Inflación en España: tendencia en positivo
El dato de precios al consumo en España (IPC) sorprendió al alza el pasado viernes, al situarse en un -0,3% en términos interanuales, pero con una subida del 0,3% en el mes de noviembre respecto a octubre. De este modo, encadenamos tres meses de subidas de precios desde el mínimo marcado en el mes de septiembre, un -0,9%.
Varios factores son los que subyacen detrás de esta subida. Por una parte, el efecto escalón que causa en el dato de inflación la fuerte caída en los precios del petróleo durante el año se va disipando, puesto que, mes a mes, vamos comparando con precios más similares en los componentes de energía, lo que resta magnitud al descenso global de los precios.
Por otra parte, se observa también una recuperación en los precios de los servicios (+0,8% año sobre año en octubre), lo que da también una buena medida de cómo la actividad económica va recuperándose en nuestro país, y con ella, los precios. Siguiendo con el indicador de la inflación en los servicios, éste entró en negativo en octubre de 2013 y permaneció prácticamente siempre en rojo durante un año, marcando mínimos en marzo de 2014 (-0,4%).
En definitiva, el hecho de que los precios de los servicios se esté recuperando es un indicador retrasado que viene a confirmar algo que se viene percibiendo desde hace ya varios trimestres: los principales dinamizadores de la recuperación económica que experimenta el país son, de hecho, el consumo privado y la demanda interna, que se expande a ritmos cercanos al 4%. En 2013, cuando el dato de la inflación de servicios entró en terreno negativo, la demanda interna se contraía justo en la medida opuesta: -4%.
Esta constatación del mayor dinamismo en la economía apuntala también las buenas perspectivas para el mercado laboral, que debería seguir recuperándose en los próximos trimestres en términos de número de ocupados, aunque los elevados niveles de desempleo siguen siendo todavía un riesgo principal para España, a la vez que alejan la posibilidad de ver subidas salariales en el corto plazo.
En definitiva, esperamos que el crecimiento económico se mantenga en España durante el año próximo, aunque posiblemente sea a tasas inferiores a las actuales: cerca, aunque por debajo del 3%. El menor crecimiento mundial ralentizará la recuperación española, aunque se mantendrá ampliamente por encima de la media de la Eurozona.
En este sentido, la inflación seguirá siendo un indicador importante: la recuperación en los precios y la velocidad a la que se mueve el dinero serán los que confirmen la recuperación en la economía real, y también los que marquen el ritmo en la política del BCE.
Alejandro Vidal es director de Estrategia de Mercados de Banca March
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.