La pública reconciliación entre Bertín Osborne y Arévalo

Una llamada supuestamente inesperada ha puesto fin este miércoles al distanciamiento entre Bertín Osborne y Paco Arévalo, compañeros desde hace más de dos décadas y pareja sobre el escenario en los últimos seis años, cuya amistad se había deteriorado tras una imagen de una comida a la que asistieron el rey emérito Juan Carlos  y la infanta Elena que el humorista compartió en sus redes sociales el pasado mes de julio. Osborne se enfadó por la difusión al considerar que se había vulnerado la intimidad de la cita.

El  miércoles, el presentador de Mi casa es la tuya estaba participando en el juego que los invitados a su programa –los actores de Perfectos desconocidos– realizan en la película de Álex de la Iglesia, que consiste en dejar el móvil sobre la mesa y hacer público el contenido de todos los mensajes y llamadas entrantes. En ese momento Arévalo llama al dispositivo de Bertín. “Estoy en Madrid y me encantaría ir a verte y darte un abrazo”, dice el cómico. “Pues venga, vente a casa”, responde el presentador, que tras colgar la comunicación confiesa que no se ven desde la polémica foto porque a él no le sentó bien que hiciera público un momento personal. Poco después –y con una cámara grabando desde el interior del coche de Arévalo– el humorista se presenta con un gran ramo de flores y ambos se funden en un abrazo haciendo las paces ante las cámaras y con los actores Pepón Nieto, Dafne Fernández, Juana Acosta, Ernesto Alterio y todos los espectadores desde sus casas como testigos.

El presentador y el humorista, amigos desde hace 35 años, habían estado sin hablarse los últimos cinco meses por una imagen que logró tener '712 me gusta' y su único contacto era por mensajes y con monosílabos, según reveló Arévalo el pasado octubre en el programa Deluxe de Telecinco. “A Bertín es al que menos gracia le hizo, porque tenía que haberle pedido permiso a él. Me dijo ‘quita la puta foto esa’, y desde entonces nada más nos hablamos por WhatsApp y solo me contesta sí, no y qué bien”.

Precisamente fueron estas declaraciones de Arévalo sobre su enemistad lo que enfadó aún más al presentador, que decidió no contar con él en su programa, en el que tenía una pequeña intervención al inicio de cada entrevista. Ambos, además, han estado compartiendo escenario en los teatros con un espectáculo que han llevado por toda España durante más de seis años. Estas funciones iban a retomarlas en unos meses y también se quedaron entonces en el aire. Sentados ahora en el sofá del salón de la casa del también cantante, y en actitud relajada tras una reconciliación en prime time, quizás todo vuelva a la normalidad entre los amigos.