El 60% de las instalaciones del sector del cemento están infrautilizadas

La crisis económica no deja títere con cabeza. El consumo de cemento ha caído un 34,7% en el primer semestre de 2012 respecto al mismo periodo del año anterior, con un consumo total de 7,2 millones de toneladas. La patronal del sector, Oficemen, ha presentado esta mañana el balance del sector en lo que va de año y las previsiones para el conjunto de 2012. Estas reflejan una caída global del 25% en el consumo, que rondará a finales de año las 15 millones de toneladas. La cifra representa un descenso del 73% en comparación con el máximo histórico alcanzado en 2007, con 56 millones de toneladas. Unos datos de estas características no se apreciaban en el sector desde 1964.

Juan Béjar y Aniceto Zaragoza, presidente y director general de Oficemen respectivamente, han sido los encargados de presentar las "nada halagüeñas" cifras que maneja el sector. Zaragoza ha tachado el 2012 de "año complicadísimo" y ha admitido que el descenso del consumo anunciado "no se podía imaginar hace 10 años". Béjar ha destacado que en los años anteriores a la crisis, España era el quinto productor mundial de cemento "y en cinco años se ha pasado al puesto 22".

Las causas principales del descenso en el consumo nacional de cemento se achacan a la bajada de la obra civil, que ha pasado de representar el 64% en el primer trimestre de 2011, a apenas superar el 50% en la actualidad. Zaragoza señaló que antes de la crisis a obra pública se dedicaba un tercio de la producción, y que ahora el patrón se ha invertido y esta supone dos tercios, lo que agudiza la crisis en el sector porque la inversión pública no se recompone. Donde sí ha aumentado el consumo es en la edificación, pero no en la residencial, donde apenas ha crecido un 1% (representa el 20% del total), sino en la no residencial, con un ascenso de 12 puntos porcentuales en un año hasta acaparar el 29% del destino final del consumo de cemento.

Durante el primer trimestre del año, el incremento mayor en el marco de la edificación no residencial se produjo en las instalaciones agrarias, ganaderas e industriales y en los servicios comerciales y almacenes, con una subida del 3% en cada área. Aun así, la construcción de instalaciones de turismo, recreo, deporte y transporte representan la mayoría de la edificación no residencial: un 45%; es decir, tres puntos menos que en el primer trimestre de 2011.

La obra civil sigue estando fuertemente segmentada. Las carreteras se llevan la mayor parte del consumo de cemento gris (un 22% entre enero y marzo de 2012), seguidos de tren-metro-Ave, que representan un 17%. Estas han aumentado un 2% respecto al mismo periodo del año pasado, idéntico porcentaje al de puertos, muelles y diques que hoy suponen un 9% del total. La mayor caída, en torno al 3%, la registran obras de urbanización, plazas y parques (un 12% del total).

Con la actual demanda el sector tiene infrautilizadas el 60% de sus 35 plantas en España. El presidente y el director general de Oficemen han declinado evaluar el posible impacto que esta parada puede tener en el mantenimiento o no de los puestos de trabajo. "Cada empresa es la encargada de elaborar sus planes de adaptación", ha señalado Béjar. "Hasta 2014 no se prevé la recuperación de la plena capacidad de funcionamiento", ha sostenido Zaragoza. El presidente de la Asociación ha considerado la flexibilidad laboral en las empresas como una "necesidad" para afrontar la actual crisis en el sector.

Juan Béjar, quien preside desde marzo de este año la asociación y está también al frente de la empresa Cementos Portland Valderrivas (filial de Fomentos de Construcciones y Contratas), mostró su acuerdo con las medidas de ajuste anunciadas ayer por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy: "Van en la dirección correcta y son imprescindibles", ha señalado. La anunciada subida del tipo general del IVA del 18% al 21% afectará también al cemento, pero Béjar ha mostrado su "esperanza" de que el anuncio gubernamental "contenga el déficit" y ayude a abrir los mercados.

Exportaciones

El refugio económico del sector están siendo las exportaciones, que han aumentado un 40% respecto a 2011, aunque en conjunto la producción de cemento ha sufrido un descenso del 28% en el primer semestre de 2012 respecto al mismo periodo de 2011 (11 millones de toneladas frente a los siete del año pasado). Béjar ha señalado que los principales receptores de cemento producido en España son los países europeos a los que se tiene acceso por vía marítima, así como el norte y oeste de África y Estado Unidos.

Las críticas del presidente de Oficemen se han centrado en las "condiciones desfavorables" en las que el cemento español debe competir en el sistema debido a la tarifa eléctrica. Béjar ha estimado que el coste energético de producción se encuentra alrededor del 18%. "El sistema industrial pierde competitividad por los problemas en la tarifa, tanto en el mercado externo como en el interno". Desde Oficemen se ha pedido que el sector no asuma los costes de generación, transporte y distribución porque lo contrario lo sitúa en una posición de "desventaja" en el Mercado. "El coste variable más el fijo hacen que el producto se encarezca", ha señalado Béjar y "los receptores no priman la calidad, sino el precio".