México más allá de los mariachis y los tacos: 10 lugares para conocer su cultura y patrimonio
México es mucho más que mariachis y tacos, es un país con tantísimos matices que nunca encontrarás en tu viaje un México igual
México es un país enorme y diverso, su historia se extiende a lo largo de miles de años, desde los antiguos olmecas, mayas y aztecas hasta la llegada de Cortés y tres siglos de dominio español. El país vale ciento y un viajes, pero ¿por dónde empezar? Sus enclaves arqueológicos, la cultura indígena, sus pueblos mágicos, una cocina deliciosa y, cómo no, el Caribe mexicano. Estas 10 paradas nos descubren un México fuera de los estereotipos y más desconocido que nunca.
La basílica de Guadalupe, el santuario de México
Si alguna vez visitaste Ciudad de México es posible que te sintieras como en una maqueta, como que todo era inmenso e inabarcable. Esta ciudad, una de las más grandes y pobladas del mundo, guarda tanto patrimonio que necesitaríamos un año para poder conocerlo en su totalidad. Sin embargo, hay imprescindibles: el zócalo o plaza de la Constitución, el mercado de San Juan, el monumental Museo Palacio de Bellas Artes y el Museo Nacional de Arte, los barrios de Condesa y Coyoacán con el Museo de Frida Kahlo, el gran bosque de Chapultepec y el Museo Nacional de Historia, y, por supuesto, la basílica de Guadalupe, el santuario de México. En este lugar cientos de personas veneran a la Virgen de Guadalupe, la patrona del país. No importa si eres religioso o no, esta basílica es igualmente un punto turístico. ¿Por qué? Es el recinto mariano más visitado del mundo, con entre 17 y 20 millones de visitantes anuales, solo superado por la basílica de San Pedro en el Vaticano. El gran edificio circular de la nueva basílica es impresionante por su grandiosidad, fue hecho realidad por el arquitecto Pedro Ramírez Vázquez. Se necesitaron dos años para terminarlo (1974-1976).
Teotihuacán, el lugar de los dioses
A unos 53 kilómetros de Ciudad de México se encuentra la llamada ciudad de los dioses, Teotihuacán. El topónimo es de origen náhuatl y fue empleado por los mexicas, así se conocía la que fuera una de las mayores ciudades de Mesoamérica en la época prehispánica (150-650 después de Cristo). Los estudios arqueológicos señalan que este valle era uno de los más ricos del lugar, por su vegetación, por su potencial alimentario, por el agua y la fertilidad, pero sobre todo por la obsidiana, el mineral más importante de la economía de la época. Gracias a esa riqueza vivieron su momento de esplendor hasta 100.000 personas que marcaron para siempre la vida política, social, económica y cultural de los pueblos del altiplano mexicano. No es de extrañar que este fuera declarado, en 1987, patrimonio mundial de la Unesco.
En Teotihuacán hay que visitar la zona arqueológica, el templo de Quetzalcóatl, la pirámide del Sol, el templo del Quetzalpapálotl, el templo de los Caracoles Emplumados y la pirámide de la Luna, desde donde se aprecia la Calzada de los Muertos.
El Museo de Antropología, el más grande de México
Este museo, el más grande del país, surgió de una necesidad y de un movimiento intelectual entre 1940 y 1960 de proteger y honrar el pasado de la cultura indígena mexicana, tan menospreciada durante años. Lo consiguió, porque desde 1964 figura como uno de los museos de referencia en el mundo. Ubicado en el bosque de Chapultepec, su bellísimo edificio de arquitectura contemporánea mexicana repasa los orígenes de las civilizaciones del México antiguo.
Este museo, así como el resto de las paradas de este artículo, se pueden conocer en un recorrido mágico por México con EL PAÍS VIAJES y Álvaro Planchuelo, arquitecto y diseñador, escritor y fotógrafo de viajes, además de arqueólogo y restaurador de monumentos. El próximo mes de octubre partirá con un grupo de viajeros durante 15 días en los que recorrerá los lugares culturales más icónicos de México. En este enlace puedes obtener más información.
Trajineras, paseo a todo color por los canales de Xochimilco
No hay un rincón más folclórico en toda Ciudad de México que los canales de Xochimilco. El color de sus trajineras insufla alegría y ganas de festejar. Desde 1987 figura en la lista de patrimonio de la humanidad y ¿sabes por qué? Ubicado al sur de la ciudad, Xochimilco es un lugar repleto de encantos, pero, sobre todo, de tradiciones. Las trajineras son el primer medio de transporte que se utilizaba para cruzar los canales, así lo hacían los xochimilcas, la primera tribu nahuatlata que se asentó en el valle de México. En sus 14 kilómetros de canales navegables, los turistas disfrutan de música y antojitos mexicanos. Sus más de 200 trajineras operan a diario en 10 embarcaderos.
