Los dueños de un coche viejo recibirán 2.000 euros por la compra de otro

El Gobierno ha salido en ayuda del sector del automóvil con un nuevo plan de ayudas a la compra para impulsar un mercado que está bajo mínimos, tanto en ventas como en fabricación. Los propietarios de un turismo de más de 12 años (10 años en el caso de los vehículos comerciales ligeros) que lo cambien por otro nuevo de bajo consumo y emisiones recibirán 2.000 euros de ayuda. El precio del vehículo adquirido no podrá superar los 25.000 euros (sin IVA), salvo si se trata de un eléctrico o un híbrido enchufable.

La Administración se hará cargo de 1.000 euros de esa ayuda, mientras el fabricante o importador financiará otro tanto. El nuevo plan se llama PIVE (Programa de Incentivos al Vehículo Eficiente) y estará en vigor desde el lunes próximo hasta el 31 de marzo de 2013 (o cuando se agoten los fondos, de 75 millones), según un comunicado del Ministerio de Industria. La condición para acogerse a estas ayudas es adquirir vehículos eléctricos, híbridos, híbridos enchufables, convencionales de bajo consumo o propulsados por gas. Los detalles se pueden consultar en la web del IDAE, que articulará las ayudas (www.idae.es).

El coche viejo deberá darse de baja para ser achatarrado. El objetivo de Industria es que se sustituyan 75.000 vehículos con este plan. El departamento que dirige José Manuel Soria estima que el ahorro energético asociado a esta iniciativa rondará los 26,1 millones de litros de combustible al año, equivalente a 166.000 barriles de petróleo, lo que significa un ahorro de 16 millones de euros al año.

El nuevo plan de ayudas, una iniciativa que el sector llevaba reclamando hace meses, llega a pesar de que el  ministro de Industria, José Manuel Soria, asegurara en septiembre que no había presupuesto para medidas directas de este tipo. Pero los malos datos de este mercado (se prevé que este año se vendan menos de 700.000 vehículos y se fabriquen menos de dos millones de unidades, los peores niveles desde comienzos de los noventa) parecen haber hecho cambiar de opinión al Ejecutivo. Además, la caída de las ventas ha provocado un envejecimiento del parque, el más viejo de Europa después de Grecia (casi la mitad de los turismos en circulación en España tiene más de diez años de antigüedad).

Para el sector, la noticia supone un alivio. “Esta medida es un avance importante hacia una política industrial transversal que ponga en valor tanto los aspectos comerciales como industriales de toda la cadena de valor del sector. El automóvil confía en nuestro país como emplazamiento industrial y comercial”, indicaron las principales asociaciones de fabricantes y concesionarios (Anfac, Faconauto, Aniacam y Ganvam) en un comunicado conjunto. También recordaron que “este año [en el sector] se han anunciado inversiones por valor de 800 millones de euros y, en este entorno, es fundamental la recuperación del mercado interior”. En España hay instaladas casi un veintena de fábricas.

Se da la circunstancia de que Luis Valero, ex director general de Anfac, que agrupa a los fabricantes instalados en España, es el actual secretario general de Industria.

El último plan de ayudas a la compra de coches, el 2000E, puesto en marcha por el anterior ministro de Industria, Miguel Sebastián, supuso un respiro para el sector. La patronal de los fabricantes Anfac calculó en su día que el plan contribuyó, en el año 2009, año de su entrada en vigor, a conservar 30.000 empleos en el sector del automóvil. En el primer semestre de 2010, el último en vigor, consiguió que las ventas crecieran más del 40%. El plan contemplaba ayudas de 500 euros por parte de la Administración para adquirir un vehículo nuevo o usado, y un descuento de 1.000 euros por parte del fabricante o importador en el caso de vehículo de primera matriculación.