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Petro alerta en el Congreso contra sus opositores en Colombia y los negacionistas del cambio climático

Los diputados de Vox dan plantón al jefe de Estado colombiano, a quien Abascal tacha de “terrorista”

El presidente colombiano, Gustavo Petro, junto a la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, este miércoles en el Congreso.Foto: OSCAR DEL POZO (AFP) | Vídeo: EPV

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha aprovechado este miércoles su discurso ante el Congreso de los Diputados, en la primera etapa de su visita de Estado a España, para alertar contra los que le atacan en su país por promover cambios y contra los “negacionistas” del cambio climático en general. Antes de acudir a las Cortes, Petro ha estado con los Reyes, que luego le han ofrecido un almuerzo oficial. En el Congreso ha sufrido un plantón de los diputados de Vox, entre aplausos del resto de la Cámara baja. El mandatario colombiano ha pedido a España y a la Unión Europea, ante la próxima cumbre con las naciones latinoamericanas, medidas concretas y urgentes para evitar “la extinción” del planeta.

Gustavo Petro está realizando estos días una visita de Estado a España en la que se contemplan varios actos institucionales. La anterior visita de ese calibre la había realizado en noviembre de 2021 el presidente italiano, Sergio Mattarella. La presidenta del Congreso, la socialista Meritxell Batet, ha trasladado a Petro en su discurso de bienvenida su deseo de que “su empeño en alcanzar la paz total sea un logro efectivo en beneficio de todos los colombianos”, ha hablado de los retos, valores y amenazas comunes y ha concluido que los desafíos reformistas son semejantes para “robustecer la democracia” y deberían consistir en “consolidar la paz, profundizar la democracia, garantizar la equidad y proteger el medio ambiente”.

Cuando Batet ha concluido sus palabras y antes de que el presidente colombiano tomara la palabra, los diputados de Vox, encabezados por su jefe de filas, Santiago Abascal, se han levantado de sus escaños y han abandonado el hemiciclo. Hasta que no ha salido el último, no ha cesado la ovación de los demás diputados, puestos en pie. Algunos diputados del PP, pocos, se han levantado, pero no han aplaudido. Otros han tardado en aplaudir hasta constatar que su líder, Alberto Núñez Feijóo, que estaba presente en el hemiciclo en su condición de senador, lo ha hecho. Al acto han acudido una decena de ministros del Gobierno, pero no el presidente, Pedro Sánchez.

A Petro no le ha pasado desapercibida la escena. “En 20 años que llevo de parlamentario nunca había tenido un aplauso tan prolongado”, ha comentado antes de comenzar su discurso, en el que ha improvisado muchas partes sin leer.

El presidente de Colombia ha empezado su intervención definiendo su país como el “de la belleza y la sangre” para destacar así su carácter apasionado, que ha conectado con el español. Luego ha mencionado El Quijote y ha realizado algún paralelismo con su espíritu quijotesco a la hora de hacer política y encarar algunos “terribles momentos” que ha tenido que soportar en lo que lleva de mandato. Fue ahí cuando comentó que en su persona “se centran los ataques de quienes no quieren los cambios, pero también las esperanzas” de otras muchas, y en especial ha citado a las mujeres, que creen que él puede “cambiar el rumbo” de su país.

“Extinguirnos o cambiar”

En su discurso ante diputados y senadores, Petro ha animado a España a “construir una nueva hermandad” con América Latina que deje atrás el pasado y mire al futuro, y ha destacado la importancia de que España ocupe la presidencia europea en el segundo semestre de este año y se celebre una cumbre entre la UE y la CELAC (Comunidad de Estados de América Latina y el Caribe), a la que ha dado por descontado que asistirá. Aunque ha reconocido que algunos pueden tacharlo de “apocalíptico”, ha alertado sobre la catástrofe hacia la que se encamina la humanidad si no se frena el calentamiento global. “Estamos en las puertas de extinguirnos o cambiar”, ha proclamado, tras subrayar que no se trata de creer o no en el cambio climático, sino de atender las advertencias de los científicos.

