Festival de Cine en San Sebastián
En el importante Festival de Cine de San Sebastián, se ha colado estos días un supuesto documental dedicado a la figura del etarra Asier Aranguren (siete años en la cárcel por informante de la mafia terrorista), y a su amistad con el director de esta cinta. En su relato se da voz a este terrorista que habla de que “el conflicto vasco es una guerra” y se niega a revelar si alguna vez ha cometido un asesinato. Y con expresiones que en algunas declaraciones concretas podrían acercarse a la apología del terrorismo, este producto, aparentemente cinematográfico, se ha proyectado en el festival de la hermosa ciudad gobernada por los proetarras de Bildu. Contrasta el apoyo a este documental en este certamen con la nula colaboración y cero apoyo que se han dado a los vitales trabajos del director de cine vasco Iñaki Arteta, autor de imprescindibles documentales como Trece entre mil, El infierno vasco”, o el aún pendiente de estrenar 1980 (que se han realizado con aportaciones de ciudadanos por crowdfunding).En ellos, Iñaki Arteta, sin equidistancia, sin eufemismos y sin dobles morales, muestra a las víctimas del terrorismo ocasionado por los etarras: niños, mujeres y hombres de toda condición asesinados, heridos o perseguidos por esa misma mafia terrorista a la que apoya el tal Asier Aranguren, del que han emitido el actual documental.
Algunos intentan seudolegitimar la violencia etarra. El problema doble es que, a veces, encuentran cauces de propaganda que toleran lo intolerable.— David García.