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Ford Almussafes deja de hacer la Transit Connect mientras espera noticias del nuevo coche que salve el empleo en la fábrica

La planta valenciana ha dicho adiós este lunes a la furgoneta que comenzó a fabricar en 2013. UGT negociará una ampliación de dos meses para el ERTE actual

Línea de producción de la furgoneta Transit Connect en Ford Almussafes (Valencia).
Línea de producción de la furgoneta Transit Connect en Ford Almussafes (Valencia).
Manu Granda

La planta de Ford Almussafes en Valencia ha dicho adiós este lunes a su furgoneta Transit Connect. La fábrica, que ensamblaba este modelo desde hacía más de diez años (comenzó a hacerlo en 2013, lo que fue una buena noticia en un momento en el que escaseaban las inversiones industriales en España) abandona la producción del vehículo comercial que en 2023 supuso el 30% de su actividad con 63.139 unidades. En un principio se esperaba que su ensamblaje terminase el miércoles 17 de abril, pero su producción se incrementó a 350 unidades diarias por la reducción en el ritmo de fabricación del Kuga, el otro modelo de la planta, lo que hizo que su adiós llegase dos días antes, explica Carlos Faubel (UGT), presidente del comité de empresa de la fábrica.

De esta forma, la factoría se queda exclusivamente con la producción del Ford Kuga, un SUV de éxito para la firma del óvalo en Europa, del que el año pasado la planta valenciana ensambló 142.474 unidades. Si bien es una buena cifra para un único modelo, de por sí solo es insuficiente para mantener el empleo en Almussafes que entre 2018 y 2023 ha perdido el 42% de su producción. La factoría estuvo los últimos meses preparando las líneas de producción para hacer la nueva versión del Kuga, que cuenta con motorizaciones de combustión e híbridas enchufables.

La Ford Transit Connect, en una imagen cedida por la marca.
La Ford Transit Connect, en una imagen cedida por la marca.

UGT, sindicato mayoritario en la planta, se reunirá este martes con la dirección de la fábrica para hablar de los planes de producción del nuevo Kuga, así como para tratar la ampliación del ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo) vigente hasta este viernes, que afecta a un máximo 700 personas diarias en la zona de producción de vehículos. Además, también afecta al área de mecanizados y a la de motores, cuya actividad ha parado este lunes y también lo hará el próximo viernes, último día del actual ERTE, que fue necesario implantar por la pérdida de modelos constante de los últimos años (la Transit Connect se suma al adiós del Mondeo, el S-Max y el Galaxy).

La organización sindical espera que el nuevo expediente afecte a más trabajadores por día que el actual y se extienda unos dos meses, tiempo que UGT estima suficiente para que Ford dé más detalles sobre el nuevo modelo multienergía que la compañía anunció a fines de marzo para salvar el empleo en la fábrica. “El compromiso del CEO mundial de Ford, Jim Farley, ha sido claro. Almussafes tendrá nuevo vehículo y mantendrá suficiente carga de trabajo”, celebró UGT al conocerse la adjudicación del modelo.

Si bien fue una gran noticia, su llegada a las líneas de ensamblaje de la fábrica valenciana no se espera hasta 2026, lo que deja a Almussafes produciendo solamente el Kuga durante algo más de año y medio. Cabe señalar que la planta ya sufrió en 2023 un ERE que recortó la plantilla en más de 1.100 personas.

Más allá del nuevo ERTE que se extenderá previsiblemente hasta mitad de este año, UGT aseguró que, ante un escenario de baja actividad hasta 2026, “será del todo necesario implicar a las diferentes administraciones y gobiernos con el fin de activar el mecanismo red”, un tipo de ERTE incluido en la última reforma laboral, que permite reducir la jornada y suspender el empleo ante crisis cíclicas y sectoriales.

El coche anunciado por Farley en marzo surgió como un salvavidas después de que la fábrica valenciana viera esfumarse las promesas de la compañía de recibir un vehículo eléctrico que le asegurase suficiente carga de trabajo. En noviembre, UGT informó que Ford había congelado sus planes de electrificación para su producción europea, lo que afectaba de lleno a Almussafes, en un contexto de ventas de vehículos eléctricos por debajo del crecimiento que vaticinaba el sector hace unos años. Tan es así, que Tesla redujo sus ventas un 8,5% en el primer trimestre de este año y planea despedir al 10% de su plantilla; Renault y Volkswagen paralizaron los planes da salida a Bolsa de sus divisiones de coches eléctricos y baterías, respectivamente; y Volvo ha informado de una posible reducción de su peso en la marca de coches eléctricos prémium Polestar.

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Sobre la firma

Manu Granda
En la actualidad cubre la industria del automóvil en la sección de Empresas. Previamente pasó por el área de Economía, donde escribió de laboral. Como 'freelance', cubrió la temporada de incendios del verano 2019-2020 en Australia para EL PAÍS. Es graduado en periodismo por la Universidad Rey Juan Carlos y cursó el Máster de periodismo de EL PAÍS.
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