Los ejecutivos de Yukos huyen de Rusia temerosos de ir a la cárcel

Altos ejecutivos del grupo petrolero ruso Yukos han huido del país, temerosos por su propia seguridad a raíz de una oleada de arrestos y órdenes de detención dictadas por los fiscales de ese país.

"No queda de momento en Rusia un sólo miembro del consejo de dirección" de la compañía, aseguraron fuentes próximas a Yukos al diario Financial Times, que publica hoy la noticia en primera página y habla de un "ambiente de terror" dentro del grupo.

Yukos, a la que el Estado reclama más de 20.000 millones de dólares de impuestos no pagados, está dirigida actualmente por control remoto, dijeron esas fuentes. Según el diario británico, la alta dirección de la compañía celebró esta semana una reunión en la capital británica.

Bruce Misamore, director de finanzas de Yukos a la vez que ciudadano estadounidense, declaró al periódico no estar dispuesto a sacrificar su vida a los objetivos políticos de Rusia. Misamore, que está actualmente en Londres, aseguró que no regresaría a ese país mientras no se le garantizase la "seguridad y libertad".

El director de finanzas había sido convocado el miércoles por la Fiscalía General de Rusia, pero no acudió y adujo que estaba en un viaje de negocios. "Estoy dispuesto a hablar con ellos siempre y cuando lo que busquen sean respuestas, pero no si tratan de hacer su política", declaró. Según Misamore, la policía rusa registró el despacho de Steven Theeds, principal ejecutivo de Yukos, que está también al parecer en Londres.

El Gobierno ruso aprobó la pasada semana la venta forzosa de Yuganskneftegas, el principal activo de Yukos, por 8.600 millones de dólares, aproximadamente la mitad del valor que se le atribuye. Pese a todo, la dirección de Yukos no ha optado por declarar la quiebra de la compañía. "Si declaras quiebra y el fiscal determina que los activos superan la deuda, te expones a que te procesen", explicaron al periódico británico fuentes de Yukos.

Jodorkovsky y Lebedev

Hasta ahora, la Fiscalía rusa se ha centrado en los principales accionistas del grupo, Mijail Jodorkovsky y Platon Lebedev, encarcelados y en espera de juicio por fraude y evasión fiscal.

Según fuentes próximas a la empresa, la persecución de que son objeto sus ejecutivos por parte de las autoridades rusas están paralizando sus actividades. "No se puede establecer la estrategia de la compañía desde Londres. Es absurdo", manifestó Alexei Kandaurov, ex general del KGB que estuvo hasta el año pasado al frente del departamento de análisis de Yukos.

En el transcurso de los diez últimos días, la Fiscalía rusa ha detenido a un ejecutivo de medio nivel y ha dictado orden de detención contra otros dos. Las autoridades rusas han intentado asimismo arrestar al abogado del grupo, Dmitry Gololobv, que está también en la capital británica. "Casi todos los días se producen registros en las casas de los empleados de Yukos. Hay un ambiente de terror en la compañía", aseguró al periódico una persona próxima a la empresa.