Incluso tapada de pies a cabeza, Rihanna es demasiado sexi para Abu Dabi

¿Provocación o truco publicitario? Rihanna vuelve a copar titulares por sus actividades fuera del escenario. Las fotos de su visita a la Gran Mezquita del Jeque Zayed de Abu Dabi el pasado sábado, horas antes de actuar en esa ciudad árabe, han desatado la polémica entre sus seguidores. A pesar de que la cantante acudió cubierta de negro de la cabeza a los pies, las poses insinuantes que colgó de su cuenta en Instagram le han merecido ser tachada de “irrespetuosa”. La estrella de Barbados no llegó a entrar en la aljama, pero los responsables del centro le pidieron que abandonara el recinto.

“Me encanta Rihanna, pero posar de forma tan seductora frente a la mezquita es muy irrespetuoso”, escribe @NNTSHA_NAT, una idea que se repite en muchos otros comentarios.

En las imágenes que firman los fotógrafos de moda Seteven Gomillion y Dennis Leupold, la intérprete de Umbrella aparece vestida con un mono negro y un pañuelo del mismo color que destaca sobre el mármol blanco del templo. Formalmente, su atuendo cumple con el requisito de la mezquita de que las mujeres visitantes se cubran la cabeza. Pero Rihanna, siendo Rihanna, no podía pasar desapercibida. Además de llevar labios y uñas pintados de un rojo intenso, también lucía un enorme colgante dorado.

La controversia no se ha limitado a los seguidores de la cantante. Los dos expertos culturales más conocidos de Emiratos Árabes Unidos también discrepan sobre el asunto. “En mi opinión, nada en las fotos es ofensivo”, ha asegurado al tabloide 7Days Nasif Kayed, del Centro Jeque Mohamed para el Entendimiento en Dubái. Ali al Saloom, sin embargo, las considera “inapropiadas” y opina que “una mezquita no es un lugar para grabar moda”.

“No entiendo por qué es irrespetuoso que Rihanna pose en las proximidades de una mezquita en Abu Dabi. En todo caso muestra respeto al adoptar el hiyab”, discrepa @mila_iggy. Otro tuitero, que se identifica como @NAUF_z, responde que “Rihanna puede parecer estupenda y eso, pero se tapa la cabeza por moda no por respeto a la mezquita”.

De hecho, no fue su atavío lo que causó la objeción de los responsables de la Gran Mezquita, la mayor del país y que Abu Dabi ha convertido en atracción turística. El centro, que organiza visitas diarias para los no musulmanes, emitió un comunicado en el que explica que la artista no disponía de permiso para realizar la sesión fotográfica.

“Se fue sin entrar en la mezquita, después de que se le pidiera que lo abandonara el lugar debido a que había tomado fotos que no cumplen las condiciones y normas de la dirección del Centro para que se respete su santidad”, explica la nota, que se refiere a “un incidente relacionado con una cantante”, sin mencionar su nombre.

La afición de Rihanna por difundir sus actividades en las redes sociales está resultando de lo más movida durante su actual gira, Diamonds World Tour. El pasado 22 de septiembre colgó unas imágenes en las que aparecía con unos monos que resultaron ser una especie protegida, lo que motivó la detención de dos hombres en Tailandia. Hace una semana en ese mismo país, sus tuits sobre un espectáculo sexual con un pájaro y dos tortugas, llevaron al cierre del bar y la detención de sus propietarios.