Alcaldes vascos se rebelan contra la justicia en defensa del euskera en sus Ayuntamientos

La reciente sentencia del Tribunal Constitucional (TC) que anula artículos de la ley municipal vasca que permite el uso prioritario del euskera en los ayuntamientos ha encendido los ánimos de los alcaldes nacionalistas de esta comunidad. 77 regidores de 251 consistorios del País Vasco, todos ellos del PNV y EH Bildu, han levantado sus bastones de mando para protestar contra esta decisión judicial que consideran una “ofensiva más amplia que se enmarca en una ola reaccionaria contra las lenguas minorizadas”. La movilización reunión a los regidores de Bilbao y San Sebastián, Juan Mari Aburto y Eneko Goia, respectivamente, pero no a la alcaldesa de Vitoria, la socialista Maider Etxebarria.

La revuelta de los alcaldes tiene su origen en la decisión de los jueces de tumbar el artículo 6.2 de la ley de Instituciones Locales de Euskadi (conocida como ley municipal vasca) que habilita a los ayuntamientos para poder funcionar internamente, y en relación con otras instituciones públicas, exclusivamente en euskera. Ese controvertido punto establece que “las convocatorias, órdenes del día, mociones, votos particulares, propuestas de acuerdo, dictámenes de las comisiones informativas, acuerdos y actas de los órganos de las entidades locales podrán ser redactados en euskera […] siempre que no se lesionen los derechos de ningún miembro de la entidad local que pueda alegar válidamente el desconocimiento del euskera”. La normativa obliga al concejal o al trabajador de ese ayuntamiento a alegar expresamente que no sabe euskera para que se le traduzcan los documentos al castellano. Para el Constitucional, esto supone un “uso preferente” de la lengua vasca que conculca varios artículos de la Carta Magna y es contraria a la doctrina constitucional.

El pronunciamiento del Constitucional viene de un conflicto planteado en septiembre de 2021 por el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV), que ya advirtió de sus dudas sobre la legalidad del contenido de la ley vasca porque “sitúa al euskera en una posición de primacía que impide la libertad de opción de los hablantes” de los dos idiomas oficiales en el País Vasco y que el equilibrio entre ambas lenguas se veía “coartada”. El TC ha ido en la misma línea y considera que el euskera recibe un “trato preferente” que “menoscaba los derechos lingüísticos” de quienes no conocen la lengua vasca.

Los alcaldes nacionalistas consideran que la decisión del Constitucional es un “obstáculo” para la normalización del euskera. La sentencia, que se conoció el 6 de julio, “desprecia tanto al euskera como a las personas vascoparlantes y obstaculiza el desarrollo de políticas lingüísticas capaces de hacer frente a los grandes desafíos de futuro en el camino de la normalización y la revitalización del euskera”, argumentaron en la declaración que el jueves leyeron frente a la sede del Superior de Justicia vasco. El fallo de los jueces va en contra de la revitalización del euskera y también es “contraria a un amplio consenso social” porque, señalan los alcaldes firmantes, la ley municipal que ha impugnado ahora el TC fue aprobada con un “amplio consenso social” en el Parlamento autónomo. “En definitiva, cuestiona la capacidad de decisión de la ciudadanía y de los ayuntamientos”, remarcan.

A esa cita no acudió la socialista Etxebarria, al frente del Ayuntamiento de Vitoria, porque no había tenido conocimiento de que iba a celebrarse la protesta: “Me ha sorprendido. No tenía conocimiento de esta convocatoria. He visto que solo había alcaldes de EH Bildu y del PNV. No sé si todo el mundo ha sido convocado, yo al menos no tengo conocimiento”, ha comentado este viernes a los periodistas.

La concentración de los alcaldes ha estado impulsada por Kontseiluak, organismo que reúne a las principales organizaciones que trabajan en favor del euskera y secundada por otras asociaciones y entidades como la asociación de ikastolas, Eusko Ikaskuntza, Topagunea o Elhuyar, entre otras. Al término de la lectura del manifiesto, los alcaldes presentes en la concentración han levantado las varas de mando que simbolizan su cargo y con las que han asistido al acto, en señal de protesta por el citado fallo judicial. En las pasadas elecciones municipales del 28-M, el PNV se hizo con 122 ayuntamientos vascos, mientras que EH Bildu gobierna en otros 83, con lo que entre ambas formaciones nacionalistas controlan 205 de los 251 consistorios. El resto está en manos de agrupaciones vecinales independientes y del PSE-EE (10) y el PP (dos).