Microestafas por SMS

Existen grandes timos y estafas a pequeña escala, pero en ambos casos las cantidades defraudadas pueden llegar a ser millonarias como ha demostrado una banda que operaba en la Comunidad Valenciana que, euro a euro, se ha hecho con un botín que ronda los cinco millones. Aunque algunos ingenuos han donado involuntariamente a la trama hasta 2.000 euros.

El instrumento para cometer este fraude masivo son los SMS Premium, esos mensajes de texto que tienen tarifa extra (habitualmente 1,20 euros más IVA) y que se utilizan, por ejemplo, para el televoto, los sorteos o la solicitud de contenidos. El cebo para que las víctimas picaran eran textos de este tenor: “Ponte en contacto conmigo para una segunda entrevista de trabajo”, “Te estoy buscando en Facebook y no te encuentro”, “Dime si te llegan mis mensajes”. Los incautos que contestaban los SMS lo hacían ignorando que la respuesta llevaba asociada un sobrecoste en la tarifa telefónica.

Al amparo de las tecnologías de la sociedad de la información florecen microestafas como estas. Muchos afectados ni siquiera las denuncian, en parte por la pequeña cuantía del perjuicio económico que suponen. Pero, sumadas las miles de víctimas que suelen ser objeto de este engaño, el beneficio puede alcanzar millones de euros. Esta pereza a la hora de denunciar es, precisamente, la que da oxígeno a organizaciones criminales como la desarticulada esta semana por la Guardia Civil dentro de la Operación Telemensaje, en la que han sido detenidas 11 personas.

Cualquier usuario familiarizado con la tecnología móvil puede percatarse de que tras este tipo de SMS se esconde un timo. Pero los menos diestros pueden caer fácilmente en la trampa. Para evitarlo, los usuarios pueden solicitar a su compañía telefónica que cancele cualquier servicio de tarificación adicional, como son los mensajes Premium. No estaría de más que las autoridades de la Competencia extremen las medidas para perseguir y bloquear los números creados para delinquir e imponer sanciones ejemplares a quienes usan tramposamente los SMS.