Cuando tenerlo todo es posible

En estos tiempos lo queremos todo, también a la hora de movernos por el mundo. Cuando pensamos en el automóvil perfecto para nuestro ritmo de vida, buscamos versatilidad y adaptación al medio. Nos seduce la estética, pero también necesitamos fiabilidad. Deseamos un medio de transporte que nos nos acompañe en la aventura del día a día al mismo tiempo que no queremos sacrificar la comodidad. Queremos estar conectados a nuestro mundo y a la vez poder evadirnos de él cuando lo necesitamos. Muchas veces, conseguir todo es imposible. Otras, en cambio, lo encontramos.

El Discovery Sport, parte de la gran familia Discovery, es una de esas excepciones. Como todos los modelos de la gama, su tecnología todoterreno le permite adaptarse a cualquier tipo de terreno, desde el asfalto de la gran ciudad a las carreteras nevadas de montaña. Su audaz diseño exterior seduce en un primer vistazo, y su habitáculo espacioso, con configuración de 5 + 2 asientos, ofrece confort y versatilidad.

Si su diseño y habitabilidad nos entran por los ojos, sus prestaciones conquistan a través de la conducción. La gama Discovery Sport está equipada con la nueva generación de motores Ingenium de Land Rover, que ofrece eficiencia sin fisuras. Equipados con avanzadas tecnologías y fabricados íntegramente en aluminio, están disponibles en varias versiones de potencia y cuentan con unos niveles de consumo y emisiones excepcionales.

Las opciones de conectividad y tecnología añaden aún más atractivos. El sistema InControl Apps se asegura de que podamos manejar todo lo que nos ofrece un smartphone desde los controles integrados, y el sistema Protect es posible comprobar el nivel de combustible a distancia, localizar el vehículo en un aparcamiento concurrido, guardar un registro de viajes o comprobar si te has dejado alguna ventanilla abierta.

Y para los amantes del sonido, una buena noticia: el sistema opcional Meridian Surround de 825 W está equipado con 16 altavoces y un subwoofer de dos canales para conseguir unos agudos nítidos y unos graves profundos y envolventes en todo el habitáculo. Todo ello, en un tamaño compacto que hace posible que sea el vehículo perfecto tanto para ciudad como para carretera.