_
_
_
_

Los 10 escándalos de Ariana Grande, esa chica con 142 millones de seguidores

Chupa donuts en una tienda (y los deja), dice que odia América, se pelea... A pesar de sus 22 años, la cantante ya exhibe un rosario de trifulcas

Sara Navas
Ariana Grande muestra su pose favorita (los morritos) en una imagen que ha publicado en su Instagram.
Ariana Grande muestra su pose favorita (los morritos) en una imagen que ha publicado en su Instagram.Instagram

Haber sido una estrella infantil obliga a tener que demostrar continuamente que ya no lo eres, y que hace años que nadie tiene que atarte los cordones. Ariana Grande (22 años. Florida, EE.UU) empezó en el mundo del espectáculo cuando aún era una niña. Tenía 16 años cuando protagonizó la serie juvenil de Nickelodeon Victorious. Seis años después se agarra a esos pequeños escándalos en los que se ve envuelta para recordarnos que se ha hecho mayor.

Ahora es cantante y tiene tres discos en el mercado; el último, Dangerous woman, salió el pasado 20 de mayo y ahora mismo es el disco más vendido en el Reino Unido. En su corta trayectoria, Ariana se ha convertido en un imán para las polémicas. Tiene una imagen más recatada que la provocona Miley Cyrus, pero sus salidas de tono son más ruidosas. Un estruendo provocado por sus 142 millones de seguidores, los que tiene sumando sus agitadas redes sociales de Twitter, Facebook e Instagram (en esta última, por ejemplo, supera en tres millones a Justin Bieber). Estas son las principales trifulcas en las que se ha visto envuelta.

1. Cuando se puso a chupar donuts en una tienda y dijo que odiaba América

Un mal día (y una mala idea) lo tiene cualquiera. Pero cuando tienes 142 millones de seguidores tus gamberradas dan la vuelta al mundo. Por unas horas Ariana Grande quiso ser Sid Vicious, versión naíf. Todo ocurrió hace unos meses, cuando la cantante fue con su novio (uno de sus bailarines, Ricky Álvarez) y unos amigos a una tienda de donuts. Allí hicieron una apuesta: a ver quién chupaba más bollos sin que el dependiente se percatara de la cochinada. No, el empleado no les vio, pero no hizo falta que lo hiciera para que las imágenes dieran la vuelta al mundo. Los jóvenes no contaron con la presencia de una cámara de seguridad, que registró la escatológica escena. Ariana remató el estropicio afirmando a sus amigos: "Odio América".

Esta declaración escoció en un país tan patriota como el americano. El asunto se agigantó tanto que los medios estadounidenses lo titularon como el donutgate. La cantante tuvo que estrujarse el cerebro para ver cómo defendía la aversión a su país, y algo sí consiguió argumentar: “Estoy muy orgullosa de ser americana y amo a mi país. Lo que dije sucedió en un contexto privado con amigos y ha sido sacado de contexto. Pido perdón por mi elección inapropiada de palabras y por no haber sido más discreta, pero me enfada la ligereza con la que en América comemos y consumimos productos sin pensar dos veces las consecuencias que tendrán en nuestra salud y en la sociedad”. Y así dio el conflicto por cerrado.

Ariana despliega todo el catálogo de 'morritos' que es capaz de hacer frente al objetivo de una cámara.
Ariana despliega todo el catálogo de 'morritos' que es capaz de hacer frente al objetivo de una cámara.

2. Cuando PornHub dijo que Ariana no sabía chuparla

Si Ariana hubiera sabido antes la que iba a armar por dar un par de lametones a un donut lo hubiera hecho mucho antes. Ni PornHub, una de las páginas web de contenido pornográfico más importantes, pudo resistirse a sacar punta al desliz que tuvo la cantante y a través de su cuenta de Twitter puso en duda las habilidades sexuales de la cantante: “Si como lamiste esos donuts es indicativo de como la chupas, no hay duda de por qué Big Sean [ex novio de Ariana] te dejó”.

