"El tejado de mi casa está hecho con pañales usados"
Se calcula que, si tuviéramos una planta de reciclaje, recuperaríamos 135.000 toneladas de estas prendas de bebé
Una de las empresas expertas en el campo del reciclaje, Ecoembes, señala que en 2014 los españoles reciclamos casi 1,3 millones de toneladas de papel, cartón y envases ligeros (los que desechamos en el contenedor amarillo). Tal y como indica la propia entidad, esta cifra supone haber ahorrado al medioambiente 1,2 millones de toneladas de CO2, lo que equivale según sus cálculos a retirar de la circulación el 25% de los coches de Madrid.
De esos envases ligeros, muchos son latas y recipientes de aluminio, pero una gran cantidad son plásticos. Otra cifra facilitada por Cicloplast (organización para el reciclado de los residuos de plástico en España), indica que en 2013 los españoles éramos los segundos en Europa en reciclado de los plásticos del hogar, con 7,9 kilos por habitante, solo por detrás de Alemania con casi 14.
La novedad es: ¿y si le decimos que más allá de aquellos productos de material sintético que usted identifica como reciclables (bolsas, botellas de agua y de productos de limpieza, bandejas y recipientes de alimentación…) existen otros productos hechos con plásticos que también podrían ser reutilizados? Como los pañales desechables. “En España aún no existen plantas de reciclaje de pañales, pero a nivel europeo sí: en Reino Unido y en Italia, por ejemplo”, explica Rosa García, directora de la Fundación para la Prevención de Residuos y el Consumo Responsable.
En España tiramos 900.000 toneladas
La empresa Knowaste recicla en Reino Unido unas 36.000 toneladas de pañales al año y, según sus cálculos, esto reduce en un 70% el impacto medioambiental que pueden producir los absorbentes para bebés. Es verdad que, como apunta Rosa García, es un reciclaje con unos niveles de eficiencia muy bajos, “el 70% del residuo que entra no se puede reciclar; solo se recupera un 15% como celulosa y otro 15% como plástico”, pero si se exponen sobre la mesa los datos sobre la composición de los pañales desechables y su consumo, esos porcentajes podrían dejar una gran huella.
“Un pañal desechable normal está compuesto de celulosa, superabsorbentes y de materiales derivados del petróleo como el polipropileno, el polietileno y el poliuretano”, explica Saida Antràs, brand manager de Green Umbrella (GU), la marca española especializada en productos de higiene íntima ecológicos. “ Y las estimaciones dicen que tardan entre 100 y 500 años en degradarse”, sentencia.
Según el estudio BioBaby, realizado por Valor Brands, un bebé usa una media de entre cuatro y seis pañales al día. Estaríamos hablando de que un solo niño podría utilizar hasta los tres años, unos 6.570 pañales. Si un pañal sucio pesara, simplemente, 150 gramos, el resultado es casi una tonelada de residuos no biodegradables.
Hasta que en España se implanten nuevos avances tecnológicos para reciclar este tipo de productos, las opciones de los padres para colaborar en una mejora del medioambiente son dos: utilizar pañales de tela ya que, como indica Rosa García, “es lo más eficiente a nivel económico, ambiental y de salud. Se reduciría el 99% de los residuos (siempre es mejor reducir que reciclar) y el ahorro económico puede ser de 1.700 euros por niño"; o bien, apostar por los desechables ecológicos como los de GU o los BioBaby by Moltex, porque, como afirma Saida Antràs, de GU: “Solo tardan en degradarse entre tres y seis años, ya que están fabricados con fibras de origen natural e hipoalergénicas, y contienen materiales con aditivos oxo-biodegradables procedentes de recursos naturales renovables que aceleran su descomposición”.
Con la inmensa cantidad de pañales que tiramos se podrían fabricar artículos tan dispares como cascos de bicicleta, tejas sintéticas, material de oficina o papel higiénico.
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