Yolanda Díaz iniciará el 8 de julio en Madrid su gira para conformar una nueva plataforma política

Las incógnitas en torno al futuro del espacio a la izquierda del PSOE empiezan a despejarse. Yolanda Díaz iniciará el 8 de julio en Madrid su gira por España para conformar una nueva plataforma política que concurra a las próximas elecciones generales. Lo hará con un primer encuentro en la capital en plena celebración de la fiesta del Orgullo, y los actos se extenderán a lo largo de seis meses, según han adelantado este jueves fuentes conocedoras de la iniciativa y posteriormente ha confirmado ella misma. El anuncio, que se produce en plena campaña andaluza, concreta unos planes que la líder de Unidas Podemos en el Ejecutivo llevaba aplazando meses ―lo verbalizó por primera vez en el verano del año pasado― y que definirán la reconfiguración de las fuerzas a la izquierda de los socialistas.

El objetivo de la vicepresidenta segunda del Gobierno es completar un recorrido por buena parte del territorio nacional para reunirse y conversar con diferentes colectivos profesionales y sociales. Un “proceso de escucha”, como Díaz lo ha bautizado, que le permitirá recoger ideas para esbozar un proyecto propio, con el objetivo de ampliar la base electoral de Unidas Podemos. El plan ha generado múltiples fricciones con el partido fundado por Pablo Iglesias, inquieto ante la falta de concreción, las dudas sobre el papel que tendrá Podemos y la posible incorporación de Más País, la formación de Íñigo Errejón, a la futura plataforma.

Sobre su relación con Podemos, la ministra de Trabajo ha reconocido por primera vez en una entrevista en La Sexta que le dicen que están “nerviosos” y hay cierta tensión por el impulso de la plataforma, aunque ha calificado la relación de “buena”. “Hablo con los mayores a veces y me dicen que están nerviosos, pero no sé muy bien por qué. Tranquilidad, ya está, vamos a sumar y no hay problema (...). No es necesario romperlo todo, es necesario cuidarse”, ha advertido a sus compañeros de filas en televisión.

En esta primera fase y a través de Sumar, la asociación creada para organizar toda la gira y que denomina al proyecto, la vicepresidenta quiere dar voz a la ciudadanía por encima de las fuerzas políticas. La negociación oficial con los partidos llegará una vez concluya su periplo y Díaz decida si está dispuesta a encabezar la candidatura a la presidencia del Gobierno, un extremo sobre el que pocos dudan, pero que ella se resiste a confirmar. “En este momento no soy yo la protagonista, es la sociedad”, ha insistido Díaz, posponiendo a una siguiente fase la decisión. Ha añadido que en la futura plataforma “cabe todo el mundo” y que ella aspira a que esté toda la militancia de IU y Podemos, que son de “oro”. ”Yo jamás voy a excluir a nadie”, ha asegurado. El éxito del proyecto de la vicepresidenta es clave también para el PSOE, consciente de la necesidad de movilizar a todo el electorado progresista para tener opciones de revalidar mandato frente a una derecha al alza.

Entre las personas vinculadas al proceso se encuentran Xavier Domènech, exsecretario general de Podemos Cataluña y ex coordinador general de Catalunya en Comú, y el eurodiputado Ernest Urtasun. También Marta Lois, concejala de Compostela Aberta (una de las mareas gallegas), y Elena Cardezo, asesora jurídica del gabinete y una de sus colaboradoras más cercanas. Díaz plantea un proceso con formatos mixtos. Habrá coloquios, asambleas e incluso eventos de tipo lúdico. En paralelo a las reuniones con colectivos se organizarán grupos de trabajo encargados de sintetizar las ideas recogidas en los encuentros y que servirán de base a ese proyecto político futuro.

Las negociaciones de la reforma laboral, las elecciones en Castilla y León, las consecuencias de la guerra de Ucrania o los comicios andaluces habían obligado a la vicepresidenta a posponer sus planes en varias ocasiones. El anuncio, sin embargo, ha acabado por producirse en plena campaña electoral andaluza, bajo un clima desfavorable para la izquierda y donde por primera vez una misma candidatura reúne a Podemos, IU y Más País.

El éxito de haber logrado atraer a Errejón a la coalición Por Andalucía quedó, sin embargo, opacado por las tensas negociaciones con Podemos, que desembocaron en un caos administrativo y político. Al apurar tanto los plazos, Podemos y Alianza Verde acabaron fuera del registro oficial de la marca y sus candidatos concurren oficialmente como independientes.

Tras la trifulca entre los grupos y pese a haber mediado en las conversaciones, Díaz desvinculó la plataforma andaluza de su futuro proyecto. “Ha sido muy importante lo que ha pasado en Andalucía, porque muchas organizaciones políticas que quizás había sido impensable que se miraran de frente, se han mirado”, reconoció. “Pero desgajado completamente del proceso de escucha”, en el que el “protagonismo va a ser absolutamente ciudadano”, puntualizó en mayo. Díaz, principal baza electoral de la formación, participará en tres actos de la campaña andaluza con la candidata de Por Andalucía, Inma Nieto, y compartirá cartel con las ministras de Podemos en dos de ellos —y con Errejón en el otro—. Una escenificación de la unidad en UP que no se produce desde hace siete meses.