¿Cómo es el hijo perfecto de famoso? Echa un vistazo a estas fotos de Brooklyn Beckham

Hay que rendirse a la evidencia: los Beckham (quién lo iba a decir) son el ejemplo perfecto de que aún es posible generar interés sin dejarse llevar por la vulgaridad. A pesar de unos inicios titubeantes (solo hay que recordar cuando Victoria dijo que España olía a ajo), la pareja destila elegancia, buen gusto y saber estar. Los escándalos no forman parte del ADN de esta familia en la que el conflicto más grave se da cuando alguno de los cuatro hijos de David (41 años) y Victoria (42 años) rompe un jarrón de un balonazo. Esta familia, que se gestó en los medios cuando David era una estrella mundial del fútbol en el Manchester United y Victoria una de las explosivas Spice Girls, ha sabido sobrevivir a la fama.

Nos vamos a centrar en el mayor los vástagos, Brooklyn, 17 años, que demuestra día a día que no hay quien le arrebate el título de "hijo ideal de famoso". Por un lado tenemos a Kiko Rivera y por otro a Brooklyn Beckham. Nada que ver. Para papá David e hijo Brooklyn lo más parecido a discutir es lanzarse piqués sanos a través de las redes sociales en los que se retan y se gastan bromas tan inofensivas como la vida de un Teletubbie.

Estas fotos demuestran que Brooklyn Beckham es el hijo que todos padres desean...

1. Tiene más de seis años y deja que su madre le abrace en público

Brooklyn no concibe un mundo en el que no pueda pregonar sin pudor el amor que siente por su madre. Los Instagrams de madre e hijo están plagados de fotos y vídeos en los que muestran los empalagosos ratos que comparten juntos. Brooklyn Beckham siempre apoya todo lo que Victoria hace y ni siquiera se planteó cambiar de país cuando su madre le felicitó el cumpleaños subiendo una foto a su Instagram (ante sus 11 millones de seguidores) en la que aparecían los dos rodeados de corazones. Cabía una posibilidad de que este alarde de amor no fuera lo suficientemente directo así que Victoria remato la faena con la cita: “Feliz cumpleaños, hijo hermoso. Estamos muy orgullosos de ti y te amamos mucho. ¡No puedo creer que ya cumplas 17!¨. Puro merengue, pero muy tierno.

2. Maestro del encuadre y la iluminación

Hay que reconocer que a Victoria y David les costó un tiempo pasar a ser una pareja refinada. Con la lección bien aprendida, Brookyn no quiere saber nada de filtros de Instagram ni abusa de los ordinarios efectos de Snapchat. El joven, al contrario que sus padres, se ha criado en un entorno privilegiado (no olvidemos que su residencia, el Beckingham Palace, tiene nombre de palacio real) y impregando del buen gusto que a sus padres les llevó años adquirir. A sus 17 años, su pasión por la fotografía ha alcanzado otro nivel –para muestra su Instagram, donde juega con maestría con el blanco y negro, los encuendres y la luz de cada una de sus instantáneas– y ha encargado fotografiado la última campaña de los perfumes Brit de Burberry. “Brooklyn tiene una gran visión para la imagen y su Instagram funciona como una plataforma brillante para él para mostrar su trabajo”, asegura un representate de la firma.

3. Si hay que hacer el ridículo para que tu novia sonría, se hace 

El joven Beckham sabe cómo conquistar a una mujer. La risa siempre ha sido una táctica infalible y Brooklyn, que lleva sangre de gentleman por sus venas, se ha puesto como principal objetivo divertir a su pareja, la actriz estadounidense Chloë Grace Moretz (19 años). Solo llevan unos meses saliendo pero ya existe una colección de fotografías esparcidas por la Red que deja constancia de que incluso un paseo por las calles de Los Ángeles puede ser tan divertido como un monólogo de Dani Rovira.

