_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Cerrar y coser

Vivimos a la espera de la resolución del caso Bárcenas como del resultado de unos análisis clínicos

Juan José Millás

El caso Bárcenas, que ya vamos viendo que se trata del “caso PP”, ha introducido en nuestras vidas un doloroso grado de interinidad. Vivimos a la espera de su resolución como del resultado de unos análisis clínicos. Todo lo demás, mientras no se resuelva, parece transitorio. Pero resolverlo implica hurgar en una herida del tamaño de un estadio de fútbol. Una herida infectada de la que sale un torrente de pus en el que Rajoy chapotea con desesperación muda. Por si fuera poco, tenemos experiencia de cirugías cerradas en falso. El caso Naseiro,que fue el prólogo del que ahora nos ocupa, se clausuró con trampas jurídicas que se han intentado reutilizar estos días. Habría bastado con que se declararan nulas las grabaciones de Luis Peñas, el exconcejal del PP en Majadahonda, para legalizar la trama Gürtel, bendecir a Bárcenas, y refrendar los sobresueldos de gente como Arenas, al que hemos pagado comilonas de 2.000 euros. El menú del día.

Si lograron cargarse a Garzón porque se le ocurrió abrir el sumario, cualquier cosa es posible. Carlos Fabra, expresidente de la Diputación de Castellón e impulsor de ese aeropuerto inútil que nos ha costado también un ojo de la cara, lleva 10 años haciendo regates a la justicia. Observando, en fin, las dificultades con las que avanza el proceso, la facilidad con la que un expediente se puede extraviar, la falta de voluntad de nuestros representantes por conocer lo ocurrido, pero pasmados, sobre todo, por el tamaño y el aspecto de la herida, así como por las ganas de cerrar y coser de algunos sin haberla limpiado, se queda uno sin aliento. ¿Qué nueva artimaña se estará fraguando para anular el proceso? ¿Qué le estarán ofreciendo o con qué estarán presionando a Bárcenas para que no hable? ¿Hasta qué punto la oposición está tan interesada como la ciudadanía en llegar hasta el final?

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Juan José Millás
Escritor y periodista (1946). Su obra, traducida a 25 idiomas, ha obtenido, entre otros, el Premio Nadal, el Planeta y el Nacional de Narrativa, además del Miguel Delibes de periodismo. Destacan sus novelas El desorden de tu nombre, El mundo o Que nadie duerma. Colaborador de diversos medios escritos y del programa A vivir, de la Cadena SER.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_