3. Cuando confesó que había visto a tres demonios

La revista Complex fue la afortunada que recogió las declaraciones de Ariana en las que aseguró que había vivido experiencias paranormales con demonios. La cantante contó que una de ellas ocurrió tras visitar un cementerio de Kansas en el que nada más entrar notó la negatividad que había en el ambiente. “Allí hice una fotografía y en ella aparecieron tres caras de demonios. Estuve semanas sin poder dormir. Al cerrar los ojos oía susurros”, aseguró la cantante, que a pesar de estas afirmaciones considera que no está loca y que solo es una chica sencilla de Florida.

4. Cuando puso de los nervios a los seguidores de Justin Bieber

La cantante ha demostrado en muchas ocasiones su afición a generar polémicas, pero algunas le han llegado por defender causas nobles. Como el episodio en el que confesó estar cansada de que los medios se refirieran a la cantante Selena Gomez (24 años, EE.UU) como "la ex de Justin Bieber". A pesar de que las jóvenes han tenido sus rifirrafes, y una competencia no siempre sana, Ariana pidió que dejaran de degradar a Selena a la categoría de "ex de". Un acto que le honra y que le generó innumerables insultos por parte de los más recalcitrantes seguidores de Bieber.

'Ariwaka': delirante mezcla de Ariana y Chewaka. A su lado un jovencísimo Harrison Ford/Han Solo. Es un montaje de la propia Ariana publicado en su Instagram.
'Ariwaka': delirante mezcla de Ariana y Chewaka. A su lado un jovencísimo Harrison Ford/Han Solo. Es un montaje de la propia Ariana publicado en su Instagram.

5. Cuando su atrevido vídeo recibió insultos como "zorra"

Su último vídeo, Dangerous woman, ha levantado ampollas entre el sector más conservador de sus seguidores, que no ha tardado en manifestar su rechazo. "Ariana, con todo el respeto, Dangerous woman me gusta, pero el problema es que en el vídeo pareces una zorra. Siento ser tan maleducado, pero solo digo la verdad". Este fue uno de los muchos ataques que recibió la cantante. A lo que Ariana contestó, tajante: "Con el debido respeto, es hora de que saques la cabeza del culo".

En el vídeo se puede ver a la artista combatiendo el frío con la única ayuda de un ínfimo conjunto de lencería. La joven de 22 años considera que no tiene que pedir ni permiso ni perdón por ello. "Los hombres se quitan la camisa y expresan su sexualidad sobre escenarios, Instagram, vídeos... en cualquier sitio que quieran constantemente. El doble estándar es aburrido y agotador. Las mujeres también pueden amar sus cuerpos", se defendió.

6. Cuando se metió con el feminismo de Bette Midler

La actriz, cómica y cantante Bette Midler (Hawái, 70 años) se despachó a gusto contra la actitud de Ariana en una entrevista que concedió a The Guardian: “Es algo terrible. Siempre es sorprendente ver a alguien como Ariana Grande, con esa tonta vocecita, deslizándose alrededor en un sofá [en vídeos y actuaciones], tan ridícula. No sé quién le está diciendo que lo haga, pero espero que pare pronto”. Ariana replicó como la señora que debería ser hoy Bette Midler, sin perder la compostura y argumentando: “Bette siempre fue una feminista que luchó para que las mujeres fueran capaces de hacer lo que quisieran sin ser juzgadas. No sé dónde se fue esa Bette, pero quiero que la sirena sexi regrese”. De este escándalo Grande salió airosa, y dando una lección de estilo.

7. Cuando YouTube eliminó el vídeo de su actuación con Christina Aguilera

La cantante no se libra de la polémica ni cuando se limita a cantar. En la final del concurso de talentos The Voice (equivalente de La voz en España) realizó un dúo junto Christina Aguilera en el que interpretaron el éxito de Grande, Dangerous woman. El vídeo fue subido a YouTube, pero solo duró unas horas. La plataforma decidió eliminarlo. Hay tres hipótesis sobre esta prohibición: 1) Que lo vetó Christina Aguilera porque desafinó; 2) Que lo vetó Ariana Grande porque desafinó. Y 3) Que lo vetaron las dos artistas y la propia dirección de La Voz, esta última por problemas con el pago de los derechos de autor. Un jaleo, vamos.