Puebla, historia colonial en México
El Estado de Puebla es un hervidero de paisajes, artesanía, pueblos mágicos, historia y arquitectura. Para aproximarse a él conviene una parada en Puebla, una ciudad rica en patrimonio colonial. Es imprescindible su catedral del siglo XVI, dicen que es una de las más bellas de Sudamérica, su altar mayor fue diseñado por el escultor Manuel Tolsá; dentro de su casa de cultura se encuentra la Biblioteca Palafoxiana, que aloja más de 43.000 obras; y en el Callejón de los Sapos, te esperan cientos de muebles y antigüedades para llevarte un recuerdo a casa. Admira también el templo de San Francisco y su impresionante fachada de estilo barroco del siglo XVIII, y no te vayas sin conocer los fuertes de Loreto y Guadalupe.
Cenote Saamal
En la península de Yucatán se calcula que hay unos 2.400 cenotes, eso sin contar los que aún no se han descubierto en alguna hacienda perdida. Estos paraísos bajo el agua son todo un símbolo en la cultura mexicana, su significado literal —abismo en dzonot— ya explica su conexión con el más allá. Los cenotes, con su agua cristalina y rica en minerales, han sido utilizados en la cultura maya para conectar con los dioses, su profundidad —dicen que conectan con el mar— les ha dotado de ese misterio único.
Para que un cenote se forme puede tardar cientos de miles de años. El cenote Saamal, uno de los que se visitarán en el viaje de Álvaro Planchuelo y EL PAÍS VIAJES en México, se encuentra en la hacienda Selva Maya, a unos cuatro kilómetros de la ciudad de Valladolid. Es uno de los más grandes de Yucatán, con una apertura de 50 metros de diámetro y una profundidad de más de 50 metros.
Oaxaca, la cuna de los patriotas
A la ciudad de Oaxaca se la conoce popularmente como la cuna de los patriotas. La capital del Estado es patrimonio de la humanidad desde 1987. Se le concedió porque es una de las ciudades coloniales más bellas de México y Sudamérica. Su lugar estratégico entre sierras montañosas sirvió para que los zapotecas fundasen dos de los centros religiosos precolombinos más importantes del Estado: Monte Albán y Mitla.
En un recorrido por la ciudad no puede faltar la visita a su zócalo, donde se encuentra la catedral del siglo XVI, la iglesia de Santo Domingo con un museo estatal, el exconvento de Santa Catalina y el mercado, uno de los más pintorescos de la región.
Santiago Matatlán, la capital mundial del mezcal
A 45 kilómetros de la ciudad de Oaxaca, Santiago Matatlán es oficialmente la capital mundial del mezcal debido a la cantidad de palenques que posee. Matatlán depende económicamente de la producción del mezcal, que aquí se produce de forma artesanal desde hace cientos de años. Una buena manera de conocer esta tradicional elaboración es visitar algunos de sus palenques para conocer de primera mano a los maestros mezcaleros.
Cañón del Sumidero, un espectáculo natural
El cañón del Sumidero es uno de los enclaves imprescindibles del Estado de Chiapas. Su grandiosidad le ha hecho merecedor de varias nominaciones a las siete nuevas maravillas naturales. Ubicado en el parque natural del Sumidero, tuvo su origen en un largo proceso de fallas geológicas. Su acantilado se eleva a más de 1.000 metros de altura sobre el cauce del río Grijalva; y su luz y calor han propiciado la creación de varios microclimas en la vegetación y fauna a diferentes alturas del cañón. Sin duda, es un lugar idóneo para practicar deportes de aventura.
Chichén Itzá, capital maya de Yucatán
Chichén Itzá es el corazón del imperio maya y uno de los enclaves turísticos más importantes de todo México. Patrimonio de la humanidad por la Unesco desde 1988 y maravilla del mundo desde 2007, la gran ciudad esconde secretos de los mayas y los toltecas. Este lugar llegó a ser un poderoso enclave desde el siglo V al X después de Cristo. En la visita (se recomienda que sea guiada) hay que conocer el templo de Kukulcán, el juego de pelota, el observatorio, el templo de los guerreros, el convento de las monjas y el cenote.
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