Madrid es la musa

SOLO SE VISLUMBRA algún viandante, casi fuera de contexto, en uno de los lienzos. Lo que se percibe siempre e indefectiblemente es Madrid: Madrid narrado desde sus calles, Madrid vivido en sus edificios, Madrid oteado desde los cielos. En su vacuidad, los esqueletos de hormigón y ladrillo que pueblan las pinturas se hacen carne —y a veces, sueño— en la mirada del espectador. Con la colectiva Madrid pintoresco, que incluye obras de algunos de los grandes nombres del realismo contemporáneo —desde Antonio López hasta la recién fallecida Isabel Quintanilla—, la galería Leandro Navarro rinde así homenaje a su ciudad y, de ella, a varias generaciones de artistas figurativos cuyos trabajos cotizan cada vez más al alza.