“La ciencia y la política que se base en la ciencia es la que puede llamarse progresista y la que nos puede dar un futuro mejor para la humanidad”, exhortó el dirigente colombiano. Petro concedió que “el cambio climático no es una religión, es ciencia” y señaló que si se opta desde la política negacionista por “mirar para otro lado solo lograremos que esos días hasta la extinción estarán más cerca”.

Mientras Petro hablaba, Abascal convocaba a los periodistas para justificar el plantón de su grupo. “Muchos españoles desconocen a quién hemos puesto hoy alfombra roja en España y en el Congreso de los Diputados”, ha declarado. “Petro es a Colombia lo que Otegi a España: un terrorista no arrepentido, un señor que antes de coger el avión ha insultado a España, para después recibir el collar de Isabel la Católica. Esto no es más que una muestra de la política internacional de este Gobierno, siempre sumiso ante los enemigos de las libertades”, ha añadido. A continuación, ha insistido en que recibir a Petro supone “blanquear” a un terrorista con “un pasado que no se puede ocultar, un pasado de sangre, que ha dejado dolor y muertos en Colombia”.

Para hacer estas graves acusaciones, Abascal se ha basado en que Petro ingresó con 17 años en el movimiento guerrillero M-19 y fue miembro destacado de su estructura política, participando en la negociación con el Gobierno de Virgilio Barco (1986-1990), que concluyó con su desarme y desmovilización en 1990. Pero el actual presidente colombiano nunca fue acusado de delitos de sangre y solo fue condenado, en 1985, por tenencia ilícita de armas. Respecto a los supuestos “insultos a España”, se refería al discurso pronunciado por Petro el pasado 1 de mayo, cuando dijo que quienes lucharon por la independencia de América Latina querían liberarse “del yugo español” y de un régimen de producción esclavista.

En realidad, la ofensiva de Vox contra Petro es muy anterior a estas palabras. Ya el pasado 25 de abril, su portavoz en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros, que este miércoles no ha estado en el hemiciclo, anunció que los diputados de Vox no participarían en la visita de Estado del mandatario colombiano. Disenso, la fundación de Vox que preside el propio Abascal, difundió en mayo del año pasado, un mes antes de las elecciones que le dieron la victoria, un informe en que aseguraba que el triunfo de Petro supondría “una amenaza para la democracia en Colombia y en toda la región”.

Este miércoles, Disenso ha convocado frente al Palacio de las Cortes una concentración de protesta por la visita del mandatario colombiano, que ha reunido a unas decenas de personas, a las que Abascal se ha acercado a saludar en medio de una fuerte vigilancia policial. Además, Vox ha entregado en el Congreso una carta contra el recibimiento a Petro suscrita por 157 parlamentarios de partidos ultraconservadores de una docena de países latinoamericanos, además de los de Vox.

Pese a calificar a Petro de “enemigo de las libertades y la democracia”, Abascal ha evitado cuestionar la limpieza de las elecciones colombianas, como hizo con las que ganó el brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, quizá porque en Colombia, al contrario que en Brasil con Jail Bolsonaro, el oponente de Petro, Rodolfo Hernández, reconoció la victoria de su rival.

El presidente colombiano ha visitado el Congreso de los Diputados al inicio de su primera visita de Estado a España desde que asumió el poder el pasado agosto y cuyo objetivo es robustecer las relaciones bilaterales en lo económico y comercial, pero también tratar el proceso impulsado en el país latinoamericano para conseguir lo que Petro denomina “la paz total”. A las 11.00, los reyes Felipe VI y Letizia han dado la bienvenida oficial al mandatario. El presidente colombiano y la primera dama, Verónica Alcocer, han sido recibidos con honores en el Patio de la Armería del Palacio Real, en una ceremonia de recibimiento a la que ha asistido el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y representantes de las principales instituciones del Estado. Por la tarde, los Reyes ofrecen una cena en honor al presidente colombiano en el Palacio Real de Madrid, a la que asistirán la vicepresidenta primera, Nadia Calviño; el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, y el ministro de Industria y Comercio, Héctor Gómez.

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