El péndulo
Si una porción del partido político del anterior Gobierno estaba contundentemente corrompido, también es cierto que su gestión ha permitido que la macroeconomía tomara un camino diferente al del rescate europeo. Cuidar las grandes cifras económicas es necesario, pero no basta. Hay que buscar el equilibrio con las necesidades de las personas.
La derecha española, al parecer, cojea en la gestión social. Tras la moción de censura, la izquierda vuelve a gobernar. Hay que esperar a ver su gestión del dinero público. El dinero de todos. Elevar las pensiones, mejorar la sanidad, la justicia, la educación, etcétera es loable y deseable, pero los recursos son escasos y es de sentido común realizar una gestión prudente buscando el equilibrio entre políticas sociales y macroeconómicas. Una escalada en el gasto social muy severa puede conllevar una importante subida de impuestos que penalicen la economía y el consumo de los ciudadanos. Si lo que nos suben en la pensión nos lo quitan a base de impuestos y encima se cargan la economía, la opción no resulta muy interesante.
Los sistemas políticos necesitan equilibrio y prudencia en su manejo.— José Granados García. Churriana de la Vega (Granada).
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