Anticorrupción. La Fiscalía Europea no cuenta en la actualidad con policías propios.

“He mantenido una reunión franca y constructiva con ambos ministros, y acordamos que, después de este período de conocimiento mutuo, las actividades operativas de la EPPO en España deben alcanzar un nivel superior. Concretamente, esto significa que no puedo aceptar que a la EPPO se le impida ejercer su competencia por falta de recursos”, ha señalado en una rueda de prensa la fiscal, acompañada por el ministro Bolaños. Kövesi ha enfatizado su petición: “Lo que solicito es sencillo y ya conocido por todos: agentes de policía dedicados a trabajar en los casos de la EPPO”. La fiscal ha destacado que el organismo necesita también “más fiscales delegados europeos y más personal de apoyo”.

La fiscal ha insistido en que la colaboración de los policías que solicita seguiría el patrón de la colaboración con Anticorrupción. “No es ni más ni menos que el modelo que ya existe en España con la Fiscalía Anticorrupción. Soy una gran defensora de este modelo”. Según ese esquema, los agentes investigarían en las oficinas de la EPPO bajo la dirección de los fiscales delegados europeos. Kövesi, que fue fiscal general y fiscal anticorrupción en su país, Rumania, dirige desde su creación hace tres años la EPPO, la primera fiscalía transnacional, que está especializada en delitos financieros que afecten a los intereses financieros de la Unión Europea.

La fiscal ha justificado su nueva visita a Madrid, tres años después de la primera, para verse con los ministros de Interior y Justicia y transmitirles su petición. “Hace tres años entendí por parte de las autoridades nacionales que necesitaban algo de tiempo para familiarizarse con la Fiscalía Europea, comprender qué hacemos y cómo trabajamos”, ha explicado Kövesi, que ha reconocido que el organismo que dirige ha visto crecer desde entonces al enemigo al que se enfrenta. “Cuando comenzamos a operar, en junio de 2021, no esperábamos ver lo que estamos viendo. La EPPO fue creada con el supuesto de que enfrentaría, ocasionalmente, a grupos de crimen organizado. En realidad, muy rápidamente, nos estamos encontrando que nos enfrentamos con criminales que no evitan recurrir a la violencia extrema. Esperábamos que nuestro trabajo fuera proteger el Presupuesto de la UE, pero hemos descubierto que también se trata de proteger nuestra seguridad interna”, ha especificado.

Para respaldar su petición, Kövesi se ha referido de pasada al caso Koldo, que investiga la trama corrupta que, supuestamente, anidó en el Ministerio de Transportes durante lo peor de la pandemia (marzo de 2020) y ganó 15 millones de euros en muy poco tiempo con la venta de millones de mascarillas a 2,5 euros por unidad. “Incluso el Tribunal Supremo ha destacado en la reciente decisión que asignó el caso Koldo a la Audiencia Nacional la falta de una unidad de apoyo policial como una razón para no asignar el caso a la EPPO”, ha esgrimido. “También estamos investigando corrupción, y queremos hacerlo con los mismos estándares requeridos en España. La EPPO investiga corrupción cuando está vinculada a los intereses financieros de la Unión Europea, y continuaremos investigando corrupción en España. Estamos aquí para quedarnos”, ha abundado la fiscal, que ha destacado que los casos que tiene a cargo la Fiscalía Europea son “complejos” porque “implican crimen organizado transnacional”. “Su número seguirá aumentando”, ha aventurado.

“Acordamos con ambos ministros que, ya sea que el crimen organizado trafique migrantes o robe dinero de la UE, se trata del mismo crimen organizado”, ha señalado por último la fiscal, que ha asegurado que el titular de Interior se ha comprometido a reevaluar la situación y a informarla sobre cómo “continuar mejorando juntos”.