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¿A qué edad habría que dejar de besar a los hijos en la boca?

Casi la mitad de los padres tienen esta muestra de afecto con sus hijos y algunos piensan que esto genera "confusión sexual"

Un 47,88% de los españoles besa a sus hijos en la boca, pero aún son más los que, aunque no lo practiquen, piensan que se trata de un gesto adecuado (49,29%). Es uno de esos debates en los que caben opiniones para todos los gustos. Se pudo ver cuando Victoria Beckham posteó en las redes una foto en la que besaba en los labios a su hija Harpers y de nuevo cuando un año después David Beckham hizo lo propio. Desde "vergüenza", "asco" a "exhibición repugnante", fueron algunos de los comentarios que saltaron en las redes con motivo de estas imágenes. Pero tantos fueron los detractores como los defensores que alegaban que "el problema es del que juzga".

"No quiero que mis hijos piensen que cualquiera puede besarlos", dice uno de los padres entrevistados para esta encuesta relizada por la empresa de artículos de farmacia para bebés Suavinex. Una de las creencias más extendidas entre quienes se muestran contrarios a este tipo de muestras de afecto es que los hijos pueden "confundirse sexualmente" o ser más "promiscuos de mayores". Según apuntaba el psicólogo infantil y juvenil Abel Domínguez Llort en SModa, "a día de hoy ninguna asociación seria de psicólogos ni psicoterapeutas se ha pronunciado esa línea". Algo que reafirma la psicóloga Silvia Álava: "No conozco ningún estudio científico que diga que esto es malo". En cambio, sí se ha demostrado, añadía Álava, que "la ausencia de cariño físico tiene un efecto negativo en los menores".

El beso en la boca es malo si se lo parece al niño

"Un beso es un beso y debe considerarse una muestra de afecto", apoya César de la Hoz, psicopedagogo y mediador escolar, quien señala que no debe perderse de vista que lo que para unos puede resultar raro, en otras culturas y familias es perfectamente normal: "Muchas veces lo que hacemos está condicionado por lo que hemos vivido nosotros, por nuestra experiencia en casa, sobre todo las muestras de cariño con niños, o lo que vemos en nuestra cultura".

Así, una de las encuestadas en el estudio —que también revela que País Vasco es la comunidad autónoma donde más extendida está esta muestra de afecto en el ámbito familiar (con más del 75% de los entrevistados)— afirmaba que si bien no besaba en los labios a sus hijos, "de pequeña lo hacía con mi madre y nunca me pareció mal".

¿Cuándo puede ser algo malo? "Lo primero que hay que observar es cómo lo ve el propio niño", señala De la Hoz. Como mediador escolar, una de sus funciones es detectar posibles situaciones anormales o de abuso en los niños: "Debemos mirarlo desde el punto de vista de la cultura ajena y no desde la propia, y analizar si ese gesto —en este caso, un beso en los labios— es algo normal en esa familia o en su cultura", explica."Cada vez vemos más diversidad en las escuelas y las diferencias culturales se deben tener muy en cuenta: hay sociedades en las que se dan tres besos, otras solo uno, nosotros nos damos dos en la mejilla...". Un beso, en sí mismo, no tienen ningún significado, "somos nosotros quienes que se lo damos", añade Domínguez Llort.

Y, ¿en qué momento pasa de ser un gesto de afecto a uno con connotaciones sexuales? Comienza a tener significado propio, matiza De la Hoz, "cuando con él quieres expresar algo más, como cuando se da con la intención de seducir; entendemos que eso es algo entre adultos o, incluso entre niños, que no está relacionado con la muestra de cariño de un padre". Los niños comienzan a tener conductas sexuales, y por tanto pueden empezar a sentirse más incómodos con este tipo de besos, "en la preadolescencia, en quinto o sexto de primaria, o hasta en cuarto, que es cuando ya empiezan a jugar".

Es raro que los niños hagan lo mismo con personas ajenas a la familia

¿Podrían replicar los niños la conducta fuera de casa? Llort asegura que no es habitual: "Los niños son inteligentes y, si no lo ven en el colegio lo más seguro es que no lo hagan aunque lo vean en casa. Pero el beso, en sí mismo, es inocente, no tiene significado y de hecho en otras culturas el significado es distinto y hay besos en la nariz o ningún contacto físico, bajo ningún concepto", reitera.

"No conozco evidencias de que los besos de los padres puedan a posteriori confundir a los hijos en sus relaciones con otras personas", señalaba en De mamas y de papas la psicóloga Cristina Castaño. "Se les puede explicar, diferenciando las muestras de afecto que se tienen con los padres, otras figuras de referencia o familiares, los iguales y otros adultos".

Puede contagiar las caries con solo soplar la comida

Otra de las grandesde dudas que asaltan no solo a los detractores, sino también a quienes tienen estas muestras de afecto con sus hijos, según la encuesta, es que pueda ser una práctica "poco higiénica".

Un beso de 10 segundos puede suponer el intercambio de hasta 80 millones de bacterias, pero aquí estamos hablando de un pico en los labios. Aún así, la odontopediatra Irene Iglesias señalaba en De mamas y de papas algunas de las precauciones que se podían tener en cuenta: las caries se pueden transmitir con solo soplar la comida de nuestros hijos a través de la bacteria Streptococcus mutans, pero esta transmisión suele suceder "si la madre tiene caries activas durante el embarazo y hasta los dos primeros años de vida del bebé".

Por lo demás, por favor, use el sentido común: si tiene usted un herpes, padece hepatitis o tiene algún tipo de enfermedad que se pueda transmitir por el aliento o la saliva, el principio de prudencia le debería instar a no besar a sus hijos durante el tiempo que dure la afección.

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