4. Sus amistades son de fiar

Podría haber elegido a Miley Cyrus, Ariana Grande o Justin Bieber como mejores amigos, pero el joven Beckham selecciona con elevado criterio a sus camaradas. Nadie duda de que una noche chupando donuts –para después dejarlos de nuevo en la bandeja de la tienda– con Ariana Grande queda grabada a fuego en la memoria de cualquier púber. Sin embargo, Brooklyn prefiere ir de fiesta con la pacífica Selena Gomez, cantante de 23 años y la persona con más seguidores en Instagram (mérito que ha logrado sin haber recurrido a ningún tipo de escándalo).

5. No hay que sobornale para que cuide de sus hermanos

Tener a los niños peleando encarnizadamente por el mando del televisor, además de una escena habitual en el más común de los hogares, suele ser el reflejo del mismísimo infierno. Pero esta estampa no se da en Beckingham Palace, mansión de los beckham bautizada así en homenaje al Buckingham Palace de Londres. Brooklyn Beckham adora cuidar a sus hermanos y pasar tiempo con ellos. Hace poco acudió con su hermano Cruz al estreno de Star Wars: El despertar de la fuerza y es fácil verle pasear por las calles de Londres con su hermana Harper (5 años) en brazos.

6. Beckham sustituye a Beckham, y tan felices

El Instagram del primogénito de los Beckham prueba que para él no existe un plan mejor que practicar deporte con su padre. Verles juntos en el gimnasio, jugando al baloncesto o al fútbol es un cuadro habitual que prueba que Brooklyn ha heredado la misma pasión por el deporte que su padre. Hace unas semanas participaron en el partido benéfico que UNICEF organizó en Old Tafford, el estadio del Manchester United (equipo que lanzó al estrellató a David). En el minuto 75 del encuentro, Brooklyn saltó al campo y tomó el relevo de su padre. Ambos vestían la camiseta con el número que David ha llevado durante su etapa profesional, el siete.

7. Come verduras y va al gimnasio por voluntad propia

A juzgar por el estilo de vida que comparte con sus miles de seguidores, Brooklyn parece haber heredado la capacidad de sacrificio de sus progenitores. El joven ha asumido que el éxito no llueve del cielo ni aún siendo hijo de un Sir y una ex Spice Girl. Va al gimnasio con regularidad, juega al futbol, cuida su alimentación y nunca hace ascos a un buen plato de verduras. Ser tan disciplinado le da licencia para ponerse hasta arriba de nachos con queso cuando va al balonces con su padre sin que éstos se queden almacenados a perpetuidad en su abdomen.

8. Asume su papel de primogénito y cuida de la familia cuando David está ausente

Como ya sentenció Corleone en El Padrino: "Un hombre que no pasa tiempo con su familia nunca podrá ser un hombre de verdad". Bajo esta premisa, Brooklyn Beckham ejerce el rol de cabeza de familia siempre que su padre se ausenta. ¿Qué David está ahogado con compromisos en Los Ángeles? Brooklyn se calza el traje y se cuelga del brazo de su madre para acompañarla a la gala Mujer del año Glamour y, además, se encarga de entregale a Victoria el premio de turno.

9. Renuncia a una fiesta por quedarse de 'bromas' con su padre

No es raro que Brooklyn decline planes con sus amigos por pasar una noche en casa con su padre. Si David se queda dormido en el sofá del salón, su hijo aprovecha y le cubre de caramelos para sacarle una foto simpática que no tarda en publicar en Instagram. Sus seguidores son partícipes de cada una de las inocuas gracias que padre e hijo se gastan y los Beckham se convierten por méritos propios en los famosos más humanos y auténticos de todos los que se prodigan por las redes sociales.

10. Sus padres no se despegan ni con disolvente, pero a Brooklyn no le molesta

El exceso de gestos cariñosos entre progenitores suele enervar a cualquier adolescente pero, una vez más, no es este el caso de Brooklyn. Al hijo de los Beckham se le hincha el pecho cada vez que ve cómo sus padres se besan o abrazan en público. El amor que se prodigan David y Victoria es una inspiración para el adolescente, que asegura que admira la relación que sus padres mantienen desde hace 20 años.