Razones
Las pensiones no son una subvención ni una ayuda, sino un derecho consolidado


Las razones que justifican la indignación de los y las pensionistas rebasan la extensión de esta columna. Porque las pensiones no son una subvención ni una ayuda, sino un derecho consolidado. Porque el dinero que perciben no es del Estado, sino suyo, una inversión sostenida con esfuerzo a lo largo de su vida laboral. Porque han apretado los dientes para aguantar la crisis hasta que un Gobierno que alardea de crecimiento económico les ha ofrecido una subida humillante de puro ridícula. Porque la hucha de las pensiones no se ha vaciado sola mientras los gobernantes que padecemos rescataban primero a la banca, después a las autopistas, mañana vete a saber. Porque su lucha atraviesa de forma implacable y transversal a todos los sectores de la población de este país. Porque el presunto colapso del sistema público de pensiones tiene que ver con las tasas de natalidad, con la discriminación laboral que sufren las españolas en edad fértil, con la gestión de los fondos públicos, con aquella pletórica España del pelotazo donde se prejubilaba a porrillo a personas que querían seguir trabajando, con los agujeros negros de la corrupción, con la pésima calidad de los empleos de nueva creación, con los contratos indecentes que impiden que los nuevos trabajadores, las nuevas trabajadoras obligadas a desempeñar tareas que están muy por debajo de su formación, puedan contribuir de forma efectiva a su mantenimiento, con el sistemático desprecio con el que se aplican las ayudas a la dependencia, con el desmantelamiento de la Sanidad pública, con la imposición del copago farmacéutico universal, con la ínfima rentabilidad de los planes de pensiones privados… Ya ven, me he quedado sin espacio y todavía se me ocurren algunas más.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma

Archivado En
Últimas noticias
La última apuesta de Petro: salario mínimo histórico, reforma laboral en marcha y ley de financiamiento por decreto
La presidenta Sheinbaum afronta la tragedia del Tren Interoceánico como remate de un año “complicado”
El descarrilamiento del Tren Interoceánico alimenta las críticas de la oposición y señalamientos contra el proyecto
Detenido un implicado en el homicidio de Carlos Manzo que participó en el chat donde se planeó
Lo más visto
- La Audiencia Nacional avala la decisión de Robles de retirar el nombre de Franco a una bandera de la Legión
- Trump anuncia la destrucción de una instalación de producción de drogas en Venezuela
- Rusia amenaza con romper las negociaciones tras acusar a Ucrania de atacar una residencia de Putin
- Alain Aspect, Nobel de Física: “Einstein era tan inteligente que habría tenido que reconocer el entrelazamiento cuántico”
- La larga sombra del hijo único: China paga con una crisis demográfica su mayor experimento social




























































