Portugal aprueba el tercer examen de la troika y dice que no necesita “más dinero”
FMI, UE y BCE dan el visto bueno al envío de los 14.600 millones de euros
El Gobierno portugués ha aprobado el tercer examen de la troika y recibirá, por tanto, en las próximas semanas, la cuarta parte del préstamo acordado en mayo por el FMI, la UE y el BCE para salvarla de la bancarrota. Los inspectores de estas instituciones, que durante dos semanas han examinado las cuentas del Gobierno luso, han dado, así, el visto bueno al envío de los 14.600 millones de euros correspondientes a este tramo. Más allá de las cifras (el préstamo entero es de 78.000 millones de euros), el ministro de Finanzas, Vítor Gaspar, ha querido dejar claro en una rueda de prensa hoy que Portugal, cuyos habitantes sufren un fortísimo programa de recortes, está cumpliendo los plazos y los compromisos adoptados. Con todo, Gaspar añadió que la recesión que estrangula al país será más fuerte de lo que el Gobierno había previsto y elevó dos décimas la cifra manejada hasta ahora, pasando de 3,1% a 3,3%, y así hacerlas coincidir con las de la Unión Europea.
Muchos analistas y economistas desconfían de que Portugal pueda regresar a los mercados en septiembre de 2013, tal y como está previsto. El último en afirmarlo ha sido el premio Nobel Paul Krugman, de visita en Lisboa. Los expertos también opinan que el país necesitará llevar a cabo una quita de la deuda o renegociarla. Gaspar, por el contrario, está convencido de que Portugal cumplirá todos los plazos exigidos: “Hoy por hoy, no necesitamos ni más dinero ni más tiempo”. Pero dejó abierta una puerta de salida: “Nuestros socios europeos, de cualquier modo, ya nos han manifestado su disponibilidad para ayudar en caso de que, por circunstancias fuera de control, no pudiéramos regresar a los mercados en 2013”.
La recesión será más fuerte de lo que el Gobierno había previsto
Portugal, según Gaspar, mantendrá el objetivo de déficit exigido para 2012, el 4,5%. En 2011 se quedó en el 4% después de una controvertida decisión contable: El Gobierno conservador de Pedro Passos Coelho aprobó en diciembre la transferencia a la Seguridad Social lusa de 6.000 millones de euros procedentes de los fondos de pensiones del sector bancario. Esto significó una rebaja de unos 3 puntos porcentuales del déficit.
Convencido de que, para separar su suerte de la de Grecia, Portugal debe desempeñar el papel de alumno obediente en Europa, el ministro de Finanzas añadió que la austeridad requerida a los portugueses es el único camino para salir del hoyo económico y que hoy por hoy no existe una solución alternativa. “El programa de ajuste presupuestario avanza como está previsto. Y es importante persistir en él, es la mayor garantía de éxito y la base de la futura prosperidad. Sabemos dónde estamos y lo que tenemos que hacer”, resumió. Gaspar no ve hasta el final de 2012 un cambio de tendencia. “Aunque, dado el calibre del programa de ajustes, nunca visto antes, y las incertidumbres de la economía mundial, hay que estar continuamente alerta”, añade. El paro, que se sitúa actualmente en el 14%, subirá a lo largo de este año hasta el 14,5%. Sólo hasta bien entrado 2013, según Gaspar, no comenzará a bajar.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.