Las primarias socialistas en Barcelona se celebrarán el 19 de febrero
Montilla emplaza a Hereu y a Tura a enfrentarse a CiU
Las elecciones primarias que decidirán quién será el candidato socialista a la alcaldía de Barcelona, si el alcalde Jordi Hereu o la ex consejera de Justicia Montserrat Tura, se celebrarán el sábado 19 de febrero. Lo ha decidido esta mañana la Comisión Electoral del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC), que ha presidido el primer secretario, José Montilla, y agrupa a la cúpula del partido y representantes de todas las agrupaciones territoriales.
Montilla se ha reunido esta misma mañana con el alcalde Hereu en el primer encuentro que ambos han mantenido desde que ayer la ex consejera hizo público que se medirá con él en primarias. Montilla ha pedido a Hereu y a Tura que desarrolle "un debate constructivo entre modelos y propuestas que deben servir para contraponerlas de forma clara a la Barcelona que proponen Xavier Trias y Convergència i Unió". Montilla se ha comprometido, en nombre de la dirección, a mantenerse neutral en el proceso. A la salida de la reunión, el alcalde se ha mostrado partidario de que Tura pueda convertirse en candidata a alcaldable sin necesidad de recabar avales.
Esta tarde se reunirá la Comisión Ejecutiva de la Federación de Barcelona, una reunión de notable trascendencia, porque decidirá si mantiene la exigencia de que los aspirantes que compitan con Hereu necesiten el aval de un 40% de la militancia o rebaja esa exigencia. A las elecciones están convocados los más de 3.600 militantes y 8.000 simpatizantes de la Federación de Barcelona.
Hereu empezó ayer mismo su campaña, en la que dijo que tendrá que compaginar la alcaldía con la labor de convencer a los militantes de que él es el mejor alcalde. Alabó su gestión, declaró su amor por la capital y proclamó que quiere seguir "sirviendo con pasión, ambición, ideas y proyectos" a los barceloneses.
Montserrat Tura expuso sus argumentos en una multitudinaria rueda de prensa en la que comenzó aclarando que no se presenta para ganar las primarias sino para ser la alcaldesa de Barcelona. Explicó que el deseo de fortalecer la democracia le ha llevado a presentarse e insistió en que no es la candidata del aparato. Tura no quiso desvelar ni de quién se rodeará ni cuál es el modelo de ciudad que defenderá. Por Hereu mostró un "gran respeto" y evitó hacer reproches a su gestión, aunque consideró que Barcelona ha perdido "aquella pizca de entusiasmo que tuvo la ciudad de la que todos estábamos enamorados". La aspirante se dirigió a quienes en los últimos tiempos se han sentido "desorientados" tanto para "recuperar la mejor Barcelona" como para gestionar "la áspera, compleja y rica realidad de cada día".
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