El bulo independentista sobre la muerte de un juez de la Audiencia Nacional
Javier Martínez Lázaro murió de cáncer y no en extrañas circunstancias, no llevaba el 'caso Gürtel' y no fue propuesto por el PSOE, tal y como asegura el tuit de un arquitecto catalán
No hay ámbito de la actualidad impermeable al lanzamiento, difusión y propagación viral de bulos. Uno de las patrañas que más éxito ha tenido en los últimos días ha tenido que ver con un hecho luctuoso. Un tuitero catalán, Xavier Olivella, que se presenta a sí mismo en la red social como arquitecto, fundador de Arquitectos por Cataluña y patrón fundador de la Fundació Catalunya Estat, publicó —y mantiene publicado— un tuit en el que se lee “Hoy ha muerto el juez de la Audiencia Nacional Juan Martínez Lázaro en circunstancias extrañas; llevaba el caso Gürtel a propuesta del PSOE”.
Resulta difícil encontrar un mayor cúmulo de errores y falsedades en tan poco espacio. Vayamos del menor al mayor. El primero, la identidad del fallecido: el magistrado se llamaba Javier —no Juan— Martínez Lázaro. Este error puede atribuirse perfectamente a un descuido provocado por las prisas.
El resto de afirmaciones que Olivella sostenía en su tuit, ya borrado, entran en un ánimo deliberado de confundir y alimentar una teoría de la conspiración. Dice que Martínez Lázaro “llevaba el caso Gürtel”, la mayor trama de corrupción de cuantas afectan al Partido Popular. Este magistrado pertenecía a la Sección Primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional. Este tribunal nunca ha visto ni enjuiciado ni resuelto recursos sobre el caso Gürtel ni sus distintas piezas separadas. Nunca.
También afirma el arquitecto independentista —ojalá sus planos tengan más rigor que sus tuits— que Martínez Lázaro, magistrado progresista, fue nombrado “a propuesta del PSOE”. Los jueces de la Audiencia Nacional, generalmente magistrados de carrera por oposición, acceden a la plaza por puro escalafón. En España, como en cualquier democracia avanzada, los jueces y magistrados no son nombrados por los partidos políticos. Cuestión distinta es que Martínez Lázaro fuera, entre 2001 y 2008, vocal del Consejo General del Poder Judicial, el órgano de gobierno de los jueces, por el Senado y a propuesta de la asociación Jueces para la Democracia, de carácter progresista.
Sin embargo, lo que cierra el círculo de la manipulación de Olivella es la expresión “extrañas circunstancias” aplicada a la muerte del magistrado. Martínez Lázaro falleció a los 63 años como consecuencia de un cáncer, enfermedad que es la primera causa de muerte en varones en España, según la Sociedad Española de Oncología Médica. Al hablar de “extrañas circunstancias” —y no retirar su tuit después de ser advertido de cuál fue la verdadera causa del fallecimiento del magistrado— el arquitecto Olivella entronca con una teoría conspirativa sobre la muerte en los últimos años de investigadores y personas del entorno del PP afectadas por los escándalos de corrupción, como el juez Antonio Pedreira, fallecido a los 66 años tras casi dos años y medio hospitalizado; la exalcaldesa de Valencia Rita Barberá, muerta por causas naturales el pasado noviembre, o el expresidente de Caja Madrid, Miguel Blesa, que se suicidó en julio.
Las causas de corrupción más importantes de los últimos años acumulan cientos de imputados, muchos de ellos de avanzada edad en el momento de iniciarse, y se prolongan durante lustros. Los fallecimientos en estas causas no son seguramente más frecuentes que en la población general. Sin embargo, donde esté una buena explicación de fuerzas ocultas que además sirve para lanzar sospechas sobre el Estado enemigo que se quite el razonamiento. La prueba es que el tuit de Olivella acumula 5.300 retuits, y los que le desmienten, apenas la décima parte.
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