España avanza en competitividad, según el Foro Económico Mundial

La competitividad de España remonta respecto al resto de países de la Unión Europea (UE). La segunda edición del Índice de Competitividad en Europa del Foro Económico Mundial presentada este martes en Bruselas deja buenas noticias para la economía española y agridulces para el conjunto de la Unión. España avanza dos puestos (del 15º al 13º) en una clasificación liderada por Finlandia y en la que los países escandinavos y del noroeste de Europa copan los 10 primeros lugares. En el lado contrario, los vecinos del este cierran la lista de los 28 Estados miembros. El informe deja escaso lugar para la complacencia en el conjunto de la Unión y apela a los Gobiernos europeos a proseguir con las reformas para acortar la brecha de productividad que aún separa a Europa de EE UU.

El Foro Económico Mundial sitúa a España mejor que la media europea en cinco de los diez pilares que tiene en cuenta para elaborar su índice —crecimiento inteligente (13ª de 28), agenda digital (12ª), educación y formación (11ª), crecimiento sostenible (11ª) y sostenibilidad ambiental (11ª)— y valora negativamente su desempeño en tres ámbitos —entorno empresarial (21ª), crecimiento inclusivo (19ª) y, sobre todo, empleo (25ª)—. En inclusión social e innovación, España se sitúa en la media comunitaria.

Para el conjunto de la UE, la institución —reconocida internacionalmente por organizar cada año el Foro de Davos (Suiza), en el que participan líderes políticos y empresariales de todo el mundo—, reclama a la nueva Comisión Europea que coloque la competitividad "en el centro" de su política económica para los próximos cinco años y destaca que la UE aún figura por detrás de EE UU en sus esfuerzos por construir una economía basada en la innovación y en el conocimiento. "En el largo plazo, las economías competitivas tienden a ofrecer mejores oportunidades a sus ciudadanos y a crear sociedades más inclusivas y ecológicamente sostenibles", advierte el informe.

Los técnicos del Foro también llaman la atención sobre las diferencias "persistentes" en el seno de los Veintiocho. "Esta disparidad es un problema para el conjunto de Europa, no solo para los Estados miembros menos innovadores", subrayan. Para solventar esta disparidad, su receta no diverge del mantra al que recurrentemente acuden las instituciones comunitarias: mayor inversión en educación y en sectores intensivos en conocimiento, implantación de una verdadera agenda digital y eliminación de las barreras al emprendimiento.

El Foro Económico Mundial sí valora el desempeño de Europa en la construcción de una economía "más accesible" para el conjunto de la sociedad. En concreto, la institución alaba la universalidad del sistema sanitario en muchos países europeos, la menor incidencia de la desigualdad en relación a sus pares occidentales, la mayor efectividad de sus Gobiernos en la lucha contra la pobreza y el desarrollo de las energías renovables como base de la sostenibilidad medioambiental.