La deuda pública aumenta en 800 millones al día durante junio hasta alcanzar el récord de 1,62 billones

Tras registrar dos meses de descensos, la deuda pública volvió a engordar con fuerza en junio, según los datos de avance mensual publicados este lunes por el Banco de España. El volumen creció en 25.000 millones de euros con respecto al mes anterior, a un ritmo de unos 830 millones al día, hasta situar el pasivo del conjunto de las Administraciones en un récord de 1,62 billones de euros, un 3,6% superior a la cifra del mismo periodo del ejercicio pasado. Este repunte mensual, muy marcado, tiene que ver con el calendario de emisiones de deuda del Tesoro Público, que suele ser más dinámico a principios de año y se va reduciendo en la segunda mitad del ejercicio, según explican en el Ministerio de Economía.

De hecho, en junio se llevó a cabo una emisión sindicada de bonos por 10.000 millones de euros. En la estadística del supervisor bancario también destacan otros repuntes mensuales que se corresponden a otras emisiones del Tesoro. En febrero, por ejemplo, la deuda creció en casi 20.000 millones de un plumazo, y en unos 27.000 en junio del año pasado.

El programa de financiación del Tesoro estima unas emisiones netas, descontando los vencimientos, de 55.000 millones de euros para este año —inferiores en unos 15.000 millones a las del ejercicio anterior—, en un contexto en el que los tipos de interés siguen elevados pese al reciente recorte dictado por el BCE. De todas formas, es habitual que las emisiones reales se queden finalmente por debajo de lo estimado. Por ejemplo, el programa de financiación del Tesoro para 2023 se cerró con una emisión neta de 65.126 millones de euros, por debajo de los 70.000 previstos.

Es así que, con los datos de avance disponibles del supervisor bancario, la ratio de deuda alcanzó en el primer semestre el 108,2% del PIB, un porcentaje inferior al trimestre anterior (108,9%), pero ligeramente superior al dato de cierre de 2023 (107,7%). Sin embargo, está muy lejos de los máximos alcanzados durante la pandemia.

Entonces, el pasivo de las Administraciones públicas en cifras absolutas se ha ido inflando hasta batir, casi cada trimestre, nuevos récords. El mejor indicador para analizar la sostenibilidad financiera de un país es la ratio de deuda: esta empezó a descender desde el máximo del 120% del PIB, gracias al repunte de la economía tras la tormenta causada por el virus.

Desde el Ministerio de Economía afirman que la ratio irá disminuyendo a lo largo de la segunda mitad del ejercicio, debido al avanzado ritmo de ejecución del programa de financiación, que implica un menor volumen de emisiones para lo que resta de año. Las previsiones oficiales del Gobierno sitúan la tasa de pasivo en el 105,1% para este año. Las estimaciones son del 103,6% del PIB para 2025, del 101,8% en 2026 y por debajo de la emblemática barrera del 100% (99,7%) en 2027.

“Es otro de los grandes objetivos de legislatura: en el año 2027 haber recuperado el espacio fiscal que consumimos como consecuencia de la respuesta al covid”, dijo el ministro de Economía y ex secretario general del Tesoro, Carlos Cuerpo, al presentar los pronósticos oficiales el pasado julio. La economía, por su parte, repuntará un 2,4% este año y un 2,2% el próximo —muy por encima de la media de la zona euro— si se cumplen los cálculos del Ejecutivo.

De momento, las principales casas de análisis y organismos nacionales e internacionales respaldan las previsiones del Gobierno. Bruselas estima que la economía española avanzará un 2,1% este año y la deuda bajará a los niveles previstos por Economía. En otoño, el Ejecutivo deberá presentar su plan de ajuste según los parámetros que marcan las nuevas reglas europeas, que ponen el foco en el control del gasto para que la deuda se encamine hacia una trayectoria descendiente. En función de los términos en los que se cierre el acuerdo, el ajuste podría oscilar entre los 6.000 y los 9.000 millones al año.

Pese al repunte de la deuda en su conjunto, no todas las Administraciones han registrado incrementos en junio de la misma intensidad. El saldo de la deuda del Estado —el subsector con los números rojos más abultados— creció un 5,1% con respecto al año previo, hasta los 1,4 billones de euros, con un incremento interanual del 5,1%. En el caso de las comunidades autónomas, el aumento ha sido del 3,2%, hasta los 338.000 millones. La Seguridad Social experimentó el mayor repunte, del 9,4%, por un pasivo total de 116.000 millones de euros. Las corporaciones locales, que reúnen a Ayuntamientos, diputaciones y cabildos, entre otros, redujeron, en cambio, sus obligaciones financieras en un 0,7% (24.000 millones) frente al saldo que registraban en junio de 2023.

Sigue toda la información de Economía y Negocios en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal