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Panamá colaborará con las investigaciones fiscales y judiciales

La embajadora del país centroamericano en España anuncia que cooperará vigorosamente con la Agencia Tributaria y con las autoridades judiciales

La embajadora de Panamá en España, María Mercedes de la Guardia de Corró.Foto: atlas | Vídeo: Zipi (EFE) | ATLAS
J. S. G.

Los papeles de Panamá, la filtración de 11,5 millones de documentos sobre la constitución y registro de sociedades offshore a través del despacho panameño Mossack Fonseca, ha puesto al pequeño país centroamericano bajo los focos. La embajadora de Panamá en España, María Mercedes de la Guardia Corró, ha participado este martes en un desayuno informativo, donde ha manifestado la voluntad del Gobierno de su país de colaborar estrecha y vigorosamente tanto con la Agencia Tributaria como con las autoridades judiciales conforme se vayan abriendo los casos para ayudar a dilucidar si a través de estas sociedades se cometieron alguna ilegalidad, blanqueo de capitales, o evasión de impuestos. De la Guardia ha tratado así de despejar las dudas sobre la permisividad de Panamá con estas actividades y desmarcarse de la etiqueta de paraíso fiscal, que aún le ponen algunos países.

"Nos sentimos afectados", ha manifestado durante su intervención en un desayuno informativo patrocinado por la constructora española Sacyr, adjudicataria de las obras del Canal, que se inaugurarán el próximo 26 de abril. "Sobre los papeles de Panamá, prefiero llamarlos los papeles de Mossack Fonseca. Solo el 20% de las sociedades registradas por estas empresas son en Panamá".

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De la Guardia ha recordado que Panamá suscribió en 2011 un acuerdo de doble imposición por el cual se comprometió a compartir información. Y ha recordado que hace un año mantuvo un reunión con el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en el que le preguntó cómo estaba funcionando este sistema de intercambio de información. Según la embajadora, desde el Departamento de Hacienda le comunicaron que debido al cambio de Gobierno en Panamá habían surgidos algunas dificultades. Unos meses más tarde, en una reunión celebrada en París, ha contado la embajadora, el representante español le confirmó que los problemas se habían solucionado. 

"El presidente ha dicho que Panamá colaborará activamente con la investigación. El gobierno panameños tiene un compromiso de tolerancia cero con la corrupción. Panamá va a ser colaborador y especialmente con España con quien tenemos un acuerdo de intercambio de información desde 2011. Panamá va a colaborar y cooperar vigorosamente conforme se vayan abriendo procedimientos judiciales", ha insistido.

Un país sin acuerdo de intercambio de información

La embajadora ha defendido la posición de su país de no suscribir el acuerdo multilateral de intercambio automático de información, que ya han suscrito más de 80 países en todo el mundo. Ha justificado que iría en contra a su constitución y que podría vulnerar algunos derechos de sus ciudadanos. También ha deslizado la importancia de esta posición por ser Panamá un país pequeño con menos de cuatro millones de habitantes.

"Lo que se está cuestionando es el concepto de las sociedades. Hay cierta confusión. Hasta hace poco se podían emitir acciones al portador. Pero ya no. Ahora los bancos no las admiten y las que aún permanecen las están retirando. El caso afecta a una firma (Mossack Fonseca) pero afecta a la imagen de Panamá", ha remachado la embajadora.

"La confidencialidad es una aspiración no solo de los delincuentes pero también es legítima para quien quiera permanecer en el anonimato sin cometer acciones ilícitas. Ojalá eso desincentivo el uso de los servicios offshore para actividades ilícitas", ha concluido.

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Sobre la firma

J. S. G.
Redactor jefe de Economía y Negocios en EL PAÍS. Estudió Económicas y trabajó cinco años como auditor. Ha cubierto la crisis financiera, contado las consecuencias del pinchazo de la burbuja inmobiliaria, el rescate a España y las reformas de las políticas públicas de la última década. Ha cursado el programa de desarrollo directivo (PDD) del IESE.

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