_
_
_
_
Editorial
Es responsabilidad del director, y expresa la opinión del diario sobre asuntos de actualidad nacional o internacional

Batería monetaria ‘anti-Brexit’

El Banco de Inglaterra hace bien en prevenir cualquier riesgo de recesión

Mark Carney, gobernador del Banco de Inglaterra
Mark Carney, gobernador del Banco de InglaterraEFE

El Banco de Inglaterra ha decidido actuar con firmeza para mitigar los daños económicos del Brexit. Las tres baterías monetarias principales anunciadas consisten en bajar los tipos en el área de la libra desde el 0,50% al 0,25% con expectativas de situarlos en cero en caso de que sea necesario; disponer de 170.000 millones de libras (200.000 millones de euros) para comprar bonos del tesoro británico y poner a disposición de la banca hasta 100.000 millones de libras a tipos prácticamente idénticos a los oficiales para que financien el mercado. Casi todos los estímulos económicos que se pueden comprar con la política monetaria están sobre la mesa en Londres.

Editoriales anteriores

El Banco de Inglaterra hace bien en prevenir con instrumentos monetarios cualquier riesgo o sombra de recesión que se cierna sobre Reino Unido después de la decisión política de abandonar la Unión. El gobernador del Banco de Inglaterra, Mark Carney, despejó las amenazas de recesión cuando anunció la cadena de decisiones, pero lo cierto es que si se evita la recesión será precisamente porque se dota a los mercados de la liquidez necesaria y los agentes económicos toman nota de que las autoridades no aceptarán un estancamiento o desaceleración por negligencia en el diagnóstico. Así que Carney lo que en realidad está haciendo es trabajar para que se cumpla su profecía.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Lo que debe quedar claro es que si bien las medidas monetarias beneficiarán a la dinámica comercial e industrial, el Brexit causará daños al PIB británico. Se trata de minimizarlos. El crecimiento se resentirá y ya empiezan a notarse las consecuencias de la disminución de los flujos comerciales y de capitales. Tampoco hay que olvidar que la política monetaria tiene sus límites; no hay más que comprobar el escuálido crecimiento de la zona euro y las dificultades para atajar el riesgo deflacionista para darse cuenta de ello. Carney ha cumplido; ahora se espera a la nueva Premier.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_