Las profesiones de alto valor añadido y el sector público impulsan el acelerón del empleo

El mercado laboral presume de fortaleza mes a mes. En junio, pese a la moderación en la mejora de las cifras, España volvió a anotar un récord en el número de trabajadores y un mínimo en 15 años en el de desempleados. Esta evolución positiva viene acompañada de algunos cambios en la estructura productiva, de sectores que ganan más trabajadores que otros e incluso de algunos que pierden efectivos pese a la ganancia general del sistema. Una comparación respecto a junio de 2019, el último año sin sobresaltos antes de la crisis sanitaria, refleja un aumento importante en las plantillas educativas, sanitarias y de la Administración pública, pero también de sectores como la programación, la consultoría y otras actividades relacionadas con la informática, con salarios muy por encima de la media. Estas actividades, junto a otras con retribuciones altas, son las que más crecen en términos relativos. En el otro lado de la balanza destacan las actividades relacionadas con la intermediación laboral, las entidades financieras y las fábricas de vehículos, que juntas se han dejado 46.000 empleos por el camino.

En número, la actividad económica que más crece respecto a junio de 2019 es la educación, que pasa de 1.016.247 trabajadores a 1.172.128. Esta cifra engloba a los profesores de la pública y de la privada, al igual que la estadística de profesionales sanitarios, la segunda que más aumenta: en cuatro años pasa de 1.113.376 a 1.261.907. En ambos sectores son mayoritarios los trabajadores públicos: según los datos del Ministerio de Educación, el 72% de los profesores de educación reglada no universitaria son empleados públicos; y según los datos de la Fundación IDIS la sanidad privada emplea a 269.515 profesionales, así que son minoría respecto a los trabajadores públicos. El tercer apartado de la Clasificación Nacional de Actividades Económicas (CNAE) que más crece es el catalogado como “administración pública y defensa; Seguridad Social obligatoria”. Ha aumentado en 128.120 trabajadores, hasta llegar a los 1.239.947.

En los últimos años, el Gobierno ha lanzado ofertas récord de empleo público, lo que impulsa estos incrementos. Aunque estas actividades crecen de forma sustancial en número de trabajadores, no son las que más aumentan proporcionalmente: la educación sube un 15,3%; la sanidad, un 13,3%; y la Administración pública, un 11,5%. La afiliación media ha crecido un 8% respecto a 2019. Según los datos de la última Encuesta de Población Activa (EPA), el empleo público representaba en el primer trimestre el 17,2% del total, mientras que hace cuatro años era el 16,4%.

En cuarto lugar en ganancia absoluta se encuentra el apartado de programación, consultoría y otras actividades relacionadas con la informática, que pasa de 328.555 afiliados a 453.678. Además, es el sector que más crece en términos relativos, con un 38% desde junio de 2019. Es uno de los sectores con mejores retribuciones: el coste salarial medio que cada trabajador supone para las empresas es de 3.342 euros mensuales, frente a la media de 2.127. El segundo sector que más acelera proporcionalmente son las actividades de las sedes centrales y actividades de consultoría de gestión empresarial, con un incremento del 30,3% y 35.163 empleados más. En este caso, el coste salarial es aún más alto: 3.370 euros brutos al mes.

Las retribuciones por encima de la media son mayoritarias entre las profesiones que más han crecido en estos últimos cuatro años. Entre ellas están la investigación y desarrollo (crece un 26,6% y el coste salarial medio es de 2.807 euros) o los servicios técnicos de arquitectura e ingeniería (19,2% y 2.756 euros). Las únicas profesiones ente las diez que más crecen con sueldos por debajo de la media son las actividades de servicios sociales sin alojamiento (29,9% y 1.238 euros), las actividades postales y de correos (21% y 1.466) y, por solo siete euros, otras actividades profesionales, científicas y técnicas (16,7% y 2.191).

Entre las actividades con más afiliados totales están las ya mencionadas relacionadas con el sector público, pero también otras que no sufren cambios muy reseñables. La que más trabajadores reúne es el comercio al por menor, que con 1.937.442 afiliados crece un 0,7%, frente a la media general del 8%. Tampoco crece especialmente uno de los epígrafes que engloba a la hostelería, el de servicios de comidas y bebidas, con una subida del 3,9% hasta colocarse en 1.447.809 empleados. El otro apartado que conforma el sector hostelero es el de servicios de alojamiento, que crece un 11,35% hasta los 433.270 trabajadores.

El Gobierno presumió el martes pasado, durante la presentación de los datos de afiliación y paro registrado, del incremento en el número de trabajadores en los sectores de alto valor añadido. “Es una constante desde el inicio de la recuperación pospandemia, que lógicamente se ha ido intensificando y consolidando como consecuencia del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia”, dijo el secretario de Estado de Seguridad Social, Borja Suárez. Los fondos europeos, indicó, están generando “reformas estructurales, en concreto en materia de digitalización”, que conducen a los aumentos en la afiliación en sectores relacionados con la informática o con las actividades científicas y técnicas.

“El resultado es verdaderamente excepcional”, agregó Suárez, que también puso en valor el incremento en los sectores educativo y sanitario. El secretario de Estado dijo que estos puestos de trabajo dan “garantías” ante el posible empeoramiento de la economía: “Estamos creando un empleo de mayor calidad y más resistente para hacer frente a crisis futuras”. El secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, también reivindicó la importancia de la reforma laboral: “Gracias a las políticas de esta legislatura tenemos un mercado de trabajo que crea empleo, que cada vez es más desestacionalizado”.

Profesiones que caen

De las categorías del CNAE, la que más empleo pierde respecto a junio de 2019 es la de las actividades relacionadas con el empleo, es decir, agencias de colocación y empresas de trabajo temporal: hay 21.266 trabajadores menos que hace cuatro años, un 9,6% menos. Los bancos, que entre 2016 y 2021 cerraron 9.700 sucursales (el 33,7% del total de entonces), han recortado sus plantillas en 12.914 trabajadores de 2019 a 2023 (un 6%), según los datos de la Seguridad Social. La tercera mayor caída en número de empleados es la de las fábricas de vehículos de motor, remolques y semirremolques, con 11.897 menos y una caída del 7,33%.

Sin embargo, en términos relativos hay sectores con caídas mucho más pronunciadas, aunque tienen menos efecto en la afiliación porque concentran menos ocupados. La extracción de antracita, hulla y lignito es la que más cae, un 32,8%, seguida de la reparación de ordenadores, efectos personales y artículos de uso doméstico (-16,5%) y las actividades de organizaciones y organismos extraterritoriales (-14,2%). También destacan las caídas en actividades relacionadas con el alquiler (4.814 empleados menos y decrece un 4,7% respecto a 2019), en personal doméstico (3.429 trabajadoras menos, cae un 8%) y en las agencias de viajes (1.537 empleados menos y una caída del 2,3%).

A continuación puede consultar los datos al completo para cada categoría del CNAE. Se mantienen los números para distinguir más adecuadamente cada apartado:

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