Flavio Briatore, expatrono de Fernando Alonso, investigado por corrupción
Los jueces creen que el empresario intentó sobornar a dirigentes para evitar una condena por evasión fiscal relacionada con su yate de lujo
El exmagnate de la Fórmula 1, Flavio Briatore, sigue teniendo problemas con la justicia en el lujoso yate Force Blue, su lugar de vacaciones predilecto en el pasado y epicentro de fiestas y celebraciones de negocios y no solo. El pasado febrero fue condenado en segundo grado a 18 meses de prisión por evasión de impuestos en relación al uso de la embarcación. Ahora los jueces italianos investigan al magnate por un presunto caso de corrupción relacionado con aquel suceso. Según la acusación, el agente comercial del empresario, Andrea Parolini, en arresto domiciliario como medida preventiva, pudo haber sobornado al entonces director de la Agencia Tributaria de Génova, Walter Pardini - también en arresto domiciliario- para que fuera benévolo con su cliente cuando fue acusado de evasión fiscal.
La fiscalía cree que el dirigente y otros administradores públicos pudieron intentar exculpar al millonario. Según apunta el diario La Reppublica, Briatore, de 67 años, habría tratado de obtener un informe "complaciente" del ex director sobre su disputa con la Agencia, para que el documento le sirviera en el juicio penal en curso. A cambio, Pardini habría pedido al magnate algún tipo favor en Kenia, donde el empresario de la Fórmula 1 posee un resort de lujo.
El caso del famoso yate se remonta a 2010. Ese año, la policía financiera italiana irrumpió en el lujoso barco mientras estaban a bordo la exesposa del empresario, la modelo Elisabetta Gregoraci, su hijo de apenas unos meses y una veintena de miembros de la tripulación, les ordenó bajar a toda prisa y requisó la embarcación. El magnate fue condenado en 2015 en primera instancia a un año y once meses de cárcel con libertad condicional por invadir impuestos y tras presentar un recurso fue condenado a 18 meses en segundo grado.
Según la acusación, Briatore había utilizado el yate como embarcación de recreo desde 2006 hasta 2010, sin pagar el IVA por valor de 3,6 millones de euros ni los impuestos asociados al carburante que sumaban otro medio millón.
El empresario multimillonario entonces intentó utilizar una artimaña para eludir la condena. Según la justicia italiana, Briatore decía no ser el propietario del yate y fingía que se lo alquilaba a una empresa con sede en las Islas Caimán. Todo para evitar desembolsar las tasas y disfrutar de ventajas fiscales. Sin embargo, el fiscal mantuvo que el ‘Force Blue’ nunca fue alquilado y que el exdirector deportivo de la escudería Renault lo utilizaba de forma exclusiva.
Briatore siempre presentó a la prensa y a los invitados el yate como si fuera suyo. Además explicaba que se llamaba así, Force Blue –Fuerza Azul– en honor al color azul de la escudería Renault y por sus propias iniciales.
En los 62,33 metros de eslora del buque alternaron los Aznar o Fernando Alonso y el millonario celebró su luna de miel con Gregoraci. Entre otros lujos, contaba con espacio para 12 pasajeros, sala de cine, peluquería, gimnasios o una sauna.
El empresario italiano, habitual de las revistas del corazón, que hace dos años reapareció con un espectacular cambio de imagen y mucho más delgado, se separó hace casi un año de Elisabetta Gregoraci, de 37 años, con quien tiene un hijo en común y llevaba casado 10 años. La expareja mantiene una relación cordial y se han juntado desde entonces en varias ocasiones, como el cumpleaños de su pequeño.
Este verano, Briatore, adepto a su faceta de mujeriego, se ha dejado ver por las calles de Milán con una modelo italiana, Vittoria Di Flavio, de 28 años -40 menos que él- dando a entender que había rehecho su vida con ella. Ambos se conocieron en un exclusivo local de Cerdeña en el que ella trabajaba, el Billionaire de Costa Esmeralda.
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