Los españoles compensan la caída del turismo extranjero en los alojamientos extrahoteleros

La caída de la demanda turística extranjera en España se deja notar también en los alojamientos extrahoteleros. Aunque en agosto creció la cifra total de pernoctaciones en este tipo de establecimientos (apartamentos, campings, albergues y alojamientos de turismo rural) creció un 1,8%, hasta 25,3 millones de noches, lo hizo gracias a los ciudadanos españoles, mientras que los extranjeros realizaron menos estancias, según los datos publicados este viernes por el INE.

Al igual que se pudo ver en la encuesta de coyuntura hotelera de agosto, la demanda española es la que está tirando actualmente de las cifras, ante el ligero retroceso en la llegada de extranjeros a España (-1,3% en julio, según el INE). En agosto, las pernoctaciones en hoteles aumentaron ligeramente, un 1,5%, pero fue gracias a los residentes, que pasaron un 3,7% más de noches en los hoteles, mientras que las estancias de extranjeros apenas se movieron, un 0,1%.

Una situación muy similar se ha notado en los alojamientos extrahoteleros, cuyos datos ha ofrecido el INE este viernes. En este caso, el aumento de la demanda nacional compensa la caída de la foránea: si los residentes en España aumentaron un 4,1% sus pernoctaciones, los extranjeros las redujeron un 0,6%.

El fenómeno se da en varios de los formatos de alojamiento que analiza el INE. En apartamentos turísticos, los residentes hicieron un 3,6% más de noches en agosto y los extranjeros, que copan un 60% de la demanda, un 1,6% menos, para un crecimiento total del 0,3%. Igual pasa con los alojamientos rurales, donde los españoles realizaron un 4,5% más de noches y los extranjeros, un 2,4% menos. En el caso de los cámpings, hay aumentos de los dos grupos, aunque mucho mayor en el caso de los residentes, 4,5% frente a 0,9%. El único formato en el que se da una situación inversa es en el de los albergues, que registraron un 7,5% más de noches gracias al aumento de la demanda extranjera (+23,4%), muy superior a la de los residentes (+1,5%).

Los apartamentos registraron en agosto una tasa de ocupación del 58,8%, 1,6 puntos más que en el mismo mes del año pasado, con un aumento del 2,4% de los precios. También estuvieron más ocupados los cámpings, al 58%, casi dos puntos más que hace un año, pese a que fueron un 2,38% más caros. Las plazas en los alojamientos rurales se encarecieron un 2,5%, si bien la ocupación apenas varió respecto al año pasado, quedándose en el 42,6%. Los albergues tuvieron un 44,9% de sus plazas ocupadas, 2,6 puntos más que en agosto del año pasado.