España emite 1.390 millones en bonos a 10 ligados a la inflación a tipos bajos

El Tesoro Público ha vuelto este jueves al mercado a pedir prestado y, de nuevo, con un descenso de los costes por financiarse. En esta ocasión, el instituto emisor ha optado por emitir bonos ligados a la evolución de la inflación, algo que hasta la fecha solo había hecho en tres ocasiones. En total, ha captado 1.390 millones a 10 años con un tipo de interés inferior al 1%.

Según datos del mercado, la subasta se ha cerrado con un tipo marginal (el último antes de cerrar la operación) del 0,889%, por debajo del 1,483% de la anterior emisión del mismo tipo de títulos y al mismo plazo, del 10 de julio. La demanda, por su parte, ha alcanzado los 2.870 millones.

Con este tipo de subastas especiales —contempladas en la Estrategia de Financiación que el Tesoro presentó a principio de año— se pretende dar liquidez al bono que se emitió por primera vez el 13 de mayo. En estas subastas especiales no hay un objetivo de captación de fondos, como sí ocurre en las subastas ordinarias. Además, permiten ampliar la base de inversores atrayendo a compradores que no acuden habitualmente a las operaciones tradicionales, algo imprescindible ahora que las necesidades de financiación del Estado están en máximos históricos con 242.000 millones.

Los bonos vinculados a la inflación se diferencian en que su principal crece según los precios durante toda la vida del título, aunque a cambio de abonar un cupón anual más bajo. La consecuencia de ello es que el Tesoro paga menos al principio y concentra la mayor parte del desembolso en el vencimiento.

Desde el comienzo del año el Tesoro ha captado 126.448 millones de euros dentro del programa de financiación regular a medio y largo plazo. Esta cifra supone un 97,8% de la previsión de emisión a medio y largo plazo para todo el año. El coste medio de la deuda del Estado a la emisión se sitúa en el 1,61% a 31 de octubre, frente al 2,45% de cierre de 2013.