Ana Botín viaja a Silicon Valley en busca de inspiración

Pocos días después de abrir su cuenta de Twitter, Ana Botín, presidenta del Banco Santander, ha visitado Silicon Valley, la cuna de la tecnología, acompañada del consejo de administración. El lunes tuvo un encuentro con más de 15 emprendedores y directivos de empresas tecnológicas con intención de detectar tendencia en dos planos de especial relevancia: el análisis de datos y los pagos. El banco se encuentra en una fase de cambio en el que quiere apostar por la tecnología, lo que va a incluir una fuerte inversión en los próximos años. A principios de febrero, en la presentación de resultados, Botín cifró en 2.000 millones la inversión tecnológica realizada en 2017 y fijó la digitalización como la gran prioridad de este año.

Al Santander le interesa especialmente mantener atención a las disrupciones del sector financiero. Entre las empresas con las que debatieron estos temas ayer en Silicon Valley había representantes de Google; Andreessen Horowitz, uno de los fondos de inversión más reputados en la zona; así como Radius, Cyence, Credit Karma y Cloudera, dedicadas al análisis de datos. Dentro de los pagos contaron con las impresiones de Venmo, Stripe, una de las firmas más ilusionantes por su rápido crecimiento, Affirm y Ripple.

La eclosión del coche eléctrico es otro de los focos de interés del banco español. Contaron con voces de Tesla, Solera, AutoFi y Harman. Además de dialogar con Facebook, cuya sede visitaron acompañados por varios directivos de la red social.

Reuniones formales e informales

La mañana del martes estuvo dedicada a la sesión ordinaria del consejo en San Francisco. Fue entonces cuando se acordó proponer en la próxima junta de accionista la incorporación al consejo del portugués Álvaro Antonio Cardoso de Souza. Es el presidente de la filial brasileña.

Por la tarde la directiva tuvo un encuentro con el talento hispano de la zona, en Sand Hill Road, el equivalente a Wall Street en la costa oeste, el lugar donde se fraguan los acuerdos y donde los fondos de inversión tienen sus sedes, muchas veces en antiguas viviendas o naves industriales.

Entre los asistentes estuvieron algunos conocedores de la zona con arraigo, como Carlos Barrabés o Luis Martín. La investigadora de Berkeley Soledad Antelada, los fundadores de Intelygenz, el venezolano Julio Quintero, experto en materiales, o Alex Acero, español al frente de Siri en Apple o John Freddy Vega, de Platzi, compartieron su experiencia e inquietudes con Botín. Se habló desde blockchain a ciberamenazas, pasando por la educación del futuro.

Atención a las emprendedoras

Entre las mujeres emprendedoras destacaron las latinas Paola Santana, creadora de un sistema de envío de objetos con drones, Agustina Sartori, uruguaya fundadora de GlamSt, y Margarita Rojas, responsable de expansión de Asana.

Los tres socios al frente de Gate 93, Ibai G. Urruchua, Juanjo Feijoo y Javier Cortés explicaron cómo un fondo de inversión creado por profesionales establecidos en Silicon Valley, están impulsando la llegada de startups españolas. Las dos inversiones iniciales han sido SpotaHome y ShopperMotion.

Botín agradeció sus aportaciones y valoró su labor como necesaria para el avance de España y América Latina, con especial énfasis en la importancia del aprendizaje de los métodos de Silicon Valley.