8. Cuando se partió de la risa al leer en un 'tuit' que decía que el sonido de un pedo era mejor que escuchar su nuevo disco

Insultar a través de las redes sociales es el nuevo antidepresivo del siglo XXI: no hay nada mejor para huir de los propios demonios. El presentador estadounidense Jimmy Kimmel tuvo la lúcida idea de enfrentar a los famosos a las impertinentes críticas que les envían los seguidores con más mala uva de las redes sociales. Ariana Grande fue una de las valientes que se presentó en el plató del late night. La cantante leyó en voz alta y rodeada de cámaras un tuit que decía: “Preferiría escuchar un pedo vaginal con autotune [un procesador de audio para transformar la voz] en un loop [repetir un sonido en bucle] continuo antes que escuchar el nuevo disco de Ariana Grande”. Y lejos de ofenderse empezó a reírse con cada nueva palabra del mensaje que iba pronunciando.

Frankie Grande, hermano mayor de Ariana, demuestra su agilidad para saltar.
Frankie Grande, hermano mayor de Ariana, demuestra su agilidad para saltar.Instagram

9. Cuando dijo: "Por mi hermano, arranco la cabeza al que sea"

Frankie Grande (33 años), hermano mayor de Ariana y exconcursante del Gran Hermano americano, subió una foto a sus redes sociales que en pocos minutos recibió múltiples mensajes insultándole con comentarios homófobos. Ariana no dudó en defenderle públicamente dejando claro que no permite que nadie se meta con los suyos: “Las críticas me duelen cuando son sobre otra gente. Intento no leer nada sobre mí, pero sí lo hago sobre mi hermano y mis amigos... Ahí es cuando sería capaz de arrancarle la cabeza a alguien. Sobre mí, no me importa, pero habla sobre mi hermano Frankie y ahí es cuando sale el carácter italiano de mis antepasados”, declaró a Acces Hollywood.

10. Cuando le acusan de copiar a Mariah Carey, Rihanna, Britney Spears...

Ariana Grande tiene un chorro de voz potente, y eso es un punto a favor cuando de profesión uno es cantante. O debería serlo. Muchos precisamente le reprochan un exhibicionismo hiperbólico: no hay necesidad de estar siempre gritando, leñe. Esta orgía de gorgoritos es en parte debido a su obsesión por Mariah Carey, otra irredenta del desenfreno vocal. Pero no es la única inspiración/fanatismo/copia que ha facturado Grande. Cuando presentó el vídeo de su canción Into you, volvieron a lloverle las críticas por ser insolentemente parecido al que Rihanna hizo para su tema We found love. Hay más sobre este asunto: en el programa de Jimmy Fallon o en Saturday night live ha protagonizado varios gags imitando a Britney Spears, Whitney Houston o Céline Dion.

Y 'bonus track': cuando exhibe una esquizoide obsesión por poner morritos en cuanto oye el disparador de una cámara

Este último punto no es exactamente un escándalo, pero sí es escandalosa la obsesión de Grande por mostrar sus morros. Si hasta hace poco los de Mick Jagger eran los labios más famosos del pop, hoy han quedado relegados a un segundo puesto gracias a las matemáticas: mientras el cantante de los Stones cuenta con 700.000 fans en Instagram (la red social de la era selfie), Ariana suma 72 millones de fervorosos admiradores. Para la cantante fruncir los labios es como para Sansón lucir una melena indomable: una fuente poderosa de energía que les otorga habilidades sobrehumanas. O eso parece. Si Ariana cambia la mueca de su boca al posar corre el riesgo de perder su rentable encanto, y con él un séquito de púberes fans que estudian con devoción cada píxel de las fotos de Ariana, al igual que el personaje bíblico perdía su fuerza al cortarse la cabellera.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Sara Navas
Redactora de ICON desde 2016, año en que llegó a EL PAÍS. Es licenciada en Comunicación Audiovisual por la Universidad Complutense de Madrid y ha escrito el libro ‘La monarquía al desnudo. Del rey que nació en un retrete al soberano playboy’.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_