El juez amplía un mes más el secreto del sumario que investiga la relación del BBVA con Villarejo

La Audiencia Nacional ha decidido prorrogar, al menos un mes más, el secreto del sumario donde se investigan las relaciones entre el BBVA y el comisario jubilado José Manuel Villarejo, encarcelado desde 2017 por liderar supuestamente una macrotrama de corrupción. Según consta en un auto dictado el pasado 3 de enero por el magistrado Alejandro Abascal, al que ha tenido acceso EL PAÍS, el órgano judicial toma esta decisión para practicar nuevas diligencias solicitadas por la Fiscalía. "Y para cuya plena efectividad deben seguir necesariamente practicándose sin conocimiento del resultado", apostilla el instructor, que incide en que esta iniciativa no afecta al derecho de defensa de los imputados, que podrán acceder a todo el contenido de las pesquisas cuando se "levante" el secreto.

Los investigadores adoptan esta decisión, que amplía el secreto hasta el próximo 4 de febrero, después de que la Fiscalía y el juez instructor interrogasen durante cerca de 14 horas al representante legal de la entidad financiera —Adolfo Fraguas, director de los Servicios Jurídicos del BBVA España—. El Ministerio Público sospecha que el banco, imputado como persona jurídica, contrató a Villarejo para espiar a líderes políticos, empresariales y periodistas durante el mandato del anterior presidente de la entidad, Francisco González. Una relación que se prolongó desde 2004 a 2018 y que implicó una facturación de cerca de 11 millones de euros a las empresas del comisario jubilado.

El Banco Central Europeo (BCE) ha pedido, además, a la Audiencia Nacional que le facilite la investigación interna sobre esta cuestión realizada por el BBVA, denominada informe forensic, para conocer de primera mano las implicaciones de los actuales consejeros y directivos del BBVA en el caso Villarejo. Esta es una documentación que la entidad financiera ha aportado a la causa y que ha generado dudas en los fiscales.

Mientras tanto, la Audiencia Nacional continúa ampliando la investigación sobre las relaciones del comisario jubilado con las empresas del país. Además de al BBVA, estas pesquisas ya han salpicado a otras grandes compañías como Iberdrola, Repsol, Caixabank, Mutua Madrileña y la constructora San José.